Tipos de inhaladores para el tratamiento del asma

Escrito y verificado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas

Escrito por Nelton Abdon Ramos Rojas

Última actualización: 03 octubre, 2024

El asma es una afección que puede producirse por la combinación de diversos factores. Algunas personas solo requieren tratamiento durante el ataque, mientras que otras deben recurrir a otro tipo de medidas. Dentro de lo que constituye el tratamiento se encuentran los inhaladores.

Según las causas y la gravedad del caso, se deberá utilizar un determinado tipo de inhalador u otro. Veamos más a continuación. 

Tipos de inhaladores

Inhaladores dosificadores

Este tipo de inhalador contiene una sustancia líquida que será nebulizada e inhalada por la persona asmática. Su aspiración se logra gracias a espaciadores especializados para ayudar a extender el alcance de la inhalación hasta los pulmones.

Aerosoles en polvo seco

En este tipo de aerosoles el principio activo broncodilatador forma pequeñas motas de polvo que serán inhaladas gracias a la presencia de un dispensador. Estos inhaladores están constituidos por tres componentes principales básicos: el fármaco, el reservorio donde se almacena y el dispensador que facilita su administración.

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Clasificación en función del objetivo

El tratamiento del asma puede dividirse en dos categorías, en función de si los fármacos están orientados a prevenir los ataques o a combatirlos. A continuación analizaremos con mayor profundidad ambas categorías:

• Tratamiento para combatir el ataque. El tipo de inhaladores que se utilizan en estos casos funcionan como un alivio rápido y casi instantáneo. Estos medicamentos no deben ser utilizados fuera del episodio asmático, pues no tendrían efecto alguno.

• Tratamiento para prevenir los ataques. Los inhaladores de este tipo son utilizados por personas que sufren ataques de asma frecuentemente. Contiene esteroides que ayudan a prevenir los ataques.

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Clasificación en función del principio activo

Por otro lado, podemos clasificar los distintos tipos de inhaladores en función del principio activo que lleven, el cual puede ir desde antiinflamatorios utilizados para disminuir el exceso de riego sanguíneo en la zona (que dificulta la respiración), hasta broncodilatadores, que actúan directamente sobre el músculo liso que da forma a los bronquiolos.

Inhaladores antiinflamatorios

Los inhaladores que contienen antiinflamatorios se encargan de tratar directamente la inflamación de las mucosas, a través de corticosteroides, tales como:

• Budesónida.
• Fluticasona.
• Mometasona.

Estos eliminan la inflamación y evitan la formación de moco dentro de las vías respiratorias, disminuyendo cualquier tipo de efecto secundario.

Inhaladores broncodilatadores

Los inhaladores con broncodilatadores se encargan de relajar los músculos respiratorios que se encuentran contraídos, ensanchando así las vías respiratorias. Entre los más conocidos se encuentran:

• Formoterol.
• Salmeterol.

Sin embargo, estos medicamentos sólo combaten las molestias y no la causa del asma, es decir, alivian los síntomas solo hasta la siguiente crisis asmática.

Inhaladores combinados

Los inhaladores con broncodilatadores y sustancias antiinflamatorias son utilizados para combatir con el asma con mayor facilidad sin necesitar más de un aparato inhalador. Debido a la combinación de principios activos podríamos decir que son las más útiles y demandados. Entre ellos están los siguientes:

• Formoterol con budesónida.
• Salmeterol con fluticasona.

Efectos secundarios de los inhaladores

Como todo fármaco los inhaladores también presentan efectos secundarios, especialmente si se abusa de ellos, por lo que siempre es recomendable hacer caso a las indicaciones del médico. Entre los efectos secundarios más comunes podemos encontrar:

• Tos.
• Ronquera.
• Aftas bucales.
• Dolor de garganta.
• Irritación de las mucosas bucales.

¿Cómo evitar o prevenir los ataques de asma?

Como toda enfermedad podemos disminuir e incluso hacer desaparecer sus síntomas si tratamos directamente la causa. Sin embargo, en algunos casos ésta es desconocida o no se puede hacer nada para evitarlo. A continuación se exponen algunos consejos para minimizar el número de crisis asmáticas:

• Cubrir las camas y almohadas con fundas hipoalergénicas.
• Eliminar las alfombras y aspirar regularmente.
• Usar detergentes sin fragancias si se padece asma alérgica.
• Mantener los niveles de humedad bajos.
• Mantener la casa limpia.
• Conservar los alimentos dentro de recipientes.
• Bañar constantemente a los animales.
• Evitar el consumo de tabaco.

¿Cuándo acudir a un médico?

Es fundamental acudir al médico cuanto antes si los síntomas no mejoran con el tratamiento y además hay:

• Dolor torácico intenso y constante.
• Dificultad respiratoria al hablar o en reposo.
• Somnolencia, confusión y desorientación persistentes.
• Coloración azulada en el rostro y los labios.

¿Sufres de asma? Ahora que ya conoces un poco más acerca de los distintos tipos de inhaladores, seguramente podrás conversar con tu médico sobre las distintas opciones en mayor detalle.