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Tratar naturalmente un desgarro muscular

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Los desgarros musculares son muy comunes al practicar deportes. Por fortuna, puedes aliviar las molestias generadas con algunos remedios caseros.
Tratar naturalmente un desgarro muscular
Leonardo Biolatto

Escrito y verificado por el médico Leonardo Biolatto

Escrito por Valeria Sabater
Última actualización: 19 marzo, 2024

Los desgarros son pequeñas roturas de fibras musculares, provocadas por un impacto o una fuerza potente que se ejerce en el momento de una contracción muscular. Si bien pueden comprometer a cualquier músculo, lo más frecuente es que se afecte la espalda baja, el cuello, los hombros o los isquiotibiales. Por fortuna, es posible tratar un desgarro muscular leve con métodos naturales.

La afección es muy dolorosa. Incluso, afecta la movilidad. Por eso, vale la pena conocer qué estrategias se deben seguir en casa para recuperarse lo antes posible o atenuar las molestias. ¡Toma nota!

¿Por qué se produce un desgarro muscular y cómo se clasifica?

En ocasiones, queremos coger algo, lo cargamos con fuerza y, al instante, sentimos una quemazón muy fuerte en los miembros superiores. Este movimiento puede causar un desgarro muscular. También es frecuente que aparezca tras un golpe, algún pequeño accidente de tráfico o hasta practicando deporte.

De acuerdo con un artículo de la Harvard Medical School, los médicos clasifican esta lesión en tres grados, según su gravedad:

  • Primer grado: es una lesión leve, en la que solo unas pocas fibras musculares se estiran, con microrroturas que muchas veces ni siquiera llegan a ser un desgarro completo. Lo más probable es que sientas dolor al moverte, pero puedes recuperarte con el simple reposo en casa.
  • Segundo grado: hay un mayor número de fibras lesionadas y suele experimentarse bastante dolor. Es habitual que, de inmediato, emerja un bulto bajo la piel por la acumulación de sangre (hematoma). El músculo no se ha roto del todo, pero el compromiso es relevante.
  • Tercer grado: este es el desgarro muscular más grave, ya que hay una rotura completa en la extensión de las fibras. De inmediato emerge un color morado, signo de que hay sangre acumulada. Puede sentirse un súbito crujido al momento de la lesión y aparece inmovilidad inmediata con impotencia funcional.

¿Cuáles son sus síntomas?

En cuanto a los signos y síntomas, varían con relación a la gravedad de la lesión. Pueden implicar lo siguiente:

  • Hinchazón
  • Debilidad muscular
  • Dolor o sensibilidad
  • Movimiento limitado
  • Espasmos musculares
  • Enrojecimiento o hematomas

Métodos para tratar un desgarro muscular naturalmente

Según una publicación de la Clínica Mayo, un desgarro muscular leve o moderado se puede tratar naturalmente en casa con reposo y algunos remedios caseros. Los casos graves, con rotura completa, ameritan un seguimiento por parte de un profesional médico, de modo que se instaure un tratamiento acorde y se evalúe la necesidad de abordajes más invasivos, quizás con cirugía.

Será con métodos complementarios, como una ecografía de partes blandas, que se determinará el grado. Luego, si amerita un tratamiento natural, las medidas serán las siguientes.

1. Compresa fría

En la zona del desgarro muscular, deberás observar si tu piel se pone roja o morada. Si es así, se puede tratar de un derrame de sangre ocasionado por la rotura del músculo. Es un hematoma. Pero también podría ser solo inflamación, que notarás como piel rosada.

Las compresas frías ayudan a reabsorber la sangre más rápido. A su vez, calman el dolor. Incluso, puedes usar el frío local hasta tanto te revise un profesional.

Un estudio científico demostró que la terapia con hielo ayuda a mejorar la lesión en los casos de desgarros musculares agudos. Lo ideal es colocar el frío a los pocos minutos del incidente, teniendo un límite de tiempo máximo de 6 horas para su efectividad.

2. Vendaje

Otra de las recomendaciones para tratar un desgarro muscular naturalmente es utilizar un vendaje y comprimir la zona afectada. Esto es esencial, pero ten cuidado de no ejercer demasiada presión, ya que podrías dificultar la circulación de la sangre.

El vendaje acerca las fibras musculares en sus extremos rotos, de modo que se facilita la cicatrización. El tiempo de uso de las vendas oscila entre 3 y 8 semanas, de acuerdo a la severidad del desgarro.

3. Reposo

Vas a necesitar reposo para la cicatrización. Así que tómatelo con calma, porque necesitarás un tiempo para que el desgarro muscular se resuelva.

Mantén el miembro afectado en alto, junto con el vendaje y el reposo, para que la sangre no se acumule demasiado en la zona dañada. ¡Tener paciencia es clave en el proceso!

4. Sauce para calmar el dolor

Lo habitual es recurrir a los analgésicos antiinflamatorios como el ibuprofeno. Se trata de medicamentos efectivos para acompañar el proceso curativo y aliviar molestias.

Sin embargo, hay personas que no pueden usarlos por contraindicaciones o porque sufren efectos adversos severos por su toma, como la gastritis. Así que recurrir a remedios naturales es una alternativa; solo por unos días y hasta tanto se resuelva el dolor.

En relación con esto, una revisión publicada en Phytotherapy Research señala que el extracto de corteza de sauce tiene efectos analgésicos y antiinflamatorios. Puedes preparar una taza de infusión con 2 cucharadas de ralladura de la corteza y beberla 2 veces al día.

Los investigadores afirman que tiene pocos efectos adversos y que su eficacia analgésica es parecida a la aspirina. Solo hay que tener cuidado con los que son alérgicos a los salicilatos.

¿Se puede prevenir un desgarro muscular?

Los desgarros musculares no siempre se pueden prevenir. De todas maneras, algunas precauciones reducen el riesgo, en especial, al hacer ejercicio.

Son variados los hábitos saludables capaces de prevenir un desgarro. Entre ellos, considera los siguientes:

  • Mantener un peso saludable.
  • Calentar siempre antes de realizar cualquier actividad física.
  • Conservar una buena postura al sentarse, ponerse de pie y levantar cargas pesadas.
  • Seguir una rutina de ejercicios destinada a fortalecer los músculos que más usamos a diario.
  • Incrementar la intensidad de la rutina de ejercicios gradualmente para evitar sobreesfuerzos.

El reposo y la paciencia son fundamentales

Para concluir, ten en cuenta que esta recuperación requiere de tiempo y paciencia. Deberás mantener reposo, para después iniciar una rehabilitación adecuada que te permita recuperar la movilidad del músculo. Sigue la recomendación médica y nuestros consejos para tratar naturalmente un desgarro muscular.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


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