7 cosas que destruyen la relación de pareja
Escrito y verificado por la filósofa Isbelia Esther Farías López
Hay varias actitudes, gestos y palabras que pueden tener un impacto negativo en una relación de pareja. También hay casos en los que, precisamente, es la falta de estas lo que resulta perjudicial.
A medida que avanza una relación, es recomendable conversar acerca de algunas cuestiones con total sinceridad para evitar inconvenientes a futuro.
Hay parejas que caen en el error de callar y dejar pasar lo que les molesta, sin resolverlo directamente con su pareja mediante el diálogo. Creen que evitando comentarlo, se ahorrarán una discusión y no se dan cuenta de que, en el fondo, solo terminan acumulando malestar.
Profundicemos en el tema.
¿Qué puede minar la relación de pareja?
Si bien es cierto que existen centenares de factores que pueden llevar a la pareja al desastre, estos son los más comunes. Hay que tenerlos presentes para no caer en ellos.
1. Dar lugar a terceros para que opinen
Permitir que los amigos o familiares opinen sobre la pareja es un error. Tal vez al principio parezca algo sin importancia y el otro se calle, por educación hacia ellos. No obstante, lo cierto es que puede causar un daño interior muy grave y, con el tiempo, esto puede convertirse en un serio problema.
Es una falta de respeto hacia el otro, además de ser un comportamiento tóxico. Cada pareja es un mundo, y lo que ocurra dentro de esos límites es algo personal.
2. Críticas destructivas
Realizar críticas agresivas o burlas puede ocasionar daños en la autoestima. Si quieres expresar algo, hazlo con amor y delicadeza, de forma asertiva y exponiendo tus puntos de vista con tranquilidad.
Si actúas con agresividad, el otro puede sentirse ofendido o humillado, lo que irá minando la relación de pareja. Piensa antes de abrir la boca, especialmente cuando estés enfadado.
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3. Control excesivo
Algunas personas tienen una necesidad patológica de tenerlo todo bajo control. Eso, casi siempre, incluye a sus parejas y a las personas que rodean a esta.
Obligarle a enseñarte con quién habla, los celos incontrolados o los ataques de ira ante situaciones relacionadas son comportamientos que están fuera de lugar. Ninguna relación sana puede sobrevivir con esta clase de toxicidad.
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4. Ignorar situaciones problemáticas
Seguir la rutina diaria mientras tu pareja está desbordada con una situación es otro de los problemas que destruyen a la pareja. Las cuestiones del hogar, la economía y los niños deben ser compartidos.
Si uno ignora por completo su existencia, el otro cargará con todo y acabará enfadado por la falta de compromiso. Llegado el momento, no se sabrá cuál era la causa principal, pero la relación ya estará dañada.
5. Olvidar las relaciones sexuales
Que uno o ambos muestren desinterés a la hora del sexo también es perjudicial. Las primeras excusas seguramente se aceptan, pero después de varias, puede comenzar una discusión.
Habla con tu pareja sobre lo que está pasando. Puede que exista algún problema subyacente del que no te hayas dado cuenta, o que simplemente esté pasando por una época estresante. Sea como sea, no te guardes tu preocupación y, si lo consideráis, consultad con un sexólogo.
6. Los detalles que enamoraron ya no existen
Al empezar a salir, las parejas suelen estar más atentas a cada detalle del otro. Fechas de cumpleaños, aniversarios o el Día de San Valentín son motivos de tiernos y románticos encuentros. Asimismo, cuando uno se encuentra enfermo, preocuparse por su salud o ayudar en las tareas para que descanse es un algo común.
Sin embargo, muchos en el matrimonio comienzan a olvidar estos puntos y los reproches llegan de inmediato. Parece que están causados por desinterés, despreocupación o falta de amor.
7. Descuidarse a sí mismos
Hay quienes después de conseguir pareja dejan de cuidar su aspecto e incluso su salud. Suben de peso desmedidamente, relegan los ejercicios y ya no recuerdan lo que es un estilista. Da lo mismo estar bien vestidos que con ropa de dormir en casa.
Estas actitudes destruyen la relación de pareja porque provocan que uno de los miembros vea al otro de una forma distinta, generalmente, peor.
Las parejas avanzan siempre de la mano
Es verdad que las personas maduran y cambian a medida que crecen. Por ello, las parejas deben madurar para poder seguir avanzando juntas. En el momento en el que esto no ocurre, aparecen los problemas.
Si te has visto reflejado a lo largo de este artículo, es momento de ponerse manos a la obra. Puede que al principio te cueste, pero los resultados no te decepcionarán. Cuida tu relación y mantendrás tu felicidad.
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