Aprende a cultivar tomate en casa
El tomate es uno de los frutos que no puede faltar en un buen plan de alimentación, ya que contiene vitaminas y minerales esenciales para el organismo; pero, ¿sabías que cultivar tomate en casa es una de las opciones más ecológicas y saludables para comerlo?
Además de realzar el sabor de muchos platos, es fácil de plantar sin necesidad de utilizar pesticidas o químicos añadidos para su crecimiento. De hecho, los métodos caseros son 100 % orgánicos y garantizan un alimento muy gustoso.
Si quieres aprender a cultivarlos, te compartimos algunos puntos clave para conseguirlo. ¡Toma nota!
¿Cómo seleccionar la semilla de tomate?
La semilla de tomate se encuentran en el interior del fruto. Para recolectarlas, se recomienda elegir tomates grandes y maduros; ya que algunas personas creen que existe un 90 % de probabilidad de que los futuros frutos sean de las mismas características.
Una vez elegidas, se deben poner en un lugar fresco, seco y alejado de la luz solar durante tres días. Cuando haya pasado el tiempo aconsejado, se almacenan en una bolsa hermética hasta el momento de la siembra.
¿Cómo preparar la tierra para cultivar tomate?
Según el siguiente artículo publicado por el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP), se aconseja plantar tomate en suelos arenosos, ya que este se desarrolla con una mayor facilidad en suelos fértiles y drenados.
La profundidad del terreno no debe ser inferior a 18 pulgadas (45 cm), y se debe lograr que adquiera las condiciones físicas adecuadas: suave, drenado y ventilado. Además, es importante abonarlo con abundante materia orgánica.
Asimismo, si quieres cultivar tomate, hazlo en un lugar donde pueda recibir el sol mínimo 8 horas diarias. No obstante, recuerda que el verano favorece la aparición de las plagas en el huerto, así que ten precaución para no perder la cosecha.
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Modo de siembra y algunas especificaciones
Se recomienda germinar las semillas en un semillero pequeño antes de trasplantar las plántulas a un huerto o maceta grande. Además, este procedimiento se debe llevar a cabo cuando las pequeñas plantas alcancen una altura de 4 a 5 pulgadas (10 o 12 cm).
- El trasplante se debe hacer en un hoyo de unas 6 pulgadas de ancho por 4 pulgadas (15 cm x 10 cm) de profundidad.
- Luego, se incorpora una cantidad importante de compost (abono) y se introduce la plántula con cuidado.
- A unas 6 pulgadas retirado de la planta, clava una estaca de madera de 5 pies de alto (1,5 metros) con el fin de amarrarla y brindarle soporte conforme va creciendo.
- Para que su desarrollo sea más rápido, realiza hileras de plantas con distancias de dos pies (60 cm) y usa la misma medida entre una y otra planta.
Asimismo, procura mantener siempre la zona limpia, sin malas hierbas y con un buen control de los hongos, las bacterias y otras plagas.
¿Cómo regar la semilla?
En la etapa de sembrado, el semillero se debe mantener al sol y debes regarlo de tres a cuatro veces al día. Así, la adecuada absorción de agua por parte de las semillas y las altas temperaturas causadas por el sol son las que promoverán la germinación.
- Cuando la planta ya cuente con su primer par de hojas, los especialistas Dan Drost y Celina G. Wille aconsejan regarla con 1-2 pulgadas de agua durante una o dos veces a la semana.
- Una vez se desarrolle su tercer par de hojas, el riego solo se realiza una vez al día.
- Durante el desarrollo vegetativo y tras realizar el trasplante, la planta se riega con abundante agua pero solo en su raíz.
Por último, es importante tener en cuenta que la humedad nunca debe faltar en el suelo, pero tampoco debe ser excesiva porque puede deteriorar el producto.
Tiempo de cosecha
Aunque el tiempo depende de la variedad de tomate cultivada, la primera cosecha suele comenzar unos 65 o 100 días después del trasplante.
Se recomienda llevar a cabo la recolección cuando estén “pintones” (ni verdes ni demasiado maduros) para evitar que las plagas se adelanten a la cosecha.
Pautas claves para cultivar tomate en casa
Para conseguir unos tomates ecológicos, libres de pesticidas y saludables, ten en cuenta los siguientes factores:
- Semilla: extraída de un tomate orgánico.
- Suelo: arena o arcilla, con drenaje.
- Luminosidad: al menos 6 horas de luz natural al día.
- Clima: una temperatura óptima de 20 ºC. No resiste el frío ni soporta las heladas.
- Riego: debe ser abundante luego de la siembra.
¿Estás listo para cultivar tomate en casa? Anímate siguiendo estas recomendaciones y disfruta de todos sus beneficios.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Dan Drost y Celina G. Wille, Especialistas del Programa de Extensión de la Universidad Estatal de Utah. "Cómo plantar un huerto para preparar salsas". https://digitalcommons.usu.edu/cgi/viewcontent.cgi?article=3069&context=extension_curall
- Zambrano M, Oswaldo; Barba V, Diana (1983). "Preparación de semilleros para tomate y pimiento". Instituto Nacional Autonomo de Investigaciones Agropecuarias, Portoviejo (Ecuador). Estacion Experimental. http://www.sidalc.net/cgi-bin/wxis.exe/?IsisScript=INIAP.xis&method=post&formato=2&cantidad=1&expresion=mfn=000426
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