Haz tu propia crema de concha nácar y dile adiós a las manchas oscuras

Es común encontrarnos con manchas oscuras en la piel a medida que crecemos, experimentamos cambios hormonales y nos exponemos al sol. Una de las opciones naturales para tratar las imperfecciones de la piel es la crema de concha nácar, un producto que incluso puedes hacer en casa. El nácar es la capa interna iridiscente que tienen la mayoría de los moluscos con concha, sus ingredientes activos: carbonato de calcio y conquiolina pueden exfoliar tu piel suavemente y ayudar a estimular la producción de nuevas células, disminuyendo cicatrices y manchas.
Te presentamos una guía para aprender a prepararla y usarla correctamente, así podrás incluir este aclarante natural como un aliado en tu rutina de cuidado. Al ser un procedimiento muy fácil, no necesitarás comprarla y tendrás tu suministro disponible, siempre que lo necesites. Recuerda que es importante visitar a tu dermatólogo de confianza antes de probar cualquier producto en tu piel.
Ingredientes y potenciadores para la crema de nácar
Los ingredientes básicos que vas a necesitar son:
- Polvo de nácar: lo puedes conseguir en tiendas de productos naturales. Otra opción es obtener ostras o conchas nácar y activarlas directamente con el limón, dejándolas reposar hasta que se haga una crema
- Jugo de limón: funciona como activador de las propiedades de la concha y también puede funcionar como aclarante.
- Crema hidratante: esta será la base neutra de tu crema, si utilizas polvo, servirá para dar consistencia y hacer más sencilla la aplicación. Si no quieres usar crema, puedes sustituirla por vaselina.
Aparte de los ingredientes principales, puedes enriquecer tu crema con:
- Aceites hidratantes: te recomendamos de almendra o rosa mosqueta, unas cuantas gotas para aumentar el efecto regenerador.
- Cápsulas de vitamina E: estas actuarán como conservante para la crema y darán antioxidantes a tu piel.
Paso a paso para obtener la crema
- En un recipiente muy limpio mezcla una cucharada del polvo de nácar con el jugo de la mitad de un limón. Si usaras una concha, lávala bien y exprime el jugo del limón directamente en la parte interna de la concha.
- Deja en reposo por 15 minutos para la activación, o 24 en refrigeración si es la concha. Se producirá una sustancia viscosa que será el activo principal.
- Añade la base hidratante que hayas elegido para tu crema, unas o dos cucharadas serán suficientes. También puedes incluir el aceite o vitamina E si lo deseas.
- Remueve bien para que todos los ingredientes se integren y hasta que consigas una pasta homogénea.
- Guarda tu preparación en un frasco de cristal oscuro y hermético. Consérvala en un lugar fresco y seco, donde no reciba la luz del sol. Esta crema conservará sus propiedades por un máximo 3 semanas.
Uso, precauciones y expectativas de tu aclarante natural
El mejor momento para aplicar tu crema es por la noche, ya que, al tener jugo de limón, es importante que no te expongas al sol para evitar quemaduras. Aplica una pequeña cantidad y masajea suavemente la piel, no frotes con fuerza. En cuanto a la frecuencia de uso, es recomendable que no sea de más de 2 a 3 veces a la semana.
Evita el contacto con la zona de contorno de ojos, pues se trata de piel muy sensible, puedes usarla en cara, cuello o manos. Antes de ponértela, haz una prueba de sensibilidad en una pequeña área, como detrás de la oreja o el antebrazo. Al día siguiente del uso, no olvides colocarte protector solar.
Con un uso cuidadoso y constante podrías ayudar a tu piel a mantener un tono uniforme. No olvides consultar con un profesional antes de aplicártela y también en el caso de presentar cualquier reacción adversa.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.