El secreto de Ethel Caterham a sus 116 años: ‘Nunca discuto con nadie; escucho y hago lo que me gusta’

Aunque suene inaudito, la clave para una vida larga y saludable no se encuentra en dietas mágicas, suplementos milagrosos o entrenamientos extenuantes… Es más fácil de lo que creemos: vivir en paz, hacer lo que amas y no preocuparte por lo que no está en tus manos.
Ethel Caterham lo sabe. A sus 116 años, esta británica sigue lúcida, con buen humor y tranquila como muchos desearíamos estar. Su filosofía es sencilla: nunca pelea con nadie, escucha y hace lo que quiere. Detrás de esas palabras hay hábitos, acciones, decisiones que pueden hacernos a todos reconsiderar la forma en que vivimos.
Una vida que nos enseña la importancia de adaptarnos
La vida de Ethel Caterham ha estado definida por la capacidad de adaptarse. Considera esto: nació en 1909, cuando las mujeres no podían votar y muchas familias no tenían electricidad ni agua corriente. De esta manera, la disciplina, la paciencia y la perseverancia fueron valores para la vida. Tal vez por eso aprendió desde temprana edad que la calma ante lo desconocido era la mejor forma de avanzar.
A los 18 años viajó a la India para trabajar como niñera y se casó con un oficial del ejército británico. También residió en Gibraltar y Hong Kong, lo que le expuso a otras culturas. Aprendió a escuchar más, a no aferrarse a lo que no podía controlar y a apreciar las pequeñas cosas del día a día.
¿Cómo podemos aplicar la filosofía de Ethel Caterham?
La mujer más longeva del Reino Unido nos deja lecciones valiosas que podemos incorporar en nuestra vida diaria. La primera es elegir las batallas: no discutir no es ceder, es cuidar tu paz interior. Antes de responder, decide si la conversación merece arriesgar tu serenidad
Escuchar, en lugar de imponerse, nos convierte en personas más empáticas. Pruébalo con pequeños gestos: mirar a los ojos, no interrumpir, tratar de entender en lugar de responder. Hacer lo que te gusta no es un lujo, sino una manera de conservar la mente activa y el ánimo en equilibrio, incluso cuando la rutina se vuelve pesada.
La filosofía de Ethel Caterham no es una fórmula para vivir 116 años. Pero es una invitación a dejar de pelear por lo que no podemos controlar y a disfrutar más de lo que sí podemos. Vivir con serenidad, escuchar con atención y actuar con autenticidad parecen ser las claves que le han permitido llegar tan lejos, no solo en años, sino en plenitud.
Aunque suene inaudito, la clave para una vida larga y saludable no se encuentra en dietas mágicas, suplementos milagrosos o entrenamientos extenuantes… Es más fácil de lo que creemos: vivir en paz, hacer lo que amas y no preocuparte por lo que no está en tus manos.
Ethel Caterham lo sabe. A sus 116 años, esta británica sigue lúcida, con buen humor y tranquila como muchos desearíamos estar. Su filosofía es sencilla: nunca pelea con nadie, escucha y hace lo que quiere. Detrás de esas palabras hay hábitos, acciones, decisiones que pueden hacernos a todos reconsiderar la forma en que vivimos.
Una vida que nos enseña la importancia de adaptarnos
La vida de Ethel Caterham ha estado definida por la capacidad de adaptarse. Considera esto: nació en 1909, cuando las mujeres no podían votar y muchas familias no tenían electricidad ni agua corriente. De esta manera, la disciplina, la paciencia y la perseverancia fueron valores para la vida. Tal vez por eso aprendió desde temprana edad que la calma ante lo desconocido era la mejor forma de avanzar.
A los 18 años viajó a la India para trabajar como niñera y se casó con un oficial del ejército británico. También residió en Gibraltar y Hong Kong, lo que le expuso a otras culturas. Aprendió a escuchar más, a no aferrarse a lo que no podía controlar y a apreciar las pequeñas cosas del día a día.
¿Cómo podemos aplicar la filosofía de Ethel Caterham?
La mujer más longeva del Reino Unido nos deja lecciones valiosas que podemos incorporar en nuestra vida diaria. La primera es elegir las batallas: no discutir no es ceder, es cuidar tu paz interior. Antes de responder, decide si la conversación merece arriesgar tu serenidad
Escuchar, en lugar de imponerse, nos convierte en personas más empáticas. Pruébalo con pequeños gestos: mirar a los ojos, no interrumpir, tratar de entender en lugar de responder. Hacer lo que te gusta no es un lujo, sino una manera de conservar la mente activa y el ánimo en equilibrio, incluso cuando la rutina se vuelve pesada.
La filosofía de Ethel Caterham no es una fórmula para vivir 116 años. Pero es una invitación a dejar de pelear por lo que no podemos controlar y a disfrutar más de lo que sí podemos. Vivir con serenidad, escuchar con atención y actuar con autenticidad parecen ser las claves que le han permitido llegar tan lejos, no solo en años, sino en plenitud.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.







