Si deseas enseñar a tu hijo a ser buen hermano hay un hecho que debes tener muy presente siempre: el…
Bruxismo en niños: ¿cómo actuar si tus hijos rechinan los dientes?
¿Tus hijos rechinan los dientes? La patología se conoce con el nombre de "bruxismo" y es importante el tratamiento para evitar consecuencias en la dentadura y en toda la mandíbula. Descubre más aquí.

El bruxismo en niños puede ser diurno o nocturno. Este hábito, patología o trastorno acarrea consecuencias. Afecta la dentadura y los maxilares, deformando la mordida y causando otros problemas físicos.
Del mismo modo, es una señal de alarma, ya que puede denotar problemas de ansiedad y estrés. En el presente artículo te contamos qué es, por qué se presenta y qué se debe hacer si notas que tus hijos rechinan los dientes.
¿Qué es el bruxismo infantil?
Las piezas superiores de la dentadura deberían estar lo más alineadas posibles con las de abajo. Esto es lo que se conoce como oclusión dental normal. Aunque cierta superposición de los dientes de arriba no constituye una mordida defectuosa, hasta cierto punto.
Por otra parte, la acción de morder y mantener la boca cerrada en reposo deberían hacerse de modo tal que no afecte ni deforme las piezas. Pero esto no siempre ocurre así. Algunas personas hacen presión al cerrar, apretando mucho los dientes, dando lugar al bruxismo.
Dicho término deriva del vocablo griego brugmos que significa “mordedura”. Aunque en este caso no se trata de morder algo, pues lo que ocurre en el bruxismo es todo lo contrario. No se muerde, solo se aprieta.
En líneas generales, es una actividad motora oral que consiste en la acción de cerrar con fuerza los maxilares, haciendo rechinar los dientes los unos contra los otros. Cuando ocurre en los niños, se está ante un bruxismo infantil.
Esto es un hábito deformante para los dientes que se realiza de manera inconsciente. Afecta de varias maneras, causando dolor de cabeza y en los maxilares, deformando la mordida y agrietando las piezas dentales.
Puede ser diurno cuando tiene lugar en situaciones de estrés y de ansiedad; incluso durante una espera o cuando se realiza alguna tarea. Pero ocurre también en la noche, durante el sueño, dando lugar al bruxismo nocturno.
Si quieres saber más: ¿Qué es el bruxismo y cómo se detecta?
Causas del bruxismo en niños
Según los estudios realizados sobre el tema, hay diversas causas del bruxismo en niños. Sin embargo, no existe un acuerdo entre los expertos al respecto. Se identifican varios grupos de factores:
- Morfológicos: problemas de oclusión dentaria y posibles anomalías articulares u óseas por malos hábitos o traumatismos.
- Fisiopatológicos: relacionados con el sistema nervioso y química cerebral alterada. Las migrañas pueden ser causa y consecuencia.
- Patologías respiratorias: se ha determinado relación entre el bruxismo y los trastornos respiratorios durante el sueño, como la rinitis alérgica.
- Psicológicos: asociados con ansiedad y estrés. La posibilidad de bruxismo en niños es bastante alta cuando hay síndrome de Down o parálisis cerebral.
- Sociales: en algunos casos, el bruxismo en niños se presenta con trastornos adaptativos cuando estos comienzan a socializar o hay cambios significativos en su entorno.
- Problemas de sueño: por último, se asocia el bruxismo nocturno con trastornos del sueño infantil, en los que se encuentran afectadas la cantidad, calidad y continuidad del mismo.
Se puede decir, entonces, que el bruxismo en niños es multifactorial. Incluso, los aspectos antes mencionados interactúan entre ellos, pues la ansiedad y el estrés estimulan el sistema nervioso, alterando los niveles de dopamina, por ejemplo, lo que repercute en el descanso.
Sigue leyendo: Causas y consecuencias del bruxismo
¿Cómo actuar? Pautas y recomendaciones
Dolores de cabeza y en los maxilares, así como sensibilidad dentaria son síntomas del bruxismo a tener en cuenta. Asimismo, al notar que en la noche hay rechinar de los dientes, la sospecha es lógica.
Ante la detección de la situación, la primera medida es acudir a un especialista, tanto de la salud bucal como de la conducta. Para el abordaje del bruxismo en niños se proponen diversas modalidades terapéuticas:
- Desde el punto de vista odontológico, se recomienda el uso de dispositivos oclusales (férulas o protectores) mientras el niño duerme, con el fin de proteger los dientes.
- El tratamiento ortopédico-ortodóncico suele ser apropiado cuando hay anomalías dentomaxilares.
- Adicionalmente, se realizan terapias ortopédicas para mejorar los hábitos orales, trabajando en el desarrollo de la conciencia motriz.
- En los niños no se recomienda uso de fármacos. Sin embargo, si se pueden administrar antihistamínicos bajo supervisión médica cuando hay problemas respiratorios asociados.
- En cuanto al abordaje psicológico, se desarrolla en función de la reducción del estrés emocional y ansiedad.
En relación con esto último, se debe trabajar en conjunto con el profesional de la conducta. Es importante identificar los factores propiciadores del estrés, sean familiares, personales, emocionales, académicos o sociales.
Por supuesto, tanto los padres como los familiares que conviven en el entorno inmediato deben contribuir con el mantenimiento de un clima armonioso y un ambiente adecuado. Es primordial que no se altere el sueño del niño ni su estado emocional.
¿Cómo afecta el bruxismo en niños?
A la larga, el bruxismo en los niños puede traer consecuencias de diverso tipo, no solo para la dentadura y el sector orofacial. Todos los músculos del complejo cráneo-maxilofacial, hasta el cuello y los hombros se pueden ver afectados.
Del mismo modo, dado que el bruxismo está relacionado con trastornos de la conducta y del sueño, no se debe subestimar, considerándolo solo como un mero problema odontológico, sino saber interpretarlo como una señal de alarma. Por ello, considerar la multiplicidad de factores es clave.
Graduado en Lengua y Literatura por la Universidad de Córdoba y Magíster en Lectura y Escritura de la misma institución. Ha ejercido como profesor en la Facultad de Ciencias de la Educación (específicamente en la carrera de Psicopedagogía) y en el Área de Estudios de Postgrado, así como en distintas instituciones de educación superior del país: UAM, UJAP, UPEL, UNEFA, IUTI, CUAM, UNEY. Ha sido docente en las carreras de Psicopedagogía, Ciencias del Deporte y Ciencia y Cultura de la Alimentación y Coordinador de Investigación y Formación en una Organización Psicoeducativa y Psicopedagógica Internacional, trabajando con niños que presentan trastornos del neurodesarrollo. Ha sido coordinador del programa de lectura y escritura de la Secretaría de Educación del Gobierno del estado Carabobo y Coordinador de Investigación y formación de la Organización Psicoeducativa TAEO. Ha publicado varios libros de relatos como Pretextos y Alba para dos ciegos y otras maniobras. Por su trabajo como escritor ha sido galardonado en diversos certámenes literarios.