Cáscara sagrada: origen, beneficios y posibles riesgos

Revisado y aprobado por la farmacéutica Franciele Rohor de Souza

Escrito por Daniela Echeverri Castro

Última actualización: 25 mayo, 2023

La cáscara sagrada, de nombre científico Rhamnus purshiana, es un arbusto originario de las zonas templadas de América del Norte. Tiene hojas elípticas, poco dentadas, que miden entre 4 y 8 centímetros. Además, el árbol llega a medir entre 6 y 12 metros de altura. Si bien florece y da unos frutos en forma de drupa negra, a menudo se aprovecha su corteza, que concentra sustancias medicinales.

En particular, se conoce como un laxante natural, ya que favorece la motilidad intestinal para facilitar la evacuación de las heces. Aún así, su uso no está aprobado por la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA), quien hace algunas advertencias sobre sus posibles riesgos. ¿Quieres saber más al respecto?

Beneficios de la cáscara sagrada

La cáscara sagrada también se conoce como «espino amarillo de California», «corteza sagrada», «gayuba» o «corteza amarilla». Desde la antigüedad, los nativos emplearon la corteza de este árbol con fines medicinales, sobre todo para el alivio de trastornos digestivos como el estreñimiento.

De hecho, en la década de 1890, la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) aprobó su uso inicial como laxante de venta libre. No obstante, dicha aprobación fue eliminada en 2002, dada la falta de evidencias sobre su seguridad y eficacia.

Dicho esto, es importante señalar que no hay suficientes estudios científicos sobre las propiedades y efectos de la cáscara sagrada. Una revisión divulgada a través de Phytotherapy Research detalla que la emodina, una antraquinona presente en la planta, está detrás de su efecto laxante.

Dicha sustancia se encarga de inhibir la absorción de agua y electrolitos en los intestinos. Así, el volumen de las heces aumenta, al igual que la presión dentro del intestino. El resultado de este proceso es la estimulación del peristaltismo, lo que permite una óptima evacuación de las heces.

Ahora bien, la planta se ha catalogado como un «laxante estimulante» y su efecto es más suave que otras plantas como el sen. Incluso, su mecanismo es diferente a opciones como el psyllium, pues este último crea una especie de gel que facilita la eliminación de los desechos retenidos en el intestino.

De cualquier modo, hay que tener presente que en la actualidad no es un tratamiento aprobado por la FDA para aliviar el estreñimiento. Aún así, está disponible como suplemento dietético a base de hierbas o como ingrediente en laxantes recetados. Se estima que induce a la evacuación unas 8 u 12 horas después de su consumo.

Posibles riesgos y contraindicaciones

Para calmar el estreñimiento, esta planta debe emplearse solo de manera puntual y a corto plazo. Se estima que su uso es seguro y bien tolerado en la mayoría de los adultos sanos. Aún así, algunos pueden experimentar dolor abdominal o calambres al ingerir el remedio.

Los problemas de mayor consideración surgen por el consumo excesivo de cáscara sagrada. Los estudios realizados determinaron que las antraquinonas son perjudiciales cuando se ingieren en cantidades exageradas. También se cree que provoca melanosis coli, una coloración anormal marrón-negruzca localizada en el colon.

Si se consume por una o dos semanas, provoca una pérdida relevante de electrolitos que conduce a un estado de deshidratación. En consecuencia, también es posible que se presenten los siguientes síntomas:

• Náuseas intensas.
• Sensación de debilidad o fatiga.
• Dolor de cabeza.
• Espasmos musculares.
• Alteraciones del ritmo cardíaco.
• Entumecimiento u hormigueo en las extremidades.
• Disminución de la producción de orina.
• Confusión.
• Estreñimiento de rebote.

Debido a la falta de estudios científicos, se desconoce si es segura en ciertas poblaciones con características especiales. Por ello, está contraindicada en los siguientes casos:

• Embarazo y lactancia.
• Niños.
• Pacientes con enfermedad diverticular, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn o hemorroides graves.
• Personas con enfermedades cardiovasculares.
• Anemia grave.
• Cirugía reciente de colon.
• Pacientes con cáncer gastrointestinal.
• Personas con enfermedades hepáticas o renales.
• Sospecha de apendicitis.

No se recomienda el consumo simultáneo de cáscara sagrada con los siguientes medicamentos:

• Glucósidos cardíacos, como digoxina, digitoxina y digitonina.
• Fármacos corticosteroides.

Dosis y modo de consumo

Hasta la fecha no se ha precisado una dosis recomendada para ingerir cáscara sagrada. La misma puede variar de acuerdo a la edad, el peso y el estado de salud de la persona.

Por ello, es fundamental seguir las recomendaciones del fabricante del suplemento. La planta está disponible en forma de polvo, cápsulas, tinturas y tés. No debe emplearse por más de 3 días.

¿Qué debes recordar sobre la cáscara sagrada?

Es probable que encuentres suplementos de cáscara sagrada al buscar remedios complementarios contra el estreñimiento. Aún así, debes saber que no es un tratamiento de primera línea para esta enfermedad. De hecho, debe usarse con mucha precaución, debido a los riesgos que acarrea.

En caso de optar por su consumo, no debes exceder la dosis sugerida por el fabricante ni prolongar su ingesta por muchos días. De ser posible, consulta al médico para encontrar otras alternativas.