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Cómo limpiar tus zapatillas de tela o lona sin que pierdan su forma ni color

3 minutos
Con buenos cuidados y los métodos de lavado correctos esas zapatillas de tela que tienes lucirán increíbles. Además, te diremos qué debes usar para quitar malos olores.
Cómo limpiar tus zapatillas de tela o lona sin que pierdan su forma ni color
Escrito por Estefanía Filardi
Última actualización: 19 agosto, 2025

Nada mejor que tener este tipo de zapatillas: son cómodas, ideales para el uso diario y puedes hacer deporte con ellas. Pero se ensucian con facilidad y el lavado constante e incorrecto puede hacer que la tela se deteriore y tu calzado dure menos de lo que esperabas.

Te enseñaremos el método más efectivo con un lavado a mano usando desmanchadores o jabones adecuados. También, lo que deberías hacer si quieres ponerlas en la lavadora para que no se dañen y una buena técnica para eliminar los malos olores.

Así que ve preparando tus zapatillas. Retira los cordones y la plantilla, y sacúdeles el polvo o la tierra con un cepillo, recorre todos los lugares para eliminar la suciedad superficial.

Lavado a mano de zapatillas de lona blanca y de color

Aunque requiere un poco más de esfuerzo, este modo de lavado es mejor para conservar la forma de tus zapatillas y tratar manchas específicas. Te explicamos cómo hacerlo:

Zapatillas blancas

  1. Haz una mezcla de agua tibia con detergente suave o jabón neutro. Si el calzado está manchado, puedes preparar una pasta con bicarbonato y vinagre para eliminar esa suciedad más resistente.
  2. Con la ayuda de un cepillo de cerdas suaves, frota de manera circular la tela. Evita hacerlo con demasiada fuerza.
  3. Aclara con la ayuda de un paño limpio y húmedo. Asegúrate de retirar todos los residuos y luego pon a secar las zapatillas en un lugar ventilado, pero que no reciba luz solar directa. Un truco es colocar papel de cocina o periódico dentro del calzado para absorber la humedad.

Zapatillas de color

  1. Puedes mezclar detergente para ropa de color con un poco de agua fría o tibia.
  2. Haz una prueba en una parte pequeña de la zapatilla para verificar que el jabón no altere el color.
  3. Si el jabón no destiñe la tela, frota suavemente con un cepillo toda la zapatilla.
  4. Retira el jabón con un paño húmedo y limpio: no sumerjas el calzado en agua.
  5. Deja secar en un sitio bien ventilado, pero donde las zapatillas no reciban sol directo para que no se decoloren.
También, puedes intentar hacer un lavado en seco si tus zapatillas solo tienen un poco de polvo o manchas pequeñas. Para ello, prepara una espuma de jabón neutro y frota con un cepillo. Luego retira con un paño seco.

Limpieza en lavadora con varias precauciones

No es lo recomendable porque las zapatillas pueden perder su forma y los movimientos de la lavadora podrían dañar algunos de sus materiales. Si aun así decides lavarlas de ese modo, sigue estos consejos:

  • Utiliza una bolsa de tela o una funda para colocar dentro las zapatillas.
  • Programa un ciclo de lavado corto y suave, con agua fría.
  • Es mejor evitar el centrifugado, pero si lo eliges que sea un ciclo corto y suave.
  • Añade un poco de vinagre para eliminar los malos olores.
  • Seca en un lugar ventilado y a la sombra.

La técnica para eliminar los malos olores

Puede suceder que, luego del lavado, el mal olor aún esté presente en tu calzado. Esto es lo que debes hacer para acabar con esos aromas desagradables:

  • Espolvorea un poco de bicarbonato dentro de la zapatilla y en la plantilla, y deja un par de horas o mejor toda la noche.
  • Ventila tus zapatillas después de usarlas, en especial si las has llevado puestas sin calcetines.
  • Usa calcetines de material transpirable para disminuir el sudor en tus pies.
  • Considera reemplazar las plantillas por unas con carbón activado.
  • Intenta no usar las mismas zapatillas todos los días y guárdalas en un lugar ventilado.

Luego de lavarlas puedes aplicar un espray impermeabilizante para zapatos de tela, este producto te ayudará a dar a tus zapatillas una capa que repelerá el agua y el polvo.

Los días lluviosos quizás quieras usar otra opción o, al caminar, evita los charcos y el barro. Y si percibes alguna mancha, límpiala rápidamente con un paño húmedo y espuma de jabón, así no se fijará tanto en la tela.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.