8 consejos para ser un buen amigo

Revisado y aprobado por el psicólogo José Padilla

Escrito por Luz Marina Carpio Hernández

Última actualización: 21 mayo, 2023

¿Cómo saber si eres un buen amigo? Es posible que tengas muchas amistades y que sientas que la relación fluye, porque hay confianza y camaradería. Pero esto no lo es todo en una amistad. Dar por afianzados estos nexos, sin invertirle ciertos elementos, podría resquebrajar el vínculo o hacerle sentir a la otra persona que, en realidad, no eres un amigo tan bueno.

Hablamos de factores como el tiempo de calidad, la sinceridad y la discreción. En general, todo lo que les suma a otros y nos suma a nosotros, lo que produce sentimientos positivos y el impulso natural de estar siempre a disposición.

Si revisamos la definición básica de amistad, la Real Academia Española precisa que se trata del «afecto personal, puro y desinteresado, compartido con otra persona, que nace y se fortalece con el trato». Partiendo de este concepto, plantearemos algunas sugerencias que servirían para demostrar lo buen amigo que eres.

La importancia de un buen amigo

Tener un amigo es contar con alguien que siempre está dispuesto a ayudar, sobre todo en momentos adversos. Su compañía es suficiente, sin requerir ninguna acción más que el gesto de estar para brindar fortaleza, apoyo y ánimo.

A los amigos los une el amor y el respeto recíproco, como resalta un artículo sobre el concepto kantiano de amistad, publicado por la Revista de Filosofía Moral y Política ISEGORÍA. Estos lazos ejercen gran influencia en la formación del carácter personal y contribuyen al sentido de la vida.

Otra apreciación relativa al valor de la amistad es la planteada por la Revista Filosófica Diánoia, la cual profundiza un poco más. Allí se detalla que en la amistad hay necesidad de afecto mutuo, disposición recíproca y espera de una ayuda que no se le pide a otras personas consideradas no cercanas.

Es así como los buenos amigos se caracterizan por no usar «máscaras»; comprender las verdades, sentimientos y emociones del otro; compartir sueños y contribuir, de alguna manera, en materializarlos; no juzgar ni culpar tus acciones. Un amigo es importante en los momentos de desahogo; es esencial abrirle espacio en la vida a quien, sin reproches, se convierte en un soporte y en tu familia elegida.

¿Cómo ser un buen amigo? Presta atención a los siguientes consejos

Puedes repasar lo mencionado con anterioridad y tratar de reconocer esos comportamientos en tus amistades. ¿Pero eres un buen amigo? A continuación, presentamos algunos consejos para que ofrezcas tu mejor versión de la amistad.

1. Priorizar

Por más ajetreada que sea tu vida, reserva un espacio a la amistad. Serás un amigo valioso en la medida que hagas de esta relación una parte primordial de tu vida.

Tómate el tiempo para una videollamada, programen una cena, salgan a dar una vuelta. Así sean pocos minutos los que inviertas, significan mucho para tu amistad.

Si no lo priorizas, es posible que este vínculo se diluya.

2. Saber perdonar

Nadie está exento de cometer errores y, ante las equivocaciones, los buenos amigos perdonan. Esta es una de las claves primordiales para ser buenos amigos; su esencia está en el coraje con el que ambos reconocen las raíces del conflicto, son capaces de dialogar y mirarse sin rodeos, para perdonar los comportamientos o acciones que no fueron agradables.

Si en la relación amistosa no tiene cabida el perdón y, por el contrario, se alimenta el rencor, aunque intenten creer que «pasaron la página», siempre estará la espina del problema y en cualquier momento resurgirá.

Sé un amigo ideal, perdonando con sinceridad.

3. Responder a sus llamados

No solo se trata de la presencia física; responder un mensaje o una llamada es una manera de demostrar compañía, en especial si el amigo atraviesa algún problema laboral, amoroso o de otra índole. Eres uno de los buenos amigos cuando no dejas solo a quien te necesita.

4. Alimentar su autoestima

Los buenos amigos levantan el ánimo y elevan el espíritu de sus pares para que logren objetivos en su vida. Eres de estos cuando alimentas su autoestima, evitas la crítica y le demuestras lealtad.

También si, a menudo, le recuerdas sus cualidades y potencialidades. Un comentario agradable transforma para mejor el mal día de un amigo.

5. Escuchar y respetar la confidencia

Prestarle atención a lo que dice un amigo y honrar la confidencia cuando sea el caso, es una forma de ser bueno en la amistad. Que la otra persona note y sienta que le escuchas; mucho más, si la conversación gira en torno a la búsqueda de soluciones para un determinado problema.

6. Ser una persona honesta

En lo de escuchar cabe, de igual modo, decir las «verdades». Incluso, aquellas que el otro preferiría no oír.

Al respecto, la revista filosófica Pensamiento comenta que en la amistad verdadera existe un compromiso con base en expresar no solo lo que el amigo quisiera escuchar, sino lo que creas conveniente que conozca o que recuerde en ese momento. Esto es parte del amor y la honestidad que caracterizan a los amigos.

7. Debatir sin problemas

Las opiniones encontradas son frecuentes en la amistad.

No quiere decir que normalices peleas constantes, pero es posible que haya debates sobre temas o situaciones particulares. Por ejemplo, que tengan pensamientos políticos diferentes o apoyen a equipos de fútbol rivales. Si eres de los buenos amigos, hablas de los temas polémicos sin mellar la relación, es decir, defiendes tu punto de vista con respeto.

8. Apoyar la toma de decisiones

No consiste en aprobar todo lo que haga un amigo, pero sí le dejas claro que, aunque consideras otras alternativas ante un determinado asunto, estás en su equipo y le respaldas. Asimismo, cuando un amigo está estresado, ayúdale a calmarse, ofrécele consejos y visualicen un escenario con las alternativas posibles para que tome las determinaciones apropiadas.

¡Alerta! Detecta los comportamientos que distan de ser un buen amigo

Ya sabes cómo identificar a los buenos amigos y lo que deberías considerar para ser tú uno de ellos. Ahora, ¿qué hay de aquellas personas que están presentes en nuestras vidas, pero no estamos tan seguros de si su permanencia es positiva?

Existen relaciones amistosas que son nocivas y destructivas. Es lo que podría entenderse como «amigos tóxicos»; aquellos que te hacen sentir mal, te manipulan, son deshonestos e invierten poco tiempo en ti.

De ellos conviene marcar distancia. Y si, al contrario, te identificas así, trata de evitar estos comportamientos opuestos a los de un amigo de verdad.