Contractura de Dupuytren: causas, síntomas y tratamientos
La contractura de Dupuytren es una deformidad que afecta a las manos y, en particular, al movimiento de los dedos. Este trastorno trastoca la capa de tejido que se encuentra por debajo de la piel de la palma de la mano. Progresa a lo largo de los años y es más habitual en varones después de los 45 años de edad.
En la mitad de las personas que la padecen, el trastorno afecta a ambas extremidades. Cuando solo afecta una mano, la frecuencia de la mano derecha es del doble que de la izquierda.
La contractura limita los movimientos de los dedos e impide que se estiren por completo, lo que complica las actividades diarias. Se manifiesta en los dedos anular y meñique, sobre todo.
Algunos de los movimientos más limitados son colocar las manos en los bolsillos, ponerse un par de guantes o saludar. A continuación te explicamos más sobre esta afectación llamada contractura de Dupuytren.
Síntomas relacionados
Lo más frecuente es que la contractura de Dupuytren progrese lentamente. Con el paso del tiempo, la enfermedad irá reduciendo la funcionalidad de la mano afectada.
Comienza con un engrosamiento de la piel de la palma de la mano. Después, la piel de la palma se torna arrugada o con depresiones en la superficie. Puede aparecer un pequeño nódulo también, en la misma zona.
Este nódulo aumenta su grosor hasta formar una banda, parecida a un cordón. Puede ser sensible al tacto, pero no resulta doloroso. La formación del mismo debajo de la piel tira de uno o más dedos, manteniéndolos en flexión. Esta posición es la causa de que la mano parezca una garra.
¿Cuál es la causa de la contractura de Dupuytren?
La causa específica de la contractura de Dupuytren es desconocida. Se considera que tiene un componente hereditario que afecta a los varones.
No existe evidencia de que las lesiones en las manos se repitan en el futuro. Tampoco se puede asegurar que las actividades o los empleos con vibraciones las puedan causar.
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Factores de riesgo
La contractura de Dupuytren ocurre con distinta frecuencia según la carga genética y características de las personas. Se ha observado una mayor frecuencia en personas con alcoholismo o epilepsia.
Esta alteración es más habitual en los países del norte de Europa y en quienes provienen de esas zonas. En contraste, es un trastorno raro en África y Asia Oriental.
Dentro de los factores de riesgo para padecerla se encuentran los siguientes:
- Edad: después de los 50 años.
- Sexo: de 7 a 10 veces más frecuente en hombres que en mujeres.
- Antecedentes familiares: la contractura de Dupuytren tiende a ser hereditaria.
- Diabetes: las personas con diabetes tienen un riesgo mayor, al parecer por un daño crónico al colágeno.
- Consumo de tabaco y alcohol: el tabaquismo se asocia con un riesgo mayor de padecerla, debido al daño microscópico en los vasos sanguíneos. El consumo de alcohol está asociado con esta contractura por los metabolitos del tóxico y el daño hepático.
Tratamientos disponibles para la contractura de Dupuytren
Una de las fases iniciales del tratamiento es mantener en observación a los casos leves y que no progresan. Se puede plantear esta medida inicial porque no limita la funcionalidad.
Las inyecciones de cortisona dentro del nódulo pueden reducir la sensibilidad si se realizan antes de que los dedos hayan empezado a curvarse. Es importante mencionar que la cortisona no retrasa la progresión.
Otra opción de tratamiento es con inyecciones de colagenasa, la que tiene resultados favorables. La colagenasa es una enzima que disuelve el colágeno que forma el cordón tenso de la palma.
La sustancia que se emplea es producida por la bacteria Clostridium histolyticum. Al aplicar la enzima, el cordón fibroso puede ablandarse y debilitarse, lo que permite manipular la mano y romper el cordón para enderezar los dedos.
En algunos países europeos se utiliza la terapia con radiación (radioterapia). Con esta técnica se obtiene una buena respuesta, debido a que retrasa el avance de la enfermedad y la necesidad de abordaje quirúrgico. Por lo regular, solo se realiza en una ocasión.
Punción
La técnica de punción se puede emplear antes del tratamiento quirúrgico. En ella se usa una aguja que se inserta a través de la piel. El objetivo es romper el cordón de tejido fibroso que contrae el dedo.
Las ventajas son que no requiere incisión quirúrgica y se puede hacer en varios dedos a la vez. Después de concretarla se necesita poca fisioterapia. Tiene como desventaja que la contractura reaparece .
Tratamiento quirúrgico
La cirugía se reserva para los casos en los que la palma de la mano no puede apoy arse de forma plana sobre una mesa. También cuando los dedos están tan encorvados que la función está limitada o si están afectados varios dedos.
El objetivo principal es eliminar quirúrgicamente el tejido afectado por la enfermedad. La principal ventaja de la cirugía es que los resultados son más completos y duraderos que los obtenidos con la inyección de colagenasa o con la punción.
En casos graves, se buscará eliminar todo el tejido afectado por la contractura de Dupuytren, incluida la piel que está unida a lo fibroso. S e necesita, por lo tanto, un injerto de piel para cubrir la herida.
Consejos y prevención
Para las personas que padecen una contractura de Dupuytren se recomienda realizar los siguientes cambios en sus actividades:
- Proteger las manos con guantes acolchados para levantar objetos pesados.
- Colocar aislamiento de tuberías o cinta acolchada en los mangos de objetos y herramientas.
La fisioterapia también ayuda a reducir el dolor y aumentar la capacidad de movimiento. Se pueden utilizar las siguientes técnicas:
- Terapia de calor.
- Ultrasonido.
- Movimientos de extensión.
La contractura de Dupuytren es progresiva
La contractura de Dupuytren puede progresar de forma impredecible. Ocasiona deformidad y pérdida de la función de la mano afectada. Por esta razón, es muy importante observarla y mantener un adecuado control médico.
En los casos que requieran cirugía como tratamiento, se complementa con fisioterapia. De esta forma, pueden disminuir los síntomas y hacer que la mano funcione mejor. El objetivo siempre es incrementar la movilidad de los dedos.
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