¿Cuáles son los síntomas de un infarto en mujeres?

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater

Última actualización: 09 julio, 2023

Los síntomas de un infarto en las mujeres son, a menudo, distintos a los de los hombres. De ahí que cada vez sea mayor el índice de mortalidad femenina en cuanto a ataques al corazón.

En general, se suelen camuflar con el cansancio o con dolores que no sabemos reconocer. Vale la pena entonces ahondar un poco en el tema por nuestro bien.

Síntomas de un infarto en mujeres

Cuando hablamos de un infarto lo primero que pensamos es en la clásica imagen de un hombre cogiéndose el brazo o tocándose el pecho. A pesar de que este es uno de los síntomas más comunes, en las mujeres debemos expandir el panorama a otras manifestaciones, puesto que puede que no sea al signo más característico.

Nuevas investigaciones publicadas en la revista de medicina British Columbia, nos dicen que el índice de afectados por un infarto en mujeres sigue creciendo, en contraste con el declive en el número de infartos en hombres. Es decir, algo está ocurriendo.

Y ese algo es que, a menudo, las mujeres tienen síntomas a los que no prestan demasiada atención o que no toman en serio. A veces se preocupan más por sus familiares antes que atenderse a ellas mismas. No obstante, hay que tener cuidado. Es esencial que conozcamos los siguientes puntos de aviso, como bien detalla el Texas Heart Institute en esta publicación.

1. Presión en el pecho

En ocasiones, podemos sentir una quemazón en el pecho, una presión que nos produce cansancio. Puede que lo confundas con ansiedad, que te digas a ti misma que estás nerviosa por las obligaciones de cada día. Pero si sientes que esta sensación se acrecienta cada día, acude al médico para que te haga un chequeo.

En los hombres es habitual que esta presión empiece en el pecho y pase al brazo en forma de hormigueo. Sin embargo, en las mujeres suele iniciarse de un modo focal en el pecho y responde en general a una angina.

2. Dolor agudo en la parte superior del cuerpo, en el cuello, la espalda y la mandíbula

Este síntoma puede localizarse como dolor en ambos brazos, la espalda, los hombros, el cuello, la mandíbula o la parte alta del estómago (no por debajo del ombligo). Complicado ¿verdad? De ahí que este tipo de molestias las asociemos a menudo a un dolor de huesos, como en la osteoporosis.

Es decir, no se le presta demasiada atención a esta señal. Se piensa que es solo cansancio o un simple dolor de huesos, y que se puede reducir con un antiinflamatorio.

Pero nunca los pases por alto. Como reafirma también la Fundación Española del Corazón, el dolor en la espalda, el cuello o la mandíbula es un síntoma de infarto más común en las mujeres que en los hombres.

3. Cansancio inusual y ahogo

Existen otros síntomas a los que estar atenta, como experimentar un cansancio fuera de lo normal o dolores en la parte alta del pecho. Fíjate ante todo cuando subes escaleras: si percibes que te cuesta, que sientes sensación de ahogo y esa clásica presión en el pecho que te hemos comentado, no lo dudes, acude al médico de inmediato.

Otro aspecto que debes recordar: los hombres suelen padecer desmayos que ya avisan de que existe un problema cardíaco. Las mujeres, en cambio, padecen pequeños aturdimientos acompañados de sudor, palidez y presión que no tienen por qué llegar a la pérdida de conocimiento, aunque bien pueden hacerlo.

4. Sentir el estómago revuelto, síntoma de infarto en mujeres

Malestar, pesadez de estómago, lo que comemos nos sienta mal y padecemos una especie de acidez que a menudo, termina en vómitos. Es muy fácil confundir estos síntomas con cualquier otra enfermedad, con cualquier otra molestia cotidiana, como un reflujo gástrico.

5. Sudoración fría y abundante

Por lo general, es un signo de alarma temprano de un ataque cardiaco en mujeres de edad avanzada. En ocasiones, este síntoma puede ser similar a los bochornos típicos de la menopausia. Los mismos pueden presentarse en cualquier momento del día, aunque son más comunes en la noche. Además, puede acompañarse de piel húmeda, escalofríos y temblores.

6. Palpitaciones

Este síntoma se describe como la percepción consiente del latido cardiaco. A menudo se manifiesta como latidos rítmicos y fuertes o latidos irregulares y acelerados. En la mayoría de los casos, esta sensación puede perdurar por varios minutos. También suele acompañarse de náuseas y mareo.

7. Insomnio y ansiedad

Los episodios de ansiedad y el insomnio son situaciones cada vez más comunes en las mujeres que padecen enfermedades del corazón. En general, la mujer se puede sentir inquieta, agitada, temblorosa y con problemas para concentrarse. Además, los problemas de sueño pueden presentarse al inicio o durante el mismo, lo que lleva a la paciente a despertarse temprano.

¿Qué hacer si se presentan estos síntomas?

Lo ideal es que se busque atención médica de forma inmediata si se cree que se está sufriendo un ataque cardiaco. En este sentido, la presencia los síntomas de infarto en mujeres siempre deben ser una señal de alerta.

Las mujeres con estos síntomas deben evitar a toda costa conducir al servicio de emergencia, ya que pueden perder la conciencia en algún momento y generar un accidente. La mejor opción es buscar la ayuda de algún familiar o solicitar una ambulancia cuanto antes.

Condiciones que aumentan el riesgo de un infarto en las mujeres

Existen varios factores que incrementan el riesgo de enfermedades cardiovasculares en hombres y mujeres. Tal es el caso de la hipertensión arterial, el colesterol alto, el sedentarismo y la obesidad. De igual forma, las siguientes situaciones aumentan la probabilidad de un infarto en mujeres:

• Diabetes.
• Consumo habitual de cigarrillos.
• Episodios depresivos.
• Estrés.
• Menopausia.
• Hábito tabáquico.
• Problemas cardiacos durante el embarazo.
• Artritis reumatoide y lupus eritematoso sistémico.

¿Cómo reducir el riesgo de infarto en mujeres?

En términos generales, las mujeres deberá realizar un cambio en su estilo de vida si deseas disminuir la probabilidad de sufrir un infarto agudo del miocardio. Lo ideal es adoptar hábito que permitan llevar una vida más saludable y activa. Dentro de las principales recomendaciones destacan las siguientes:

• Dejar de fumar: las sustancias contenidas en el cigarrillo y su humo son capaces de afectar a los vasos sanguíneos, aumentando la probabilidad de infartos. Por fortuna, dichos daños son reversibles al abandonar el hábito.
• Mantener una dieta balanceada: las mujeres deberán evitar las frituras y los alimentos ricos en grasas con el fin de controlar los niveles de colesterol. Además, es necesario aumentar la ingesta de frutas, verduras y vegetales, los cuales son muy beneficiosos para el organismo.
• Hacer ejercicio: los expertos recomiendan realizar al menos 30 minutos diarios de ejercicio para mantener una buena salud. De hecho, estudios establecen que aumentar la actividad física debería de ser un objetivo de todas las especialidades médicas.
• Controlar el estrés: el estrés es uno de los mayores factores de riesgo cardiovascular, ya que hace que las arterias se contraigan y disminuye la irrigación a los órganos. En este sentido, hacer ejercicio y practicar técnicas de relajación podría resultar muy beneficioso.
• Limitar el consumo de alcohol: la ingesta frecuente de bebidas alcohólicas produce múltiples daños en el organismo, incluido el aumento en la probabilidad de padecer infartos. De esta manera, beber con moderación es importante. Esto quiere decir que las mujeres solo deberán tomar una bebida alcohólica al día.
• Controlar las enfermedades existentes: las enfermedades como la hipertensión y la diabetes deben controlarse si se desean evitar repercusiones. Cumplir con el tratamiento y mantener un chequeo médico constante es indispensable.

No ignores los síntomas presentados

Para concluir, la mayoría de infartos y anginas de pecho suelen dar indicios que ya nos lo advierten. El mayor problema en las mujeres es que suelen relacionar estas dimensiones con otras cosas: cansancio cotidiano, el dolor de espalda común, nervios o estrés.

Si este cansancio es más exagerado cada día, si te cuesta respirar o sientes angustia, acude a tu médico. No vuelques todos tus esfuerzos en cuidar de los demás, escúchate también a ti misma. Atender a tiempo los signos de infarto en mujeres puede salvar vidas. ¡No lo olvides!