Las 6 diferencias entre tumor y cáncer

Aunque se la logrado concienciar al respecto, aún existen dudas sobre las diferencias entre tumor y cáncer. Te enseñamos 6 criterios útiles para hacer la distinción.
Las 6 diferencias entre tumor y cáncer
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Última actualización: 10 julio, 2023

Es frecuente que la mayoría de las personas desconozcan las diferencias entre tumor y cáncer. En parte, lo hacen porque los médicos o los divulgadores suelen usar ambos términos como sinónimos. Aunque por supuesto comparten similitudes, lo cierto es que podemos establecer claras diferencias. Hoy te exponemos 6 de ellas para que conozcas a qué hace referencia exactamente un diagnóstico de este tipo.

Ciertamente, las diferencias entre tumor y cáncer no son bien conocidas por los pacientes. Esto puede provocar incertidumbre, miedo o ansiedad al escuchar uno u otro término luego de una consulta con el especialista. Sin el ánimo de sustituir el juicio de estos, en las líneas siguientes conocerás a qué cosa aluden cuando hablan de uno u otro diagnóstico.

Principales diferencias entre tumor y cáncer

Antes de describir las principales diferencias entre tumor y cáncer es justo que adelantemos la tesis que se sostendrá durante este viaje: todos los cánceres son tumores, pero no todos los tumores son cánceres. En esencia, esta frase resume muy bien las 6 diferencias que hemos elegido a continuación. Analicémoslas con meticulosidad.

1. Características intrínsecas

Tanto el tumor como el cáncer hacen referencia a un crecimiento desproporcionado de células. En esto son similares. No lo son en las características intrínsecas de dichas células. Cuando un patólogo analiza las muestras debajo de un microscopio después de la toma de biopsia, puede encontrar dichas características y agruparlas como uno u otro.



Un tumor es el crecimiento desproporcionado de células normales. Hubo un descontrol en su funcionamiento diario, empezaron a crecer y dieron como resultado un bulto. Los análisis muestran que el ADN y la estructura parecen normales. Cuando es así, se clasifica como un tumor no canceroso (o tumor benigno).

Por el contario, las células cancerígenas son anormales. Debajo del microscopio la forma o el tamaño de estas es diferente. Los investigadores creen que solo son necesarias 4 mutaciones para que un célula evolucione de normal a anormal. De acuerdo con el National Cancer Institute, esta variación altera su comportamiento. Veamos algunos ejemplos:

  • Pueden engañar al sistema inmunitario para que no las detecte como anormales (cuando no se destruyen a sí mismas, el sistema las identifica y las elimina).
  • Convencen al sistema inmunitario de que las protege y fomente su crecimiento anormal.
  • Crecen con independencia de señales externas que les indican que lo hagan.
  • Ignoran las señales externas que les ordenan que dejen de crecer o se autodestruyan (apoptosis).
  • Ordenan a los vasos sanguíneos que crezcan a su alrededor. Así eliminan desechos y aseguran oxígeno y nutrientes para crecer más.
  • Presentan anormalidades cromosómicas.
  • Pueden sobrevivir y crecer con nutrientes diferentes a los que utilizan las células normales.

Cuando las células detectadas responden a varias de estas características, se dice que es un tumor canceroso (o tumor maligno). Como ves, la diferencia está dada por sus características y comportamiento. Aún así, comparten el crecimiento desproporcional. Por ello apuntamos que todos los cánceres son tumores, pero no todos los tumores son cánceres.

2. Crecimiento

Las diferencias entre tumor y cáncer incluyen el crecimiento
Cuando los tumores crecen de forma desproporcionada y rápida, es probable que se trate realmente de un caso de cáncer.

Tal y como nos recuerda Stanford Health Care, en el crecimiento celular encontramos otra de las diferencias entre tumor y cáncer. En efecto, los tumores benignos tienen en general un crecimiento lento; mientras que los tumores malignos lo hacen de forma acelerada. Esto se debe a las características que ya hemos comentado.

Un tumor maligno puede crecer en un par de semanas o meses lo que un tumor benigno tardaría años en crecer. Es por esto que no todos los tumores benignos se operan, en especial cuando son muy pequeños y no están alojados en una zona comprometida (el cerebro o los ovarios, por ejemplo).

3. Evolución

La siguiente distinción útil para establecer diferencias entre tumor y cáncer es el carácter de evolución. Las células de los tumores benignos no se diseminan. Es decir, permanecen agrupadas en un solo lugar sin invadir tejido cercado. Pueden crecer, pero siempre lo harán dentro de su misma área.

No sucede lo mismo con las células de los tumores cancerosos. Estas tienden a diseminarse a través de los tejidos circundantes, e incluso viajar a otras partes del cuerpo. Este proceso se conoce como metástasis y su particularidad es que la célula que se reproduce en otro lugar es idéntica a la original.

Debido a esta última característica, un cáncer metastásico se denomina de la misma forma que el cáncer original o primario. Por ejemplo, si una mujer con cáncer de mama ha tenido metástasis en el pulmón (las células se han diseminado hacia este lugar), no se cataloga como cáncer de pulmón. Se cataloga como cáncer de mamá metastásico.

4. Peligrosidad

Como ya has intuido, las células cancerosas tienen un mayor peligro que las células no cancerosas.  De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2020 hubo un promedio de 10 millones de muertes relacionadas con el cáncer. Las más letales para ese año fueron las siguientes:

  1. Pulmón: 1,8 millones de decesos.
  2. Colón y recto: 935 000 decesos.
  3. Hígado: 830 000 decesos.
  4. Estómago: 769 000 decesos.
  5. Mama: 685 000 decesos.

Es difícil determinar el número de decesos ocasionados por un tumor benigno, aunque podemos decir con completa seguridad que es muy bajo. Incluso cuando se desarrolla en áreas delicadas como el cerebro, y siempre y cuando se haga un diagnóstico temprano, la tasa de supervivencia es considerablemente alta.

5. Clasificación

Las diferencias entre tumor y cáncer incluyen su clasificación
Así como no existe un solo tipo de tumor, tampoco existe un solo tipo de cáncer. En realidad, se trata de un conjunto de enfermedades muy diversas que afectan cualquier órgano.

El cáncer se clasifica como un grupo de enfermedades. Así lo reconoce la OMS, y se cataloga como un grupo de acuerdo con sus características y con la parte del cuerpo a la cual afectan. Los tumores no se consideran oficialmente una enfermedad, pero sí una condición o en todo caso una alteración de los tejidos. Puede parecer una diferencia menor, pero desde el punto de vista médico no lo es.

6. Recaídas

Es muy poco probable que haya una recaída cuando un tumor benigno se extrae. El cáncer, en especial aquellas variedades más agresivas, tiene una alta probabilidad de regresar en el futuro. Esto se conoce como recurrencia del cáncer, y puede hacerlo en el mismo lugar o en otras partes del cuerpo.

Como puedes ver, existen criterios sólidos que permiten establecer diferencias entre tumor y cáncer. Es importante que las personas conozcan cada uno de estos, ya que puedes asimilar un diagnóstico con mayor responsabilidad. Durante un proceso diagnóstico puedes preguntar todas las dudas al especialista, así puedes conocer el pronóstico y la gravedad.


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  • Koten JW, Neijt JP, Zonnenberg BA, Den Otter W. The difference between benign and malignant tumours explained with the 4-mutation paradigm for carcinogenesis. Anticancer Res. 1993 Jul-Aug;13(4):1179-82.

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