Cómo evitar la flacidez en el rostro con 6 ejercicios faciales
Revisado y aprobado por el médico Carlos Fabián Avila
La flacidez en el rostro es uno de los problemas estéticos más comunes. Se produce por una disminución en la producción de colágeno y elastina, dos sustancias que se encargan de mantener la firmeza y juventud de la piel.
Esto provoca que el tejido dérmico se ”descuelgue” y el rostro luzca decaído. Asimismo, favorece la aparición de los signos de la edad de forma prematura.
Si bien la flacidez hace parte del proceso biológico del envejecimiento, algunas personas la experimentan desde edades tempranas debido a diversos factores, como los malos hábitos de vida y las agresiones del ambiente.
Por suerte, es un problema que se puede controlar, ya que hay muchos productos y hábitos que, incorporados en la rutina diaria, ayudan a minimizar los signos antiestéticos.
Entre estos, se encuentran 6 sencillos ejercicios de tonificación que se pueden poner en práctica a partir de hoy mismo.
Recomendaciones previas
- A la hora de realizar los ejercicios para combatir la flacidez en el rostro es recomendable que los realices siempre con el rostro limpio y humectado.
- Ten en cuenta que la constancia es la clave para que la rutina de ejercicios surta efecto, pero además deberás mantener buenos hábitos de vida.
- Las personas que aún no presentan flacidez pueden realizar estos ejercicios a modo de prevención.
- En caso de que la flacidez en el rostro sea muy severa, habrá que tener paciencia, pues los avances serán más sutiles que en otros casos.
Ejercicios para prevenir la flacidez en el rostro
1. Estira la frente
Para evitar las líneas de expresión en la frente es muy importante tensar la piel a través de la práctica diaria de un sencillo ejercicio.
Este tonifica el tejido flácido y, al mejorar la circulación, ayuda a lograr un óptimo proceso de oxigenación de la piel.
¿Cómo hacerlo?
- En un lugar donde te puedas relajar por completo, coloca ambas manos en la frente, con las palmas hacia adentro.
- A continuación, estira la piel, desde el centro de la frente hacia las sienes.
- Relaja 10 segundos y repítelo de 10 a 15 veces.
2. Trabaja el contorno de los ojos
Al trabajar la piel del contorno de los ojos con este ejercicio de tonificación podemos prevenir y disminuir las molestas “patas de gallo”. Este permite tensar la piel y promueve la correcta distribución del colágeno y elastina.
¿Cómo hacerlo?
- Une los dedos índices con los pulgares, como cuando simulas unos lentes.
- Ubícalos en el contorno de los ojos y, sin presionar demasiado fuerte, tensa la piel de arriba hacia abajo.
- Parpadea 20 veces manteniendo la tensión, sostén 2 o 3 segundos y relaja.
3. Cuida los pómulos
Los pómulos suelen ser una de las partes del rostro que más reflejan la pérdida de elasticidad y firmeza. Su piel se descuelga con facilidad y puede reflejar el envejecimiento, incluso cuando todavía no es tiempo.
Sin embargo, se pueden tonificar y reafirmar, dado que este ejercicio se enfoca en el trabajo de sus músculos.
¿Cómo hacerlo?
- Toma aire e infla las mejillas.
- Cuando estén bien tensas e infladas, dales pequeños golpes con las yemas de los dedos.
- Sostén durante 10 segundos y suelta el aire suavemente.
- Luego, tuerce los labios hacia el lado derecho y repite el movimiento hacia el lado izquierdo.
- Completa otras 10 repeticiones y descansa.
4. Ejercita los párpados
Los párpados son una zona sensible que tiende a descolgarse por la pérdida de nutrientes en la piel.
Su tratamiento y ejercicio continuo es esencial, dado que sus tejidos pueden perder elasticidad con más facilidad que otras áreas.
¿Cómo hacerlo?
- Ubica el dedo índice desde la parte inferior del ojo hacia la nariz.
- Sin abrir la boca, comienza a parpadear rápido, tratando de mirar al techo.
- Parpadea durante 20 o 30 segundos y completa 3 repeticiones.
5. Tonifica el contorno de los labios
Esto se debe a que es más delgada y, muchas veces, se descuida dentro de la rutina de belleza. Por fortuna, el ejercicio para tonificarla es muy sencillo y se puede realizar varias veces al día.
¿Cómo hacerlo?
- Abre la boca tanto como te sea posible, sostén 3 segundos y ciérrala.
- Haz 10 repeticiones, 2 o 3 veces.
- Luego, en frente del espejo, pronuncia las bocales en voz alta, tratando de abrir la boca de forma exagerada.
- Realiza otras 10 repeticiones y relaja.
6. Evita la papada
Finalmente, para combatir la flacidez del rostro y prevenir la aparición de papada también debes ejercitar la barbilla a diario. A continuación te explicamos cómo.
¿Cómo hacerlo?
- Parada o sentada en una silla recta, pon la cabeza derecha y la espalda erguida.
- Inclina la cabeza hacia atrás, llevando la mirada hacia el techo, y mueve la boca como si estuvieses masticando algún alimento.
- Sostén unos segundos, regresa a la posición inicial y realiza de 10 a 15 repeticiones.
Recuerda
Para combatir la flacidez en el rostro es necesario ser constantes en la realización de estos ejercicios y reforzar su efecto mediante la práctica de buenos hábitos de vida. Recuerda que incluso una alimentación balanceada ayuda mucho a tener una piel sana.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.