Adiós a los floreros: esta es la tendencia de jardinería para el 2026 según la RHS

Los floreros con flores cortadas empiezan a quedarse obsoletos en muchos hogares. En su lugar, gana terreno una forma de decorar más viva, práctica y alineada con los espacios actuales, plantas pequeñas, funcionales y con algo más que valor estético.
Según la Royal Horticultural Society (RHS), en 2026 veremos cada vez más tabletop tomatoes; tomates compactos cultivados en maceta, pensados para mesas, alféizares o balcones soleados. Son decorativos, ocupan poco y, además, dan fruto. A continuación, te contamos por qué se han convertido en tendencia y cómo puedes replicarla de forma realista en casa.
¿Por qué los tabletop tomatoes están ganando terreno frente a los floreros?
El auge de estos tomates en miniatura no es casual. Responde a un cambio en la manera de entender la jardinería doméstica y la decoración.
- Aportan verde y color durante semanas, no solo unos días.
- Combinan estética y utilidad: decoran y se pueden comer.
- Se adaptan a pisos pequeños y vida urbana.
- Reducen el desperdicio asociado a las flores cortadas.
Para la RHS, también encajan con una tendencia más amplia hacia plantas resistentes, fáciles de mantener y con sentido práctico.
Si quieres llevar esta tendencia a tu hogar, no basta con colocar cualquier tomate en una maceta. Estos son los pasos clave para hacerlo bien desde el principio.
1. Elegir la variedad adecuada
No todos los tomates funcionan para esta tendencia. Para evitar decepciones, es importante escoger variedades enanas o compactas, pensadas específicamente para maceta.
Estas plantas suelen:
- Alcanzar entre 20 y 40 centímetros.
- Tener un crecimiento controlado.
- Producir tomates pequeños tipo cherry.
- No necesitar tutores ni podas complejas.
Elegir la variedad correcta marca la diferencia entre una planta ornamental exitosa y una que se desborda o no fructifica.
2. La maceta importa más de lo que parece
Aunque sean tomates pequeños, necesitan espacio suficiente para desarrollar raíces sanas. Una maceta demasiado justa limita el crecimiento y reduce la producción.
Lo ideal es un recipiente de al menos 15 a 20 centímetros de diámetro, con buen drenaje y un sustrato ligero, rico en nutrientes. Esto permite que la planta se mantenga equilibrada y estable durante todo su ciclo.
3. Ubicación luminosa
La luz es el factor más determinante en el éxito de los tabletop tomatoes. Sin suficiente sol, la planta puede verse verde y frondosa, pero no dará flores ni frutos.
Lo más recomendable es colocarlos:
- En una ventana muy soleada.
- En un balcón con varias horas de sol directo.
- Cerca de una fuente de luz natural intensa.
Al menos seis horas de sol al día son clave para que el fruto llegue a cuajar.
4. Riego constante, sin excesos ni descuidos
El riego debe ser regular y equilibrado. Estos tomates no toleran bien ni la sequía prolongada ni el encharcamiento.
Conviene mantener el sustrato ligeramente húmedo, comprobando con el dedo antes de regar. Cuando el riego es irregular, las flores pueden caerse antes de formar el fruto, algo bastante común en cultivos de interior.
¿Qué producción esperar para no frustrarse?
Uno de los puntos más importantes es entender qué ofrecen realmente los tabletop tomatoes. No están pensados para grandes cosechas.
Lo habitual es obtener una producción moderada, con tomates pequeños pero sabrosos. Su valor principal está en acompañar el espacio, aportar vida y ofrecer algún fruto ocasional, no en sustituir un huerto tradicional.
Errores típicos que conviene evitar desde el principio
Estos son los fallos más frecuentes que hacen que la experiencia no funcione:
- Colocarlos en zonas con poca luz.
- Usar macetas demasiado pequeñas.
- Regar de forma irregular.
- Esperar una producción abundante.
Con expectativas realistas y cuidados básicos, los tabletop tomatoes pueden convertirse en la alternativa perfecta a los floreros clásicos y en una de las tendencias de jardinería más visibles de 2026.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.







