Logo image

¿Tu fregona esparce pelusas? Cómo evitarlo y dejar tu suelo impecable

3 minutos
Un suelo lleno de pelusas después de fregar es decepcionante. Aprende por qué ocurre esto y la mejor manera de evitarlo.
¿Tu fregona esparce pelusas? Cómo evitarlo y dejar tu suelo impecable
Última actualización: 26 septiembre, 2025

Imagina la situación: estás fregando el suelo, te motiva la idea de verlo limpio y, en lugar de eso, terminas con un montón de pelusas y fibras una vez que está seco. La buena noticia es que se puede solucionar fácilmente. 

En este artículo, te enseñamos como limpiar tu fregona para que no vuelva a dejar pelusas después de usarla.

¿Por qué las fregonas sueltan pelusa?

Hay tres motivos principales por los que esto puede pasar. Se trata de los siguientes:

  1. Es una fregona nueva: si es de algodón, suele ser normal que vengan con un exceso de fibras sueltas del proceso de fabricación. Si no se lava y prepara correctamente antes del primer uso, soltarán toda esa pelusa en tu suelo.
  2. Ha llegado al final de su vida útil: las fibras absorbentes de la fregona tienen una vida útil; cuando llegan al final de ella, se debilitan, rompen y caen con la fricción. Si hace tiempo no cambias el cabezal, puede ser momento de hacerlo.
  3. Se le adhieren pelusas en la lavadora: esto es algo que ocurre cuando se lava el cabezal junto con otras prendas en la lavadora. Las fibras de la fregona atrapan las pelusas que sueltan y las liberan cuando la usas.

4 consejos para que tu fregona no deje pelusas en el suelo

Estos pasos que te vamos a compartir son fáciles de aplicar y muy efectivos:

  1. Prepárala bien antes de usarla por primera vez. Sacúdela de manera vigorosa al aire libre antes de su primer uso para soltar las fibras más grandes. Después, sumérgela en un cubo con agua caliente durante 30 minutos y déjala secar por completo. También puedes darle un ciclo de lavado corto en la lavadora al cabezal, pero siempre solo. Este proceso elimina la mayor parte de las fibras sueltas de fábrica.
  2. Lava siempre el cabezal por separado. Cuando ya esté sucia, lava el cabezal en la lavadora, pero sin ningún otro elemento que pueda liberar pelusas. Puedes aprovechar para incluir paños de microfibra que también uses en el aseo, pues este material no suelta nada que se adhiera a las fibras de la fregona.
  3. Elige un modelo de calidad. Opta por opciones de microfibra de buena calidad o de algodón de hebra corta y densa cuando necesites uno nuevo. Estos materiales sueltan menos fibra cuando se están desgastando, además que los de baja calidad se desintegran mucho más rápido con el uso. A la larga, ahorras más con una fregona de calidad.
  4. Asegúrate de que el suelo y el agua estén limpios. Siempre barre o aspira el suelo antes de empezar a fregar. Además, utiliza el método de las dos cubetas (una con agua para limpiar y otra con la mezcla de limpiapisos), ya que fregar con agua sucia puede devolver al suelo las fibras que ya se han soltado.

Paso extra: lava la fregona con vinagre blanco

Después de lavar la fregona, haz un enjuague final sumergiéndola durante 10 minutos en una cubeta con agua fría y un vaso de vinagre blanco. El vinagre ayuda a eliminar cualquier residuo de detergente y cal de las fibras, además compacta ligeramente el algodón, lo que reduce su tendencia a desprenderse.

Como puedes ver, el problema de las pelusas en el suelo es prevenible en la mayoría de casos. Si sabes por qué ocurre, puedes tomar las decisiones adecuadas para que no arruine los resultados de tu esfuerzo y dejar el suelo con el acabado que buscas.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.