9 medidas preventivas para disfrutar del verano sin poner en riesgo tu salud

Escrito y verificado por el médico Galo Flores

Escrito por Galo Flores

Última actualización: 06 julio, 2023

Para disfrutar el verano sin poner en riesgo la salud es necesario poner en práctica algunas medidas preventivas. Si bien es cierto que es una temporada caracterizada por el buen clima y la diversión, también acarrea ciertos riesgos de lesiones y enfermedades. ¿Qué debes saber al respecto?

En primer lugar, se ha determinado que durante la época estival aumentan las visitas a las salas de urgencias debido a varias enfermedades. Muchas son típicas de la época, mientras que otras son la consecuencia de la falta de cuidados y la exposición en actividades peligrosas. ¿Cómo reducir los riesgos?

9 medidas preventivas de salud para disfrutar del verano

El buen clima durante el verano, sumado a las vacaciones, hacen de esta época una de las preferidas del año. Y aunque el ambiente en general invita a relajarse, es fundamental poner en práctica algunos cuidados para proteger la salud ante los riesgos que conlleva la temporada y las actividades. Veamos a continuación varios consejos.

1. Moderar la exposición al sol

De seguro, es la recomendación más frecuente que se hace para esta época. Por fortuna, es posible protegerse de la luz solar de manera sencilla. Tan solo hay que poner en práctica lo siguiente:

• Usar un sombrero para proteger la cabeza.
• Usar ropa ligera y clara para mantenerse fresco.
• Aplicar protector solar de alto factor de protección y reaplicarlo cada dos o tres horas. Además, repetir su uso tras salir del mar o de la piscina.
• Utilizar gafas de sol.
• Permanecer en la sombra entre las once del día y las cuatro de la tarde para evitar las horas de mayor radiación UV.

2. Mantenerse hidratado

Mucho se habla sobre cuidar el estado de hidratación, pero también es importante la limpieza de las bebidas que se ingieren. Se recomienda consumir de dos a dos litros y medio de agua, preferentemente embotellada. El agua corriente o del grifo puede incrementar el riesgo de una infección intestinal.

Esto es muy importante, sobre todo si se viaja a zonas muy cálidas o al extranjero. Lo mismo aplica para las bebidas preparadas; siempre hay que buscar un sitio que cuente con medidas higiénicas. No es recomendable tomar bebidas preparadas en sitios improvisados o poco higiénicos.

3. Extremar las precauciones al nadar

El verano también es la época para disfrutar del agua, pero hay que hacerlo con todas las medidas preventivas adecuadas. En la playa solo hay que bañarse en las zonas habilitadas para tal fin, y cerciorarse de que haya socorristas. La regla de oro de los buzos y los nadadores es jamás nadar solos. Cualquier situación puede ser fatal si no hay alguien cerca para auxiliarnos.

Respecto a tirarse de cabeza al agua, solo debe hacerse si se conoce la profundidad del sitio. Un golpe de esta forma puede provocar lesiones graves. Tres puntos muy importantes que se deben evitar, por seguridad, son los siguientes:

• Tomar baños en el mar en la noche.
• Bañarse después de una comida copiosa.
• Bañarse en el mar o las piscinas tras ingerir alcohol.

Otras medidas preventivas útiles incluyen las siguientes:

• Vigilar a los niños en todo momento.
• Usar de forma adecuada los dispositivos inflables.
• Evitar comidas copiosas.
• Seguir las indicaciones de los socorristas.
• Evitar el acceso de niños pequeños a las piscinas sin adultos.

4. Prevenir la diarrea

Además de las precauciones del agua para beber, también hay que vigilar los alimentos. Ya sea que los prepare uno mismo o que se consuman en algún restaurante, siempre es recomendable observar la higiene.

Basta con recordar que es época de calor, por lo que las comidas se descomponen más rápido. Respecto a esto, es primordial atender a lo siguiente:

• Guardar en el frigorífico todo alimento perecedero.
• Lavarse muy bien las manos antes de preparar los alimentos o consumirlos.
• Si se consumen productos del mar, estos deben estar frescos y jamás se deben comer crudos o mal cocidos.

5. Protegerse de los mosquitos

Las picaduras de mosquitos son muy molestas, ya que provocan picazón. Además, pueden ser graves si transmiten agentes infecciosos como los que provocan la fiebre del Nilo Occidental, el dengue o el paludismo. Estas últimas tienden a transmitirse por picaduras de mosquitos en regiones tropicales del mundo.

Por lo tanto, en caso de viajar al extranjero para disfrutar el verano, es conveniente informarse sobre las zonas de contagio de estas afecciones y tomar las medidas preventivas. Para prevenir las picaduras de este y otros insectos, se recomienda usar un buen repelente. De igual manera, es útil usar prendas que cubran la mayor parte del cuerpo.

6. Viajar con los medicamentos habituales

En verano son muy frecuentes los viajes, tanto cortos como lejanos. Pero antes de hacerse al camino, hay que asegurarse de llevar la medicación habitual. Además, este verano tiene una particularidad más, la pandemia. Por ello, si se van a realizar viajes internacionales, es necesario consultar el semáforo de riesgo y los requisitos de vacunación.

También es importante mantener los medicamentos lejos de la luz del sol y del calor. Recuerda que hay fármacos que producen fotosensibilidad. Si hay dudas respecto a esto, lo mejor es consultar al médico.

7. Evitar los efectos del calor

Con la llegada de esta época del año, aumentan las temperaturas de forma considerable. En este sentido, se deben tomar medidas preventivas para evitar los efectos del calor sobre el organismo y así disfrutar del verano. Dentro de las principales consecuencias destacan los golpes de calor y los calambres.

Las recomendaciones en este caso son muy sencillas y se basan en ingerir al menos 2 litros de agua diarios. Además conviene evitar la exposición al sol en las horas de mayor temperatura y usar ropa holgada. Por parte, se debe buscar atención médica ante síntomas como debilidad, mareos y dificultad para caminar.

8. No hacer cambios bruscos de temperatura

Los aires acondicionados pueden ser grandes aliados en el verano, sobre todo en los días más calurosos. Sin embargo, es importante no hacer cambios bruscos de temperaturas para evitar enfermarse en verano. Dichos cambios pueden aumentar la probabilidad de padecer enfermedades respiratorias.

Una de las principales medidas preventivas en este caso es mantener el aire acondicionado entre 2 y 4 °C por debajo de la temperatura ambiente. Además se recomienda evitar los baños fríos con agua menor a 25 °C.

9. Disfrutar del verano sin excederse ni arriesgarse

Durante el verano, algunos sitios pueden ser muy divertidos y con un gran ambiente de fiesta. Pero los peligros cotidianos están ahí, en todo momento. Si se bebe alcohol, hay que procurar no excederse y olvidarse de conducir cualquier vehículo.

Si se decide tener sexo ocasional, la protección ante enfermedades de transmisión sexual es indispensable. Para cuidar la salud en el verano hay que aplicar el sentido común, y no atreverse a hacer todo aquello que no se haría en un día cualquiera.

Consultar al médico siempre que sea necesario

Al salir de casa, es importante saber dónde obtener atención médica. Si algo no marcha bien con la salud, lo mejor es consultar. El médico será el único con las facultades para atender cualquier inconveniente, sea una enfermedad, una infección o una lesión.

De cualquier manera, lo más importante es mantener una actitud de prevención y cuidado durante todas las actividades de esta temporada. Alejar los riesgos aplicando las medidas preventivas es la mejor forma de disfrutar el verano sin exponer la salud.