¿Qué es una olla de cocción lenta y por qué la necesitas en tu cocina?

La olla de cocción lenta o slow cooker es muy fácil de usar, en ella puedes hacer recetas con sabores muy acentuados y saludables. ¡Descubre más detalles sobre por qué deberías tener una!

Si no sabes qué es una olla de cocción lenta o Crock pot, entonces tienes que leer esta nota de principio a fin. Además de explicarte sus funciones principales, te enseñaremos cómo la puedes usar en casa. Créenos, este utensilio de cocina te va a cambiar la vida y la forma de cocinar. 

En un principio, tras ser inventada por Irbing Naxon, esta olla no tuvo demasiado impacto. Sin embargo, luego de que la marca Crock-Pot® la empezara a comercializar, su éxito ha cruzado fronteras. Es muy utilizada en Estados Unidos y en algunos países de Europa. A continuación, te contamos más sobre sus funciones.

¿Qué es la olla de cocción lenta?

La slow cook, también conocida como slow coocker, es una olla de cocción lenta. Para ser más exactos, los platillos que allí se preparan pueden tardar entre 4 y 12 horas en estar listos. Por eso, es ideal para sacar adelante aquellas recetas que requieren una cocción a una temperatura máxima de 95 a 100 grados centígrados.

Está compuesta por dos partes; la carcasa que se enchufa a la electricidad, que cuenta con unas resistencias internas capaces de soportar su uso durante las horas necesarias. La otra parte es un recipiente extraíble de cerámica que se ubica en el interior de la carcasa y donde se colocan los alimentos.

Lo interesante de esta herramienta es que la temperatura va subiendo de manera gradual hasta alcanzar la máxima deseada. De este modo, los alimentos se cocinan de una manera más saludable.

Recuerda que hay productos que pierden sus propiedades nutricionales cuando se someten a altas temperaturas. Un ejemplo de ello es la carne; las evidencias indican que las temperaturas demasiado altas pueden provocar alteraciones en la integridad molecular de algunos de sus aminoácidos, lo que a su vez afecta su digestibilidad.

¿Cómo funciona la slow cook?

Lo mejor de la olla de cocción lenta es que es muy sencilla de usar. Según el modelo, contará con un tablero manual o digital en el que suelen visibilizarse tres modalidades:

• Low, para una temperatura baja.
• High, que es cocción normal.
• Warm, en la que se mantiene la comida caliente.

Hay otras que, además de estas opciones, tienen un temporizador para programar con más exactitud el tiempo de cocción. Para ponerla a funcionar solo deberás tener listos los alimentos que quieres cocinar, conectarla a la electricidad y programarla según tus preferencias.

Recomendaciones de uso

Considerando las tres modalidades de uso de la slow coooker, queremos detallar un poco más en cada una para que le des un uso adecuado.

• Warm (keep warm en algunos modelos): mantiene los alimentos a una temperatura óptima para servirse. No obstante, hay que tener en cuenta que durante su uso la comida sigue cociéndose, así que no debe prolongarse por mucho tiempo.
• Low: te permitirá cocinar tus alimentos a una baja temperatura. Ideal para recetas que así lo requieran. Además, resulta útil para descongelar alimentos o calentar platos muy fríos.
• High: puedes emplearla para cocinar tus platillos favoritos en menor tiempo, siempre recordando que la temperatura más alta es entre los 95 y 100 grados centígrados.

Cosas que puedes preparar en la olla de cocción lenta

En la olla de cocción lenta puedes preparar prácticamente lo que se te antoje. Como lo mencionamos antes, hay evidencia de que cocinar las carnes a fuego bajo conserva mejor sus nutrientes y le da una textura más suave. También podrás preparar verduras, guisados, sopas y hasta deliciosos postres.

¿Por qué debería tener una olla de cocción lenta?

Si todavía te estás preguntando por qué deberías tener una slow cook en casa, vamos a enlistarte algunos beneficios que hay que considerar. Luego de leerlos, podrás tener una visión más clara y tomar tu decisión de compra con toda la información que necesitas.

• Alimentos más nutritivos: como lo mencionamos antes, hay evidencia de que los alimentos pierden nutrientes cuando se cocinan a altas temperaturas. Así que al usar esta olla podrás consumir productos bien cocidos y poco alterados en su composición.
• Preparaciones más exquisitas: la cocción lenta hace que los alimentos tengan una mejor textura, sean más jugosos y sus sabores originales y agregados a través de los condimentos estén más presentes.
• Recetas de alta cocina: el método de cocción y el espacio que suelen tener hace que se puedan ejecutar recetas de alta cocina con mucha facilidad. Incluso, se pueden hacer platos enteros o one-pot meal.
• Nada se pega: el material del que está hecha la bandeja de la olla de cocción lenta impide que los alimentos se peguen, así que los puedes disfrutar enteros y deliciosos. Esto también facilita la limpieza de la olla.
• Tiene un bajo consumo de energía: la slow cooker no consume tanta energía como podrías estar imaginando. La razón es que fueron fabricadas con un sistema especial para estar mucho tiempo conectadas, así que la factura no será un dolor de cabeza después de usarla.

¿Ya te decidiste a comprar tu slow cooker?

Como puedes darte cuenta, la olla de cocción lenta no es nada del otro mundo, pero sí que trae bienestar a tu casa. Tener una facilita mucho la preparación de alimentos, mientras conserva sus mejores nutrientes y sabores.

Si tienes poco tiempo por cuestiones de trabajo o estudio, programa tu slow cooker y deja que la magia ocurra allí adentro, porque así de sencillo es usarla.