Logo image
Logo image

Paratimia: todo lo que debes saber

5 minutos
Una persona se echa a reír en un entierro y todos la miran mal. ¿Por qué hace eso? Tal vez la razón esté en que sufre paratimia, un desorden afectivo que tiene causas que revelaremos.
Paratimia: todo lo que debes saber
Elena Sanz

Revisado y aprobado por la psicóloga Elena Sanz

Última actualización: 25 mayo, 2023

Reír en un entierro o cuando un amigo expresa su desolación porque un familiar muy querido tiene una enfermedad terminal debería hacernos sospechar de paratimia. Este es un trastorno o desorden afectivo que sufre una persona cuando experimenta sentimientos inadecuados en una situación concreta.

Pero esto no significa que no esté triste cuando ríe en un entierro, como en el ejemplo expuesto. Solo evidencia que lo que se piensa y lo que se expresa son dos cosas muy diferentes entre sí.

Conviene que no confundamos la paratimia con la indiferencia emocional. En la primera se sienten las emociones, pero se es incapaz de expresarlas de un modo adecuado. No sucede lo mismo con la indiferencia emocional, en la que no se sienten ni se es capaz de expresar ningún tipo de emoción o sentimiento.

Tipos de paratimia

Para que podamos conocer mejor este trastorno afectivo debemos hablar de los 3 tipos que existen. Es importante diferenciarlos, ya que se pueden confundir entre sí.

Aunque tienen partes en las que coinciden, también cuentan con diferencias. Por esta razón, vamos a ver cada uno por separado.

1. Paratimia

Este primer tipo es al que nos hemos referido hasta este momento de una manera muy general. Cuando la persona lo experimenta es incapaz de expresar una emoción que concuerde con lo que está sintiendo.

Son emociones que confunden a quienes están a su alrededor porque no van acordes a lo que se está sintiendo. Es como si algo no funcionase bien; como si hubiese una desconexión.

Some figure
La expresión de las emociones sigue un proceso que está alterado en la paratimia, por lo que aparece desconcierto entre los están alrededor.

2. Paratimia positiva

Un segundo tipo es la paratimia positiva. Cuando una persona experimenta esto se encuentra en un estado de hiperactividad y euforia.

Este estado se mantiene en el tiempo y esto es lo que lo diferencia de la fase maníaca en el trastorno bipolar. En este desorden afectivo el estado de euforia puede prolongarse y desconcertar a quienes están alrededor.

Sigue leyendo: Trastorno bipolar tipo I

3. Paratimia negativa

El tercer tipo de este desorden afectivo es la paratimia negativa. En este caso sucede todo lo contrario que en el anterior.

La persona expresa un estado de tristeza que tiene una duración larga. También lo podríamos comparar con la fase de depresión del trastorno bipolar. Pero la persona puede sentirse feliz o estar feliz, siendo incapaz de expresarlo. Lo único que manifiesta es una gran tristeza, una melancolía de la que no se puede deshacer.

¿Cuáles son las causas de la paratimia?

Existen diferentes causas que pueden hacer que este desorden aparezca. La más común es la esquizofrenia, un tipo de demencia. También puede surgir tras un golpe o lesión en la cabeza que provoque un daño cerebral.

¿Qué otras causas puede haber? Pues que haya un trastorno del estado de ánimo, como el bipolar, que ya hemos mencionado para comparar la paratimia positiva y negativa. De hecho, esto nos hace pensar en que este desorden afectivo rara vez aparece solo.

Síntomas de la paratimia

Los síntomas de este desorden afectivo podrían reunirse en uno solo: la incapacidad para expresar lo que realmente se está pensando o sintiendo. Las personas de alrededor se extrañan y se asustan, ya que no comprenden por qué se llora en una fiesta de cumpleaños o se ríe en un entierro.

Es algo que desconcierta, que choca con los conocimientos culturales. También causa desazón y frustración en la propia persona.

Los pacientes con paratimia no pueden controlar la manera en la que expresan lo que sienten o piensan. Esto provoca, no solo que los demás los rechacen, sino que ellos mismos se terminen rechazando. La situación lleva al aislamiento, a no sentirse merecedor de estar con otros. La autoestima se ve perjudicada.

Descubre: Trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo

Algunos ejemplos

Hemos puesto varios ejemplos de la paratimia, pero creemos necesario recalcar algunos más para que quede claro lo que este trastorno implica. Es cierto que no es habitual encontrarnos con personas que sufran el desorden afectivo, pero conocer los síntomas y lo que provoca en ellas nos ayudará a entenderlas en el caso de que seamos testigos:

  • Una persona expresa muy sonriente que está sufriendo mucho en su vida.
  • Alguien cuenta que tiene un cáncer terminal y se echa a reír.
  • Se expresa una gran tristeza cuando alguien dice que le quiere mucho.
  • En su propia boda puede mostrar desolación, tristeza, llanto.
Some figure
Comprender que estos pacientes no tienen la posibilidad de expresar correctamente lo que sienten genera empatía. Es importante que no sean aislados.

¿Cómo puede tratarse?

El tratamiento más adecuado para la paratimia es el farmacológico. Se prescriben antipsicóticos, antidepresivos y ansiolíticos.

Pero esto por sí solo no va a ser suficiente. El abordaje farmacológico debe acompañarse de terapia para educar emocionalmente a la persona que sufre paratimia. Así, también aprenderá determinadas estrategias para expresar lo que está sintiendo.

También hay que tener muy en cuenta las causas. Un daño cerebral, si tiene un buen pronóstico, puede que no requiera de fármacos. Por esta razón, insistimos en lo importante que es comprender este desorden.

Si tiene esquizofrenia o algún trastorno de la personalidad, todavía debemos entender más lo que le ocurre. Hay muchos trastornos que todavía están a la sombra. Sacarlos a la luz nos permitirá ser más comprensivos con los demás.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Bleuler, E. (1996). La esquizofrenia (1926). Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría.16(60), 664-676.
  • Lince, B. Á. (2011). La posición depresiva. Desde el Jardín de Freud, (11), 77-92.
  • Melero, M. L. (2018). La indiferencia afectiva como rasgo nocivo de la personalidad. Anuario de derecho penal y ciencias penales71(1), 265-305.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.