¿Por qué la demencia afecta la salud dental?

Existe una estrecha relación entre la demencia y la salud dental. Sigue leyendo y entérate sobre cómo la boca resulta afectada al sufrir este trastorno mental.
¿Por qué la demencia afecta la salud dental?
Vanesa Evangelina Buffa

Revisado y aprobado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa.

Última actualización: 27 julio, 2023

Todas las partes del cuerpo están conectadas entre sí, por lo que los problemas de un sector pueden ocasionar daños en otros sitios distantes. En este artículo te contamos la relación que existe entre la demencia y la salud dental.

Descuidar la salud bucodental no solo ocasiona enfermedades odontológicas; también puede tener consecuencias en otros sistemas alejados de la boca y favorecer la aparición de muchos trastornos; la demencia es uno de ellos.

Ahora bien, hay que considerar que los pacientes que sufren demencia no logran realizar actividades de la vida cotidiana por sí mismos. Por lo tanto, si otra persona no se ocupa, el cuidado de la salud oral muchas veces cae en el olvido. ¿Te interesa saber más al respecto? ¡Continúa la lectura!

Relación entre demencia y salud dental

La mala higiene dental y la acumulación de bacterias en la boca provocan enfermedades en los dientes y las encías. Asimismo, se pueden generar trastornos en otras partes del cuerpo. Existe evidencia de la relación entre los problemas periodontales y la diabetes, así como con las afecciones cardíacas y vasculares, por ejemplo.

El estado de la salud dental también se asocia con la aparición de trastornos neurológicos, como la demencia. Esta enfermedad neurodegenerativa progresiva altera la capacidad de realizar actividades con normalidad. Disminuye la memoria, el razonamiento y la comunicación, y altera la conducta.

Si bien la etiología precisa aún es desconocida en muchos casos, se sabe que se producen cambios químicos en el cerebro y muerte del tejido nervioso. Existe una asociación entre los gérmenes orales y el padecimiento de estos trastornos. Los microorganismos de la boca podrían alcanzar el cerebro y causar inflamación y daños importantes.

Las personas que no se cepillan los dientes y tienen una deficiente higiene oral tienen más posibilidades de desarrollar enfermedades mentales. Así pues, los hábitos que cuidan la boca con determinantes para reducir el riesgo a futuro. 

De todos modos, cuando la patología ya está instalada, sigue existiendo una relación estrecha con la boca. La demencia impacta de manera negativa en la salud dental. De hecho, los estudios sugieren que las tasas de problemas orales son mayores en personas con deterioro cognitivo.

La imposibilidad de realizar actividades cotidianas dificulta el mantenimiento de las rutinas de cuidado bucal. De esto resulta una mayor prevalencia de caries, enfermedad periodontal, lesiones no tratadas y pérdida de piezas dentarias.

Relación entre demencia y salud dental
El desarrollo de enfermedades bucodentales se asocia a una mayor incidencia de demencia. A su vez, la demencia dificulta el cuidado oral.

Problemas de salud dental más comunes en personas con demencia

Las personas que sufren demencia pueden presentar distintos problemas de salud dental. La disminución de la capacidad para mantener una adecuada higiene dental o sus prótesis es uno de los causantes más significativos del deterioro oral.

Además, la sequedad bucal, los cambios en la dieta y la medicación que se utiliza para tratar estos trastornos favorecen el desarrollo de las enfermedades. ¿Cuáles son los problemas de salud más frecuentes? A continuación, los detallamos.

Gingivitis y enfermedad periodontal

Cuando la higiene bucodental es inadecuada, las bacterias y los restos de alimentos se van depositando y acumulando sobre las superficies dentarias y las encías. Es lo que se denomina «placa bacteriana». Si no se elimina con el cepillado diario, puede ir calcificándose, lo que da lugar al sarro o a los cálculos dentales.

Estos acúmulos de bacterias y sarro provocan la inflamación del tejido gingival o gingivitis. Las encías se tornan de color rojo intenso, se hinchan, duelen y sangran con facilidad. Sin un tratamiento oportuno, esta puede evolucionar a la enfermedad periodontal.

La inflamación progresa y se produce la infección de los tejidos que dan sostén a las piezas dentarias. En consecuencia, se forman bolsas profundas en la encía, que contienen sarro, bacterias y pus. Además, se destruye el hueso que sujeta a los dientes, lo que hace que estos se muevan o se salgan.

Por si fuera poco, esta inflamación no solo tiene consecuencias en la boca. Tal y como lo expone un estudio de la Universidad de Cartagena, también empeora y acelera la progresión del deterioro cognitivo de ciertos cuadros neurológicos, como el alzhéimer.



Caries dental

La caries es otro de los problemas de salud dental frecuentes en las personas con demencia. Las coronas dentarias, los cuellos del elemento y las raíces son las localizaciones más comunes de las lesiones en estos pacientes.

Se trata de la destrucción de los tejidos duros del diente por la acción de los ácidos que producen las bacterias de la boca al metabolizar los hidratos de carbono de la dieta. La falta de higiene dental y una dieta abundante en azúcares favorecen su aparición.

Si la pérdida de minerales de los dientes no se trata de manera oportuna, la pieza dentaria se va destruyendo. La lesión avanza hacia el centro del elemento dentario, donde se encuentra la pulpa. Es así que los pacientes pueden presentar sensibilidad, dolor y complicaciones, como infecciones o fracturas.

Sequedad bucal

La xerostomía o boca seca es una problemática de salud dental bastante frecuente en los pacientes con demencia, sobre todo en aquellos que toman antidepresivos y sedantes. Muchos medicamentos que se utilizan como tratamiento de la demencia disminuyen la producción salival, con la consecuente sequedad.

La falta de hidratación en la boca ocasiona incomodidad para comer, tragar y hablar. También genera problemas con las dentaduras postizas al dificultar que permanezcan en su lugar o haciéndolas incómodas de llevar. Asimismo, favorece el desarrollo de caries y enfermedad periodontal.



Otros problemas orales

La demencia puede favorecer la aparición de otros problemas de salud dental, como las lesiones en las mucosas. El descuido y la falta de mantenimiento de las prótesis está asociado a la aparición de estomatitis, hiperplasias, ulceraciones y micosis en la boca.

La inflamación de las comisuras labiales (queilitis) y del resto de las mucosas orales (mucositis) también son comunes en estos pacientes. Incluso, estos pueden presentar hiperplasias o agrandamientos de las encías por el uso de ciertos medicamentos.

Importancia de cuidar la salud dental en personas con demencia

Velar por la salud dental de las personas con demencia es determinante para evitar los problemas mencionados. En general, esto aporta los siguientes beneficios:

  • Mejora la calidad de vida: los pacientes podrán realizar las funciones bucales sin inconvenientes. Así, podrán hablar y comer con comodidad, sin sentir dolor y con una apariencia que les dé seguridad y confianza.
  • Cuestiones médicas: al minimizar los microrganismos orales, se evitan complicaciones de la enfermedad o la aparición de nuevos trastornos en otras partes del cuerpo. Además, se controlan los efectos secundarios de algunos medicamentos usados para tratar la demencia.
  • Razones odontológicas: el cuidado de la salud bucodental previene la aparición y el desarrollo de patologías orales y sus complicaciones. De esta manera, se mantienen las piezas dentarias y las mucosas sanas, lo que evita consultas de urgencia y la necesidad de extracciones dentales.
  • Mejora el comportamiento: padecer incomodidad o dolor en la boca puede llevar a que las personas con demencia se muestren irritables o agresivas. Incluso, se pueden negar a alimentarse o higienizarse.

Consejos para mantener la salud dental en casos de demencia

El cuidado de las personas con demencia se puede volver dificultoso y muchas veces requiere la asistencia de acompañantes. A continuación, mencionamos algunos consejos que pueden ayudar a mantener su salud oral.

1. Higiene bucodental

Realizar una adecuada higiene bucodental es fundamental en estos pacientes. Es primordial eliminar los depósitos de placa bacteriana de los dientes y las encías. Si la persona no ha perdido la facultad de mantener sus rutinas de cuidado, puede hacerlo por sí misma.

Esto debe incluir el cepillado de dientes y encías regular, tres veces al día, con un cepillo suave y pasta dental con flúor. Además, es conveniente el uso de hilo dental, irrigadores o cepillos interdentales para limpiar la zona entre los dientes.

Puede que el odontólogo también recomiende el uso de enjuagues bucales con flúor o con clorhexidina. Estos productos ayudan a disminuir la proliferación bacteriana o prevenir las caries.

Si la capacidad para manipular el cepillo de dientes o la realización de la rutina de limpieza se ve afectada, es importante que los cuidadores o los miembros de la familia ayuden a la persona con esta tarea. Existen distintas técnicas que se pueden utilizar para este fin:

  • Dar orientaciones: órdenes precisas y cortas para dividir el proceso en pasos pequeños; toma el cepillo, colócale pasta, llévalo a la boca, etcétera.
  • Copiar: se motiva a la persona a copiar a otra que se coloca frente a ella y que también se está limpiando los dientes.
  • Puente: la persona con demencia sostiene un cepillo dental y el cuidador realiza la limpieza dental con otro cepillo.
  • Mano sobre mano: el paciente sostiene el cepillo dental, y la mano del cuidador guía los movimientos para limpiar los dientes juntos.
  • Bostezar: el cuidador bosteza frente a la persona con demencia para estimular su apertura bucal y aprovechar el momento para cepillar sus dientes.

2. Cuidar las dentaduras

Si la persona utiliza dentaduras postizas, su mantenimiento es de suma importancia. La prótesis se debe retirar de la boca en el momento del cepillado dental. Asimismo, ha de limpiarse de manera adecuada con agua y jabón común. Para ello, conviene utilizar un cepillo de dientes suave.

Cada una o dos semanas se recomienda sumergir la prótesis en un vaso con una pastilla antiséptica efervescente para limpiar las impurezas más profundas. Además, cada noche se recomienda retirar la prótesis y dejarla en un vaso con agua.

Nota: si el paciente vive en una residencia para ancianos, identificar la dentadura con nombre y apellido evitará confusiones o extravíos.

Consejos para mantener la salud dental en casos de demencia
Una adecuada limpieza de las dentaduras postizas puede reducir el riesgo de enfermedades orales.

3. Controlar la dieta

Para mantener una adecuada salud dental, el cuidado de la alimentación es fundamental. Controlar la ingesta de hidratos de carbono y reducir el consumo de azúcares refinados y alimentos ultraprocesados aporta bienestar a la persona y disminuye el riesgo de patologías orales.

Una hidratación adecuada, prefiriendo el agua sobre las demás bebidas, también es importante. De esta manera, se contrarresta la sequedad bucal tan frecuente en estas personas.

4. Visitas regulares al dentista

Es muy importante que las personas con demencia sigan visitando de manera habitual al dentista. El profesional podrá ayudar a mantener la salud dental, detectar los problemas que aparezcan a tiempo y asesorar a los cuidadores sobre el cuidado oral del paciente.

Si es posible continuar con el odontólogo de toda la vida, con quien el paciente ya está familiarizado, las prácticas y la aceptación del tratamiento pueden resultar más fáciles. De todos modos, existen casos más graves que requerirán la atención de profesionales especializados.

Se recomienda que la persona con demencia acuda a las revisiones odontológicas acompañado por su cuidador o un familiar. Esto evitará momentos de tensión o estrés frente a lo desconocido.

A la hora de visitar al dentista es fundamental hacerle saber el diagnóstico de demencia. Es de utilidad acudir a la consulta con un historial médico completo y el listado de los medicamentos que la persona toma.

Compromiso con el cuidado dental

El cuidado de la salud dental implica la práctica de hábitos que los pacientes con demencia no pueden sostener por sí mismos. Contar con familiares, cuidadores y dentistas comprometidos con su bienestar es fundamental. Con el acompañamiento adecuado, el deterioro de la salud bucal se puede evitar.


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