Primeros auxilios para quemaduras con agua caliente

Escrito y verificado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli

Escrito por José Gerardo Rosciano Paganelli

Última actualización: 24 mayo, 2023

Las quemaduras con agua caliente son uno de los accidentes domésticos más habituales. Este tipo de quemaduras suceden, sobre todo, en la cocina cuando se manipulan ollas que tienen un agarre difícil o bien, no se tiene el suficiente cuidado. En algunos casos, la quemadura puede producirse a consecuencia de un mal agarre de una olla, taza, u otro recipiente.

Cuando no tenemos cuidado, el agua y, en general, los líquidos calientes se pueden derramar fácilmente sobre la piel y quemarla. En esos casos, se debe tener en cuenta que las prioridades son las siguientes:

• Aliviar el dolor.
• Prevenir que la quemadura se expanda.
• Favorecer una buena cicatrización.

Algunos de los accidentes más graves ocurren en el hogar. Sobre todo cuando hay niños en casa, las caídas, los golpes, las quemaduras, y los incidentes con la electricidad son habituales.

A continuación, te damos algunos consejos y te explicamos los primeros auxilios para tratar las quemaduras con agua caliente. 

Tipos de quemaduras

En primer lugar, debes saber que las quemaduras se clasifican según la gravedad que tengan, en tres grados, sabiendo que a mayor grado le corresponde mayor gravedad de quemadura.

• Primer grado: afectan la capa superficial de la piel. Los síntomas son enrojecimiento, hinchazón y un poco de dolor: este tipo de quemadura se curará en un plazo comprendido entre tres y seis días.
• Segundo grado: afectan a la segunda capa de la piel, provocan la formación de ampollas, enrojecimiento y secreción de fluido en la zona de la quemadura. Su tiempo de curación es aproximadamente de tres semanas. Puede dejar cicatriz o decolorar la piel.
• Tercer grado: son las más severas y precisan tratamiento médico urgente. La quemadura traspasa todas las capas de la piel y es realmente doloroso.

Lee: Calmar el ardor de las quemaduras de forma natural

Quemaduras con agua hirviendo

Las quemaduras con agua caliente son accidentes domésticos muy frecuentes, poner un cazo con agua en el fuego puede convertirse en un peligro sobre todo si hay niños en la casa. Es preciso tener mucho cuidado y tomar medidas de precaución tales como:

• Tener cuidado al destapar las ollas y al agarrar recipientes con líquidos calientes en el microondas.
• Cuando cocinemos, siempre colocar las ollas lo mas alejados del borde y con los mangos hacia dentro.
• Tener mucha precaución al abrir la puerta del horno.

Si solo nos salpica un poco de agua caliente nos causará un poco de dolor en ese momento y probablemente desaparecerá enseguida. Para calmar el ardor se aconseja mojar la zona con agua fría.

Sin embargo, cuando la quemadura es más grave, el dolor no cesa y el enrojecimiento es mayor o incluso se pueden formar ampollas. En este caso, lo más adecuado es  ir a un servicio médico. Además no debes estallar las ampollas para evitar una lesión mayor o una infección.

En el caso en el que la ropa se quede pegada a la piel, no debes intentar retirarla, mójala con agua fría y acude de inmediato al servicio de urgencias.

Tratamientos para las quemaduras con agua caliente

Ya hemos dicho que ante una quemadura con agua caliente, es importante actuar rápido a la vez que evaluamos los daños.

Si tenemos claro que estamos ante una quemadura de primer grado, es decir superficial, podemos seguir los siguientes pasos:

• Refresca la herida con abundante agua fría.
• Aplica un vendaje húmedo sobre la zona afectada, tenlo así entre media y una hora, evita que la quemadura este en contacto con agentes nocivos.
• Toma un antiinflamatorio para el dolor.
• Humedece las vendas antes de retirarlas para que no se peguen en la piel.
• A los 7 días  limpia y retira la piel muerta usando una gasa mojada con suero fisiológico.

Si aún aplicando todas estas medidas notamos dolor y otras molestias, entonces será necesario acudir al médico para una evaluación y tratamiento acorde al tipo de quemadura que se haya podido producir.

Es importante recordar que no es recomendable recurrir a los cataplasmas y ungüentos con hierbas o aloe vera, ya que no todas las pieles son iguales ni reaccionan favorablemente a las mismas sustancias, aún cuando estas sean naturales. También porque, en lugar de brindar alivio, en muchos casos pueden provocar aún más molestias.