Aprende a secar el cabello sin dañarlo con estos 11 consejos

Tras salir de la ducha, una de las tareas que más demandan tiempo en la rutina de belleza es secar el cabello. Aunque la mejor opción es permitir que se seque al aire libre, la mayoría desea acelerar este proceso para salir de casa con un mejor aspecto o con algún peinado en particular.

Y si bien las herramientas de calor —como el secador— son la solución más rápida, existen otros trucos de secado natural que pueden implementarse con más regularidad sin afectar las hebras capilares. ¿Te animas a ponerlos en práctica?

1. Usar acondicionador y peine

Por si no lo sabías, la aplicación de acondicionador en el cabello no solo suaviza sus fibras. Este producto está compuesto por siliconas especiales que ayudan a repeler el agua. Además, sus fórmulas hidratan y nutren, lo que hace que las hebras estén más manejables al momento de peinar.

De todos modos, para complementar su efecto, resulta útil tener en la ducha un peine de dientes anchos que garantice una aplicación uniforme del producto y que, de paso, ayude a remover los nudos.

2. Elegir una toalla adecuada

Uno de los elementos imprescindibles para secar el cabello rápidamente es la toalla. Ahora bien, ¿elegir una de algodón o de microfibra? Esta duda es bastante frecuente. Lo cierto es que ambas tienen sus ventajas para favorecer el secado.

Hay quienes afirman que son mejores las de microfibra porque absorben hasta dos veces más el agua. Aun así, las de algodón también cumplen la función y son suaves con el pelo. Un truco bastante popular, difundido por famosas como Jessica Alba, consiste en enrollar la toalla en forma de turbante para absorber mejor el agua.

Asimismo, para evitar el frizz, se recomienda secar con pequeños toquecitos el cabello, sin frotar o ejercer fricción, ya que esto puede ocasionar rotura capilar y enredos.

3. Optar por una camiseta de algodón

Este truco también se conoce como  Air Plopping. Consiste en poner una camiseta de algodón sobre la cama, extender el pelo sobre esta y, luego, anudar las mangas sobre la frente para envolver todo el cabello. Una vez hecho esto, se deja actuar de 10 a 20 minutos.

La idea es que la camiseta absorba la humedad y evite la formación de frizz, sobre todo en aquellos cabellos rizados y rebeldes. Se dice que es útil para mantener la forma natural del rizo.

4. Elegir el cepillo correcto

Los cepillos son el complemento idóneo para acabar de retirar los excesos de humedad en el cabello. Además, cumplen una función importante cuando se realiza un secado con herramientas de calor.

Para un secado al aire libre se recomiendan aquellos de fibras naturales; sin embargo, si es con secador, es mejor optar por los redondos con ventilación en cerámica. Estos permiten que el aire fluya de manera adecuada y seque cada mechón.

5.  Usar secador, pero con reglas

Como hemos comentado, el uso de secador es una de las formas más rápidas para secar el cabello. Aun así, hay algunas reglas para utilizarlo. Lo primero es dejar secar el cabello al natural en un 30 o 40 % antes de utilizar este elemento.

Además, hay que aplicarle un protector de calor tanto para contrarrestar el frizz como para minimizar los daños causados por las altas temperaturas. De ser posible, conviene utilizar un secador iónico con diferentes velocidades y boquillas. Además, este debe conservar una distancia de 10 centímetros frente al cabello.

El secado debe comenzar por las raíces y, poco a poco, se va desplazando hacia el largo de las hebras. Procura hacerlo en un espacio ventilado, por fuera del área del baño, ya que la humedad del ambiente puede causar encrespamiento.

La Academia Estadounidense de Dermatología también recomienda usar la configuración de calor más baja, limitar el tiempo de uso y reducir su frecuencia a una vez por semana. 

6. Usar una toalla caliente

Dado que no es conveniente utilizar un secador con frecuencia, un truco sencillo que puede acelerar el secado es absorber la humedad con una toalla caliente. El tip consiste en calentarla con la ayuda de la plancha, y luego envolver el cabello cuando aún esté caliente.

Se dice que el calor hace que las cutículas del pelo se abran, lo que acelera el secado.

7. Secar el cabello al aire libre es más sano

El secado al aire libre es la opción más saludable para secar el cabello, pero tarda un poco más. Como hemos comentado, elementos como la toalla y el cepillo pueden remover el exceso de humedad para acelerar el proceso.

También se recomienda aplicar productos de styling como serúms o cremas para peinar que ayuden a moldear. Por ejemplo, si se tiene el pelo corto, se puede utilizar un acondicionador sin enjuague, para luego peinar y dar forma con el cepillo.

8. Aplicar el truco del papel de cocina absorbente

El objetivo es retirar la mayor cantidad de agua posible para que el cabello se seque más rápido; por eso, hay quienes han implementado un truco bastante particular. Se trata de absorber el exceso de humedad restante con papel de cocina absorbente, luego de usar la toalla.

El argumento es que estos productos tienen una gran capacidad de absorción, lo que facilita la tarea. Sin embargo, el papel debe ser de muy buena calidad para que no se desintegre ni deje restos en el pelo.

9. Evitar el uso de aceites o productos con alcoholes

Aceites como el de argán y el de coco se recomiendan por sus cualidades hidratantes y su capacidad para reducir el frizz. No obstante, estos deben aplicarse cuando el cabello ya esté seco. Sobre el pelo húmedo pueden ralentizar el proceso de secado. Lo mismo ocurre con aquellos que tienen alcohol en su composición. Además, si luego se usan elementos de calor, pueden conducir a daños en las hebras.

10. Peinar durante todo el proceso

Cepillar antes, durante y después del secado es esencial para dar suavidad a las fibras. De hecho, si se utilizan elementos como el secador, esto facilita que el calor penetre más rápido. ¿El resultado? Una melena con una superficie más uniforme y estética.

11. Aplicar productos especializados

En el mercado existen productos que tienen entre sus ingredientes polímeros conductores de calor, que funcionan como un imán que atrae la humedad y facilita el secado. Aun así, es necesario usarlos en pocas cantidades para no apelmazar el cabello.

Un buen secado se refleja en el aspecto del cabello

Implementar estos cuidados al momento de secar el cabello es determinante para que conserve un aspecto saludable. Más allá de los resultados estéticos que se consiguen al secar el pelo, hay que considerar que hacerlo de forma adecuada es clave para evitar la rotura o caída de sus hebras.