TSH baja: ¿cuáles son las causas?

La TSH es la hormona responsable de regular la producción de hormonas tiroideas. Su desequilibrio manifiesta problemas tanto de hipotiroidismo como de hipertiroidismo.
TSH baja: ¿cuáles son las causas?
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Leonardo Biolatto

Última actualización: 09 julio, 2023

La TSH u hormona estimulante de la tiroides es una molécula que está implicada en las posibles disfunciones de la glándula. Es por ello que, cuando tenemos determinados síntomas relacionados con este órgano, el médico nos solicita un examen que mide los niveles de TSH en sangre.

Una TSH baja es indicativa de una alteración que necesita ser estudiada más en profundidad. Muchas veces, este examen es el primero de varios que seguirán luego.

¿Qué es la TSH?

La TSH es también llamada hormona estimulante de tiroides, o técnicamente tirotropina. Es liberada por la hipófisis tras el estímulo que recibe del hipotálamo a través de otra hormona conocida como liberadora de tirotropina o TRH. 

Una vez que la TSH está en la sangre, contacta con las células de la glándula tiroidea para producir dos hormonas más:

  • T3 o triyodotironina: es mucho más activa que la T4 y es la que ejerce los efectos en los tejidos, es decir, regula el metabolismo de estos.
  • T4 o tiroxina: tiene una actividad mínima sobre los tejidos. Es más un reservorio de T3, ya que, cuando la T4 llega a los tejidos, se puede convertir en T3, que es la cual ejerce la acción final.

La T3 y la T4 irán a los tejidos a controlar el metabolismo de las proteínas, hidratos de carbono y las grasas. Además, en los bebés estas hormonas son muy importantes porque ayudan a un desarrollo normal del tejido cerebral del recién nacido.

La glándula tiroides es estimulada por la TSH, la cual depende, a su vez, de la TRH.

¿Por qué la TSH puede bajar en sangre?

La TSH baja en sangre puede deberse a una disfunción en el hipotálamo, la hipófisis o la tiroides. Las afecciones asociadas a esta glándula suelen ser la causa más común.

Según un estudio publicado en 2017, donde se incluyeron alrededor de 4554 personas de entre 18 a 93 años, la prevalencia de hipotiroidismo en la población española era del 9,1 %. Por otro lado, la prevalencia de hipertiroidismo era del 0,8 %.

Ambos trastornos, en conjunto, afectarían casi al 10 % de la población, y en todos estos pacientes sería posible encontrar un resultado anómalo de TSH. La hormona en cuestión se regula por 3 vías:

  • Cantidad de TRH que libera el hipotálamo.
  • La misma hipófisis, que es la encargada de almacenar y liberar la TSH cuando corresponde.
  • El feedback negativo de las hormonas tiroideas.

¿Qué es un feedback negativo?

Cuando se producen muchas hormonas tiroideas, estas aumentan su cantidad en la sangre. El hipotálamo y la hipófisis detectan esta subida y reducen su producción de TRH y TSH. Esto es lo que llamamos feedback negativo.

Es decir, las propias hormonas se autorregulan para poder tener unos niveles estables en sangre y no ser tan altas. Si ese mecanismo no sucediese, constantemente entraríamos en hipertiroidismo o hipotiroidismo.

Niveles de TSH en sangre

Los niveles normales de TSH en sangre son entre 0,4 y 4 mUI/L. Si se sobrepasan, o se tiene menos de estos valores, quiere decir que hay una disfunción en la tiroides. En general, en la primera mitad del embarazo la TSH disminuye en sangre, mientras que en los bebés recién nacidos esta hormona suele estar elevada.

El análisis de esta prueba debe ser realizado por profesionales de salud y especialistas en endocrinología.

Causas más frecuentes de TSH baja

En particular, una TSH baja quiere decir que hay tanta T3 y T4 en la sangre, que realizan un feedback negativo sobre la hipófisis, impidiendo la producción. Por lo general, en ese escenario tenemos un hipertiroidismo.

También hay TSH baja como resultado de un hipotiroidismo secundario. Esto sucede cuando hay una disfunción de la hipófisis, ya sea porque se ha destruido una parte de la misma o algo está impidiendo que funcione de manera adecuada, como un tumor cerebral.

Finalmente, puede ser un hipotiroidismo terciario el culpable. Es decir, que el hipotálamo no funciona y deja de producir TRH, por lo tanto, no envía señales a la hipófisis para que produzca TSH.

En el primer caso, cuando hay una sobreproducción de hormonas tiroideas periféricas, encontraremos en la sangre T3 y T4 muy elevadas, indicándonos un sobremetabolismo. El cuerpo empezará a quemar todas las grasas y azúcares para producir energía.

Por su parte, ante la disfunción hipotalámica e hipofisaria, las hormonas tiroideas también estarán disminuidas. En este sentido, el metabolismo del cuerpo será más lento, por lo que empezará a acumular grasa y aumentar de peso de forma paulatina.

Por otro lado, existen varios medicamentos que pueden alterar las pruebas de función tiroidea, independientemente de la enfermedad de base. Según estudios, algunos de los fármacos que pueden condicionar niveles bajos de TSH son los siguientes:

Tratamiento de los desajustes de la TSH

Hipertiroidismo

Los síntomas de hipertiroidismo son el nerviosismo, las palpitaciones, la hiperactividad y el aumento de la sudoración. También hay hipersensibilidad al calor, incremento del apetito y pérdida de peso.

Si crees que puedes tener hipertiroidismo, consulta a tu médico. El profesional te realizará determinaciones en sangre de TSH, T3 y T4. Si la TSH resulta baja y las hormonas tiroideas altas, se confirmará el diagnóstico de hipertiroidismo, según refieren estudios.

Las causas pueden abarcar desde un tumor en la tiroides hasta una enfermedad autoinmune, en la cual los anticuerpos estarán sobreexcitando las células tiroideas. Existen medicamentos que reducen y controlan los síntomas.

hipertiroidismo
El hipertiroidismo acelera los latidos cardíacos y el metabolismo en general, produciendo pérdida de peso

Hipotiroidismo

Los síntomas contrarios a los anteriores, como cansancio, aumento de peso, intolerancia al frío e hipotermia, son indicativos de hipotiroidismo. Puede ser que tengamos tumores en el cerebro destructores de la hipófisis o que la compriman impidiendo que libere TSH. También puede tratarse de una baja producción de T3 y T4 en la glándula misma.

La T4 libre baja, sumada a niveles bajos de TSH, revelan un problema más grave vinculado con la destrucción de la hipófisis, llamado hipotiroidismo central, según investigaciones. En cambio, si la TSH es normal o alta, la sospecha se orienta a la glándula tiroidea.

La TSH baja sugiere una alteración hormonal

Como puedes ver, la TSH baja puede asociarse al funcionamiento inadecuado de diferentes órganos. En este sentido, resulta de vital importancia realizar los exámenes pertinentes para identificar la estructura afectada e iniciar el tratamiento. Por lo que, si padeces alguno de los síntomas mencionados, no dudes en buscar asistencia médica lo antes posible.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.