Logo image
Logo image

10 dolores misteriosos que no debes ignorar

7 minutos
Estos dolores misteriosos pueden ser indicadores de complicaciones, por lo que debemos estar muy pendientes y no pasarlos por alto para que no evolucionen en algo más grave.
10 dolores misteriosos que no debes ignorar
Escrito por Equipo Editorial
Última actualización: 11 octubre, 2023

Todos nosotros hemos experimentado dolores misteriosos y persistentes en algún momento de nuestra vida. La mayoría de nosotros no les damos importancia pues terminan desapareciendo.

Sin embargo, existen 10 dolores misteriosos que no debes ignorar porque pueden estar llamando tu atención sobre algún problema mayor.  En este caso, te recomendamos que siempre acudas al médico para que te haga una revisión y compruebe que todo está bien.

Dolores misteriosos y aparentemente inexplicables

A pesar de que los dolores misteriosos suelen desaparecer tan rápido como habían llegado, normalmente, pueden presentarse con una mayor intensidad en próximas ocasiones. En general, esto puede ser señal de que hay un problema mucho más grande. Aunque nos dé pereza ir al médico, no debemos suponer que el dolor que sentimos en la rodilla, por ejemplo, es debido a un golpe.

Hoy vamos a descubrir 10 dolores misteriosos que nunca deberíamos pasar por alto.

1. Dolor en el hombro o mandíbula

El dolor de pecho no es el único indicio de que algo anda mal. La mandíbula dolorida también podría ser una señal de que el corazón se está estresando. Este dolor podría servir como advertencia de un ataque cardíaco inminente o una señal de que uno acaba de ocurrir.

Un ataque al corazón a menudo se manifiesta en lugares distintos del pecho: el hombro, el brazo, el abdomen, la mandíbula inferior o garganta.

Si experimentas un dolor súbito en el hombro o el área de la mandíbula deja de hacer lo que estás haciendo, alerta a alguien y busca atención médica.

2. Dolores misteriosos en la espalda baja

El dolor de espalda baja por mala higiene postural y sedentarismo es muy común, pero también puede ser señal de algo más que músculos doloridos.

En ocasiones, el dolor de espalda es un síntoma relacionado con problemas de riñón. Puede estar relacionado con la formación de un cálculo renal, que suele desaparecer (dolorosamente) por su propia cuenta.

Si se infecta el riñón, este se hincha y causa la molestia en la espalda baja. Si un tumor de riñón ha crecido lo suficiente, puede causar dolor en la espalda baja, también.

3. Dolor abdominal intenso

En ocasiones, no hay una causa clara para el dolor abdominal. Problemas con los órganos cercanos, como los riñones, los pulmones o el útero podrían derivar en molestias abdominales.

  • El dolor en el abdomen inferior derecho puede significar que el apéndice está inflamado y eso significa que necesitas ir al médico de inmediato, porque te encuentras en riesgo de sufrir una peritonitis.
  • El dolor en el abdomen superior derecho puede ser señal de un problema con la vesícula biliar. En cuanto al dolor abdominal superior (junto con el dolor de espalda superior) puede ser un signo de pancreatitis, una inflamación del páncreas.
  • También podría apuntar a una obstrucción intestinal. Si no se trata inmediatamente, esto puede resultar en la muerte del tejido intestinal y otros problemas.
  • Por último, una inflamación del hígado debido a la hepatitis podría causar dolor insoportable en el intestino.

4. Dolor de pantorrillas

Some figure

La pierna tiene una red de arterias y venas que mueven la sangre desde y hacia el músculo y el corazón. Las venas que se pueden ver debajo de la piel se denominan venas superficiales y mueven la sangre hacia las venas profundas.

Las pequeñas válvulas dentro de las venas impiden que la sangre fluya por el camino equivocado. Sin embargo, se pueden formar coágulos debido a una ruptura en la vena.

Esto puede derivar en una trombosis venosa profunda (TVP) que puede producir dolor de pantorrillas e hinchazón de piernas.

5. Hormigueo en brazos y piernas

Si alguna vez has dejado las piernas cruzadas durante mucho tiempo, probablemente hayas experimentado una sensación de cosquilleo casi doloroso en las piernas y los pies causado por la disminución de la circulación sanguínea. Afortunadamente, el hormigueo desaparece una vez te pones en pie y te mueves.

Sin embargo, si notas los pies o las manos así sin motivo alguno esto podría ser signo de daño en los nervios. Los síntomas como hormigueo, entumecimiento y una sensación de ardor apuntan a la neuropatía periférica.

6. Dolor general en el cuerpo

Si sientes dolor en cierta parte del cuerpo es señal de que algo en esa área necesita atención. Puedes tener fibromialgia, una enfermedad misteriosa que se traduce en dolores y molestia. Esta suele afectar más a mujeres que a hombres.

La fibromialgia parece dar lugar a un aumento de la sensibilidad a la presión física o al dolor y, con frecuencia, implica dificultades para dormir.

Some figure

Es increíble, pero la depresión también puede causar dolores al azar y de otra manera inexplicables en varias partes del cuerpo. Esto puede manifestarse en forma de dolor de espalda, dolores de cabeza y aumento de la sensibilidad al dolor.

Lee: Relación entre el dolor de espalda crónico y la depresión

7. Dolores misteriosos en los testículos

Nunca se debe ignorar el dolor testicular, ya que a menudo indica una condición que podría empeorarse si se ignora durante demasiado tiempo. Cualquier cosa, hasta una hernia de cáncer, puede causar dolor testicular.

La inflamación del epidídimo, un tubo en espiral situado en la parte posterior de cada testículo que sirve como un sistema de almacenamiento y la entrega de los espermatozoides, también puede causar dolor testicular.

Además, si la molestia en el testículo acompaña una sensación extraña, es probable que tengas varices, conocidas como varicoceles.

8. Dolores de cabeza fuertes

Mientras que los dolores de cabeza a menudo parecen salir de la nada, algunos de ellos descienden increíblemente rápido, golpeando como un trueno. Este octavo de los dolores misteriosos y repentinos podría ser una señal de algo mucho más serio que un simple dolor de cabeza.

Si provoca un dolor casi cegador, podría ser un signo de accidente cerebrovascular o un ataque isquémico transitorio, entre otros.

9. Dolores pélvicos durante el acto sexual

Uno de los síntomas comunes de la enfermedad inflamatoria pélvica es el dolor o molestia en la región pélvica durante el acto sexual.

Se trata de una infección bacteriana del útero o las trompas de Falopio que se traduce en el tejido de color rojo, hinchado y doloroso. La inflamación puede causar cicatrización, lo cual puede llevar a problemas como la infertilidad.

La enfermedad inflamatoria pélvica también puede resultar en la formación de abscesos o dolor pélvico crónico. Por eso, lo mejor es que ante la más mínima sospecha acudas al ginecólogo.

Enfermedades de transmisión sexual, como la clamidia o la gonorrea, o cualquier fuente de bacterias que se desplaza hasta los órganos reproductivos son los sospechosos habituales de la enfermedad inflamatoria pélvica. Si no se controla, la infección puede propagarse a la sangre u otros tejidos del cuerpo.

Some figure

10. Dolor persistente de las articulaciones

El dolor persistente en las articulaciones puede indicar osteoartritis, el desgaste general relacionado con la edad y el desgaste de cartílago que causa que los huesos se rocen entre sí. No obstante, pueden existir más causas. La rigidez y la hinchazón de las articulaciones pueden ser causadas por el lupus.

La hepatitis, una enfermedad que afecta el hígado, también comporta dolor en las articulaciones como un síntoma. Por otra parte, podría ser artritis, pero una forma más grave de la misma: la artritis reumatoide. 

Ahora que ya sabes en qué dolores misteriosos debes fijarte para evitar problemas mayores, esperamos que ante cualquiera de ellos acudas a tu médico de cabecera. Él te indicará qué es lo que te ocurre en realidad y la mejor manera de solucionarlo.

Todas las enfermedades aquí mencionadas cuentan con un tratamiento médico para su curación o para aliviar los síntomas, así que no entres en pánico. Tampoco te automediques. Además, procura no sacar conclusiones antes de haber hablado con el médico, ya que el dolor es un síntoma bastante general, común a muchas dolencias, más o menos graves.

En este artículo queremos informarte de las posibles consecuencias para que estés alerta y no ignores las molestias que puedas sentir (especialmente si estas son constantes y muy dolorosas). Siempre es mejor acudir al médico para descartar cualquier problema.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.