25 posturas sexuales que deberías probar
Escrito y verificado por la filósofa Isbelia Esther Farías López
Sin variedad, el sexo está condenado a ser aburrido y monótono. Por fortuna, existen cientos de posturas sexuales disponibles para volver a poner a flote la llama de la pasión. Muchas de ellas provienen del Kamasutra, otras son adaptaciones ingeniosas que permiten elevar el placer hasta las nubes.
Cuando se tratan de posiciones sexuales, no hay nada escrito. Las hay para todos los gustos y condiciones, de manera que la clave está en probar y probar. Hoy nos hemos dado la tarea de recopilar una extensa guía de las mejores posturas sexuales que deberías probar. Encontrarás algunas clásicas, como el misionero; y otras un poco más atrevidas, como el arco. ¡Toma nota!
25 posturas sexuales para disfrutar en pareja
Primero que nada, las posturas sexuales que encontrarás en breve te servirán tanto para el sexo vaginal como para el sexo anal. El catálogo es bastante amplio, de tal manera que reúne posiciones sexuales para penes grandes, para penes pequeños, con juguetes sexuales, sin ellos, para hombres y para mujeres.
A propósito de esto último, recuerda que la mejor posición sexual es aquella que resulta placentera para los dos. Habla con tu pareja sobre qué le gusta y qué no, así encontrarán puntos en común que permitan conocerse mejor y disfrutar de su sexualidad. Sin mayor preámbulo, empecemos.
Posturas sexuales clásicas y populares
Sí, te hemos prometido que hoy encontrarás la respuesta a la monotonía en el sexo. Aun así, es imposible pensar en él sin incluir las posiciones clásicas que lo caracterizan. Si estás cansado de ellas, adelanta el cursor hasta el siguiente apartado. Pese a ello, te aconsejamos leer una a una; ya que integran variaciones, trucos y consejos que no puedes dejar de aprovechar.
1. El misionero
El misionero es la postura más famosa del Kamasutra. Tiene muchas ventajas, entre ellas un contacto visual directo, un roce constante de la piel, una mayor estimulación del clítoris y un menor esfuerzo físico.
Entre sus desventajas destacan el poco margen de acción que tiene quien recibe la penetración y, en el caso de los hombres, una mayor probabilidad de tener una eyaculación temprana.
Dado que se trata de una postura sexual que ya conoces, nos limitamos a darte algunos consejos para aprovechar todas sus bondades:
- Evita la penetración en línea recta. Los movimientos oscilantes, de balanceo o de arriba a abajo son más placenteros para ambos. Si la mujer es quien recibe la acción, este simple cambio permitirá la estimulación directa del clítoris.
- Estimula otras zonas erógenas. La ventaja de esta posición es que permite libre acceso a la pareja. Los pezones, el cuello, las piernas, los glúteos (de quien está arriba), los labios y demás están disponibles para su estimulación. El partner pairing o el paring son una excelente opción; o lo que es lo mismo el estímulo con las manos del clítoris junto con la penetración.
- Reduce la velocidad. Sin que esto implique convertir el encuentro en una maratón, a veces es mejor poner freno y disfrutar del momento. De nuevo, el misionero es una de las posiciones más románticas debido al contacto visual y el que se produce piel con piel.
- Sitúa una almohada debajo. Esto permitirá variar un poco el ángulo de penetración, lo que se traduce en nuevas zonas estimuladas. También permite una penetración más profunda, en caso de que se desee, y un mayor acceso al clítoris según el caso.
- Incorpora un juguete sexual en la ecuación. Quien recibe la acción tiene disponible las manos para sumar un juguete sexual al encuentro. No temas usarlos, un consejo válido para la mayoría de las poses de nuestra lista.
2. El perrito
El popular doggy style es un clásico entre los clásicos. No lo es sin razón, ya que en la práctica es una de las posturas más cómodas, estimulantes y excitantes para los dos. Contrario a la opción anterior, es menos íntima o romántica; ello debido a que no hay contacto visual y la fricción cuerpo a cuerpo es limitada.
Lo anterior se compensa por otras vías. Por ejemplo, permite penetraciones profundas y no requiere de un gran esfuerzo o condición física para hacerla. De hecho, es una de las posturas sexuales ideales si se tiene dolor de espalda. Te dejamos con algunos consejos al respecto:
- Muchas parejas disfrutan hacer esta posición con un espejo cerca. Este permite visualizar el rostro y el cuerpo de quien realiza la acción. Si así lo deseas, puedes incluir uno cerca la próxima vez que la hagas.
- Si la profundidad de la penetración es un inconveniente para el clímax, conversa con tu pareja al respecto. En el mercado actual existen dispositivos para graduarla, los llamados anillos de amortiguación de penetración o penetration buffer.
- Dado que es una posición que limita la estimulación del clítoris durante la penetración, considera sumar un juguete sexual. Un vibrador es la mejor elección, y este lo puede usar la persona que recibe la acción.
- Graduar la abertura de las piernas permite variar la fricción que se genera con la penetración. Si las cierras, se «sentirá» más apretado; si las abres, obtienes el efecto contrario. Juega con ello en función de la comodidad de ambos.
3. La vaquera
El nombre de esta postura sexual transmite exactamente lo que experimentas durante el acto: libertad y cierto toque de salvajismo.
Esta es al menos la popularidad que tiene, aunque si se hace lenta también es una opción muy romántica. Después de todo, ambos tienen los manos libres para acariciar el cuerpo del otro y el rostro está a la altura de un contacto visual directo. Con un leve ajuste, se pueden dar besos apasionados.
En contraste con las anteriores, quien recibe la penetración tiene la voluntad de controlar a placer el nivel de profundidad y la intensidad de los movimientos. He aquí algunas recomendaciones para mejorar su ejecución:
- Juega con los ángulos. Aunque en principio todo parecería indicar que solo tienes arriba y abajo, en realidad puedes jugar con los 180° a tu favor. Hacerlo te permitirá explorar diferentes zonas que intensifican el placer y las sensaciones.
- Utiliza almohadas para las rodillas. La fricción con el colchón (u otra superficie) puede hacer que las rodillas duelan un poco, así que no está de más acondicionar el lugar para una mayor comodidad.
- Usa tus manos para una mayor estimación. Ambos tienen disponibles las manos en esta postura sexual, también un acceso total al cuerpo del otro. Si así lo desean, también pueden sumar juguetes sexuales.
- Busca la manera de apoyar tus brazos. De más está decir que para quien está arriba supone un esfuerzo adicional en toda la zona del core. Una buena idea es buscar un anclaje o apoyo para las manos, como pueden ser sillas, el respaldo de la cama y demás.
Posturas sexuales para el sexo anal
Continuamos con nuestra selección con algunas posiciones sexuales para el sexo anal. La práctica desde hace años dejó de ser tabú, y es una excelente alternativa para probar cosas nuevas en la cama. Todo ello, por supuesto, siempre que haya consentimiento de las dos partes.
4. Lap dance
Se trata de una posición recomendada si es la primera vez que practicas sexo anal. Lo es por dos motivos: es fácil de hacer y los cuerpos están juntos para aumentar el grado de intimidad. Pese a lo anterior, no hay un contacto directo cara a cara, pues quien recibe la acción está de espaldas.
Lo anterior puede sonar paradójico, pero es un secreto a voces que los nervios y la ansiedad pueden hacer que se prefiera esto a un contacto más directo. De nuevo, esta es la razón por la cual se recomienda; aunque ya alertamos que el sexo anal no debe ser un tabú. Toma nota sobre cómo hacerla:
- Quien realiza la penetración se debe sentar en el borde de la cama.
- Luego, su pareja se sienta de espaldas a él.
La premisa para practicar sexo anal es ir lento, utilizar lubricante, cuidar la higiene y por supuesto el consentimiento de ambas partes. Si todo esto se tiene en cuenta, se trata de un acto muy placentero para los dos.
5. Lying doggy
El perrito mentiroso o lying Doggy es perfecto para el sexo anal, ya que solo permite una penetración superficial. Es ideal para la primera vez, aunque leves ajustes en el ángulo pueden aumentar la profundidad si es lo que se desea.
- Quien será penetrado se acuesta boca abajo sobre la cama.
- Puede cerrar o abrir las piernas en función de su comodidad. Situar una almohada debajo puede ser de gran ayuda para aumentar esto último.
- Su pareja, entonces, se acuesta sobre ella y realiza la penetración.
- Para conseguir estabilidad, debe apoyar sus brazos estirados sobre la cama.
Hay una variante de esta postura en la que quien penetra no se acuesta en paralelo, sino que solo acerca su pelvis y realiza la penetración. En este caso, esta última es muchos menos profunda; de modo que puede ser la ideal para penes grandes.
6. De cuchara
Durante décadas esta fue la posición sexual para los perezosos en la cultura popular, ello debido a que el grado de tensión, movimiento e incomodidad son mínimos. Al margen de esta curiosidad, es excelente para el sexo anal en vista de que permite controlar bastante bien el nivel de profundidad de las penetraciones.
- Ambos se acuestan de lado, de espalda, con la mirada fija en la misma dirección.
- Quien recibe la acción arquea un poco las rodillas, esto con la intención de permitir el acceso a la penetración. En función de qué tanto se haga, la profundidad será mayor o menor.
- Luego, la pareja se acerca por detrás y consuma la acción.
La cuchara permite a ambos tener las manos libres, de manera que se puede jugar con el clítoris, los pechos o el pene de la pareja.
Posturas sexuales para penes grandes
En la práctica, los penes grandes pueden generar más dolor que placer. Por esta razón, lo ideal es optar por ciertas posiciones que limitan, regulan o derivan una mayor libertad a la pareja para controlar la profundidad de la penetración. Te dejamos con tres de las mejores para ello.
7. Vaquera invertida
Por el efecto «gatillo» que se produce en la articulación de la rodilla, la vaquera invertida es perfecta para que quien reciba la acción ajuste la intensidad y el nivel de penetración. No hay un contacto directo durante el acto, aunque quien está acostado puede tener una vista de la silueta y los glúteos de su pareja.
- Para hacerla, solo hay que seguir los pasos de la vaquera convencional; solo que esta vez se invierte la posición de quien está arriba. Es decir, no se mira hacia adelante, sino que se le da la espalda a la pareja.
Como en otras posturas sexuales para penes grandes, el lubricante siempre es bienvenido. Debe haber comunicación con la pareja, en ello está la garantía del placer mutuo.
8. El launchpad
Quizá es la postura que permite un mayor control por parte de quien recibe la penetración, aunque en todo caso esta se puede ajustar con solo comunicarlo a la pareja. Se trata de una variante del misionero, una en la que se usan las piernas como «gatillo» para controlar la intensidad y los movimientos.
- Se imitan los pasos del misionero, solo que esta vez quien recibe la acción eleva sus rodillas hasta el pecho. Así, cuando su pareja haga la penetración, las estirará hasta situarlas sobre su abdomen.
- Este simple acto permite controlar el grado de penetración de la pareja. Si se está cómodo, se retraen los pies hasta el pecho; si no, se hace una leve presión como advertencia o para limitar el empuje.
9. La araña o el cangrejo
La araña es otra de las posturas sexis con las que se puede disfrutar en pareja. Es cierto que puede ser un reto para la flexibilidad y la condición física, pero es adecuada para penes grandes porque controla el nivel de profundidad. Toma nota sobre cómo hacerla:
- Para practicarla, ambos se acuestan sobre una superficie (la cama, el suelo, etcétera).
- Uno debe quedar frente al otro. Luego, deberán apoyarse sobre sus brazos estirados hacia atrás para elevar un poco sus cuerpos y, así, lograr que los genitales se unan.
- Quien es penetrado apoya los pies a los costados de la cadera de su compañero para mantener el equilibrio mientras este lo penetra.
- Estando ahí, será capaz de moverse de atrás hacia adelante para mayor goce.
- Si así se desea, ambos pueden usar una de sus manos para estimular a su pareja o para acercar el rostro de esta.
En esta postura, cualquiera de los dos puede guiar el ritmo de penetración; tomando turnos si así lo desean.
Posturas sexuales para penes pequeños
La otra cara de la moneda con respecto a la anterior sección son las posturas sexuales para penes pequeños. En este caso, lo que se busca es maximizar la penetración. Hay muchas que lo favorecen, de manera que no se compromete en absoluto el placer durante el acto.
10. El acróbata
Al margen de su peculiar nombre, se trata de una pose sexual ideal para penes chicos. La penetración en este caso es total, y el contacto directo rostro con rostro permite besos apasionados de principio a fin.
- Quien realiza la penetración se sienta en la cama con los pies estirados, aunque arqueados un poco en la articulación de la rodilla.
- Su pareja, entonces, se sienta sobre este con las piernas elevadas hasta sus hombros.
- Para conseguir apoyo hay dos opciones: o se llevan los brazos hacia atrás, o se sujeta del cuello de la pareja mientras este rodea su espalda con los brazos. Cuando se elige esta última, la pose facilita besos intensos en mitad del sexo.
11. Vaquera de lado
A diferencia de las versiones anteriores, en esta no se dejan cabos sueltos cuando se trata de penetración. Aunque es verdad que quien está arriba puede controlarla, por comodidad y gravedad se tenderá a estar sentado por completo sobre la pareja.
- Se inicia con una vaquera convencional y, poco a poco, se gira hasta lograr un ángulo de 180° con respecto a la pareja.
- Ambos pueden hacer la penetración, e incluso lo ideal es que se turnen para experimentar sensaciones diferentes.
12. La tijera
Bien el cierto que el grado de penetración no es completo al hacer la tijera, pero el ángulo y la dirección en el cual se ejecuta maximizan las sensaciones en quien la recibe. Por tanto, no puede faltar en el catálogo de posturas sexuales para penes pequeños.
- Ambos se acuestan sobre la cama y abren sus piernas para acercarse poco a poco.
- Deben ser muy cuidados al realizar la penetración, ya que movimientos bruscos pueden generar lesiones o incomodidad.
Aunque a menudo se asocia como una postura sexual para lesbianas, en realidad cualquiera puede disfrutar de ella. Esto incluye, por supuesto, a los hombres que tienen sexo con hombres.
Posturas sexuales excéntricas o difíciles
En mayor o menor medida, cualquiera puede hacer las posiciones sexuales que hemos reseñado hasta el momento. Hay una categoría especial restringida para aquellos que son más flexibles, tienen una gran condición física, fuerza o solo son intrépidos. No te pierdas las tres que te recomendamos.
13. El arco
Aunque recibe muchos nombres, para ser más prácticos hemos decidido etiquetarla solo como «el arco». Como puedes ver en la imagen, se trata de una pose que demanda una gran flexibilidad para quien realiza la penetración.
- Quien ejecuta la acción se acuesta con los brazos y las piernas recogidos cerca de su torso.
- Entonces, coloca las plantas de las manos sobre la superficie, igual la planta de los pies. Luego, con un movimiento de empuje, hace presión en los cuatro puntos (dos manos, dos pies) y se eleva hasta hacer un arco de gimnasia.
- En ese momento, y con cautela, su pareja se posa sobra él y completa la penetración.
De más está decir que esta no es pose sexual si tienes dolores de espalda. Para ello, más abajo tenemos una sección especial para ti.
14. El invertido
Otra posición no apta para personas que no son flexibles, aunque en esta oportunidad es quien recibe la acción aquel que realiza la mayor «acrobacia». Para ambos puede ser muy placentera, en parte por lo diferente que resulta en la cama.
- Sobre una superficie acolchada quien será penetrado se acuesta con su cabeza muy cerca del borde de la cama.
- Entonces, poco a poco, y con ayuda de su pareja, eleva sus piernas, su cadera y parte de su abdomen hacia atrás. Para ello, estirar las manos y usarlas como soporte puede ser de gran ayuda (ver imagen referencial).
- En su pareja quien se encarga de mantener de forma parcial esta pose sujetando sus glúteos. Hecho esto, se puede proceder con el acto.
15. Balance perfecto
No solo debes tener un balance y equilibrio perfecto para hacer esta pose, también una gran fuerza y flexibilidad. Una recomendación es que tengan un plan B en caso de que salga mal la primera vez, como por ejemplo situar una colchoneta de yoga o una almohada para tratar de amortiguar una caída.
- La persona que será penetrada se acuesta en el borde de una superficie a la altura de la cadera de su pareja.
- Poco a poco, y jugando con el equilibrio, va dejando este lugar de apoyo situando las manos en las piernas del compañero como pilares.
- Este, para que la pose sea viable, debe arquear su cuerpo hacia atrás. Con algo de práctica o intuición se logrará el punto exacto en el que el balance es perfecto.
Resulta pertinente mencionar que tanto en esta como en otras posiciones sexuales difíciles se deben cuidar los movimientos y la intensidad. Si algo sale, es muy fácil sufrir lesiones; como por ejemplo la fractura de pene.
Posiciones sexuales para cuidar la espalda
Por desgracia, los dolores de espalda pueden comprometer la práctica del sexo. En algunos casos, ciertas posturas son compatibles para no cerrarle la puerta a la sexualidad. También puedes acudir a ellas si deseas cuidar tu espalda de manera general, esto con independencia de que no padezcas de dolores, lumbago y demás.
16. Misionero con pierna cruzada
Cruzar la pierna al hacer el misionero puede liberar la tensión que se acumula en la espalda baja y en la zona de la cervical. De igual modo, al hacerlo varía la sensación de la penetración; ya que crea una mayor fricción al cerrar de manera parcial la vagina o el ano.
- Imita la pose del misionero, solo que justo antes de que tu pareja realice la penetración dobla una de tus piernas por sobre tu cuerpo. Para mantenerla así, coloca tu mano sobre ella.
17. Cuchara en posición invertida
En este caso se tiene una mayor libertad para hacer ajustes en el ángulo, la inclinación y la dirección de la espalda (y el cuerpo en general). Todo ello debido a que no se tiene la limitación del torso de la pareja justo detrás.
- Ambos se sitúan para hacer la pose de la cuchara convencional, solo que lo hacen de manera invertida. Esto es, con el rostro y los pies en extremos opuestos.
18. Cuchara con espalda arqueada
Otra variante de la cuchara que es amigable con la espalda de quien recibe la penetración. Aunque parezca un ajuste mínimo, muchos encuentran en esta pose un alivio a su dolor en la zona baja, media o alta de la columna.
- Se empieza con la postura de cuchara convencional y se arquea poco a poco la espalda hasta quedar con las rodillas cerca del pecho. Estirar los brazos puede proporcionar cierto alivio a la tensión.
Como es natural, no te garantizamos al 100 % que estas posturas sexuales para cuidar tu espalda resolverán todos tus problemas. Prueba con ellas y, en caso de que te sientas incómodo o desarrolles dolor, mejor desiste de hacerlas. Consulta con tu médico para consejos específicos según tu condición.
Posiciones sexuales románticas
En sexo no siempre tiene que ver con el romance, pero es indiscutible que este puede formar parte de él. Hemos aludido al respecto de forma sutil en algunas poses, pero ahora nos abocamos de manera específica a posturas de este tipo.
19. La ducha sensual
El sexo en la ducha es buena idea siempre y cuando se tenga el espacio suficiente. Aun así, el acto no se tiene que consumar dentro del cuarto de baño; puede iniciar el coqueteo allí y luego continuar fuera de él.
- Invita a tu pareja a que te acompañe a tomar una ducha. Luego, permite que te mire mientras te enjabonas despacio y de forma sensual de aquí a allá. El juego de «mirar y no tocar» les causará excitación a ambos.
- Después, enjabona su cuerpo parte por parte. Cuando crean que ya están «a punto», voltéate y apoya tu espalda sobre su pecho. Tu compañero sabrá qué hacer al instante.
20. La bailarina
Dado el nivel de sutileza, de contacto cuerpo a cuerpo y la cercanía de los rostros, la bailarina es una pose sexual romántica por excelencia. Bien en cierto que demanda flexibilidad, pero si esto no es un problema para ambos tienen luz verde para hacerla.
- De pie, los dos se sitúan cuerpo a cuerpo, a una distancia corta.
- Luego, poco a poco y con ayuda de la pareja, quien recibe la acción eleva su pierna en línea recta.
- No es necesario elevarla por completo, incluso se puede tener como apoyo una silla, un mueble y cualquier otro objeto.
21. El desvalido
De acuerdo, no es el nombre más romántico; pero la pose en sí misma es quizá la que reúne mayor romance de todo nuestro catálogo. Aunque sea una vez, todas las parejas deben probarla en la cama.
- Quien realiza la acción se acuesta sobre la cama, de preferencia con su espalda en el respaldo de esta como apoyo.
- Luego, coge a su pareja en brazos, como si de un desvalido se tratase, y realiza la penetración.
- Dada la disponibilidad rostro con rostro, es el momento perfecto para besos apasionados.
Mejores posturas para el sexo oral
La división «sexo con penetración» y «sexo oral» a menudo nos hace perder la vista de algo: en ambos casos, se tiene sexo. El sexo oral no es un mero complemento o plato de entrada; puede ser en sí mismo el eje central del encuentro. Para ello, no dejes de poner en práctica estas poses.
22. De pie
El sexo oral de pie incluye un toque de superioridad y sumisión al acto. Esto es, quien está arriba se arropa de un cierto halo de poder, el cual puede ser muy excitante para algunas parejas. Aunque este papel suele protagonizarlo el hombre, en realidad también lo puede asumir la mujer. He aquí algunos consejos para hacerlo:
- Para evitar el dolor y la fricción de las rodillas, es recomendable incluir una colchoneta de yoga o un cojín como soporte.
- Si ambos están de acuerdo, pueden jugar con lubricantes de sabores específicos para el sexo oral.
- Previo consentimiento, pueden hacer un juego de roles o teatralizar de manera parcial el acto.
23. El 69
Una lista de mejores posturas sexuales para el sexo oral está incompleta sin el 69. En este caso, te proponemos aquel que se realiza de manera invertida. En lugar de ser el hombre quien está abajo, este se situará arriba. Parece un cambio simple, pero de eso se trata la variedad en la cama. Te dejamos con un par de consejos al respecto:
- Tanto en esta como en otras posturas para el sexo oral, la higiene de ambos es muy importante. Esta recomendación aplica para el sexo en general.
- Si se tienen problemas para acceder a los genitales de la pareja que está abajo, se puede colocar un cojín o una almohada debajo de su cadera.
- Dada la libertad que se tiene, siempre es buena idea sumar juguetes sexuales a esta pose.
24. El trono
El trono es una pose en la que uno de los dos se sienta de manera parcial sobre el otro, lo que da cierto grado de poder o superioridad. Puede ser cualquiera de los dos, y el grueso de la acción también es libre de ejecutarla uno u otro.
25. La pirámide
Esta pose permite observar de cerca a la pareja mientras realiza la estimulación. Es compatible con cualquiera de los sexos, también si se desea hacer el famoso beso negro o anilingus. Requiere, eso sí, cierto grado de flexibilidad en una de las partes.
En el sexo, como en la guerra, todo se vale
Te hemos dado solo una muestra de algunas posturas sexuales que puedes incluir en tu rutina. Ninguna de ellas es estricta sobre cómo realizarla, de manera que tienes total libertad para hacer tus propios ajustes, variar los ángulos o la posición de tu cuerpo. También, por supuesto, tienes total libertad para sumar un tercero a la ecuación.
No hay nada escrito cuando se trata de explorar la sexualidad, esto al menos cuando todas las partes involucradas están de acuerdo. Antes de empezar, recuerda que los preliminares son tan importantes como la penetración o el propio sexo oral. De hecho, el sexo inicia en el momento en que estos comienzan; ya que el mejor plato de principal resulta soso si no hay un buen plato de entrada que ayude a abrir el apetito.
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