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8 señales de energías negativas que debes procurar limpiar

7 minutos
Causan malestar, agotamiento, sensación de estar estancados y muchas otras molestias físicas y emocionales. Te contamos cómo reconocer las energías negativas y qué hacer al respecto.
8 señales de energías negativas que debes procurar limpiar
Escrito por Equipo Editorial
Última actualización: 13 agosto, 2024

Una sensación de pesadez en el aire, incomodidad, cansancio inexplicable, irritabilidad… estas y otras señales pueden advertir de energías negativas. Ciertas veces provienen de otras personas, pero también están presentes en el ambiente y en la propia psique. Si bien no hay herramientas para detectarlas o medirlas, lo cierto es que su falta de control puede afectar el bienestar.

Hay quienes creen que su origen es la envidia, el miedo, el enojo y el resentimiento, propios o de los demás. Cuando se percibe en ciertos ambientes, algunos intentan explicarlo con el fenómeno del estrés geopático, emanado por la propia Tierra ante acontecimientos catastróficos. Otra hipótesis sugiere que surge a raíz de la sugestión, ya sea por creencias sobre determinadas personas o lugares.

Pero, sea cual sea su origen, son vibraciones que, al percibirse, afectan el estado de ánimo, el comportamiento, las relaciones y mucho más. De ahí la importancia de aprender a reconocerlas y de buscar alternativas para tratar de «limpiarlas» o «neutralizarlas. Analizamos 8 señales y varias estrategias para su manejo.

1. En tu hogar hay conflictos constantes

Una de las principales señales de malas energías en la casa son las constantes discusiones y situaciones de conflicto entre los miembros de la familia. Su origen pueden ser los problemas sin resolver, la mala comunicación, el desorden en los espacios y hasta la acumulación de suciedad.

Si no se interviene lo antes posible, los problemas dentro del hogar tienden a incrementar. Si es algo que se viene repitiendo, es momento de tomar cartas en el asunto. Algunas medidas que puedes poner en práctica para afrontarlo son las siguientes:

2. Tienes mal humor e irritabilidad

A nivel personal, las energías negativas tienden a manifestarse con mal humor e irritabilidad. A su vez, este malestar puede estar relacionado con conflictos no resueltos, circunstancias externas, mala calidad de sueño, exceso de estrés y otras situaciones que afectan el bienestar emocional.

Para cultivar la armonía y la tranquilidad, es primordial determinar qué está ocasionando estas emociones. Ciertas veces, hace falta tener conversaciones incómodas o tomar decisiones importantes. En otros casos, conviene hacer una pausa para descansar y desconectar. La práctica de técnicas de relajación, al igual que la psicoterapia, son recursos que también puedes considerar.

3. Vives instalado en la queja

De todas las señales de energías negativas, la queja suele ser una de las más ignoradas. Quienes tienden a quejarse de forma constante no solo limitan su propio disfrute, sino también de su entorno. Y es que, enfocarse siempre en lo negativo o en la carencia, deriva en excesiva amargura, infelicidad y desgaste mental.

La queja trae ruina, el agradecimiento, por el contrario, abundancia

¿Cómo salir de este estado? ¡La clave está en practicar la gratitud! Hay evidencias de que ser agradecidos incrementa la sensación de bienestar, aumenta la felicidad y disminuye el estado de queja. Eso sin contar con que también ayuda a gestionar la ansiedad, reduce el estrés y fortalece los vínculos con los demás.

Puedes practicar el agradecimiento a través de oraciones, escritos, ejercicios de meditación, diarios o durante conversaciones con los demás.

4. Sientes cansancio excesivo

La negatividad drena la energía y conduce a estados de cansancio excesivo. Es posible que sientas un estado de fatiga y somnolencia, inclusive tras cumplir con un horario óptimo de sueño (entre 7 y 9 horas diarias). Durante el día, tienes dificultades para enfrentar con entusiasmo tus tareas cotidianas.

Para resolverlo, primero debes determinar si hay una posible causa física del agotamiento. Si experimentas otros síntomas, consulta al médico. Ahora bien, si el síntoma es recurrente, pese a tener buena xsalud y descanso, determina si has estado teniendo pensamientos intrusivos o si algo externo te genera negatividad.

Reconocer el detonante es la clave para empezar a tomar acción. En estos casos, herramientas como la meditación y el mindfulness, son un buen recurso. También procura desconectar, pasar tiempo a solas y alimentarte bien.

5. Tienes dificultades para socializar

Cuando en el clima se perciben energías negativas, socializar puede ser lo último que desees hacer. Quizá te sientes incómodo por el ambiente, o bien, por la presencia de ciertas personas. Te cuesta comunicarte, no sientes confianza, estás irritable o experimentas una sensación de pesadez al estar rodeado de otros.

Quizá estás en un estado de estrés o saturación mental y te cuesta gestionar las críticas o lo que las otras personas desean comunicarte. De repente, las conversaciones te agotan, empiezas a tomarte todo personal, y hablar con los demás es un detonante de ansiedad.

Si es así, lo mejor es tomar distancia, hacer una pausa y estar a solas. Procura identificar qué es lo que causa ese malestar. Escucha a tu yo interno y, si tienes un conflicto por resolver con alguien, haz lo posible para solucionarlo.

6. Sientes dolores de cabeza

Los dolores de cabeza recurrentes suelen ser indicio de un problema de salud; por ello, antes que nada, procura establecer si se presentan de forma simultánea con otros síntomas. De ser así, consulta al médico.

¿No hay una causa aparente? Has de saber que también es una de las señales de energías negativas. No se trata de un ‘maleficio’ o algo por el estilo; lo que ocurre es que los estados de negatividad afectan el estado de ánimo, el nivel de energía y el sueño, lo que puede derivar en este síntoma.

De ser tu caso, procura intervenir a través de la meditación, la práctica de deportes, la buena alimentación y técnicas de relajación.

7. Sientes problemas de productividad y creatividad

De repente, empiezas a tener dificultades para generar ideas, estructurar tus proyectos o completar tus tareas. No puedes concentrarte, no conectas con tu creatividad y te sientes improductivo. Ocurre que, a menudo, estar expuestos a las energías negativas provoca niebla mental y bajo rendimiento.

¿Qué hacer al respecto? Lo primero será limpiar a fondo tu entorno de trabajo. El desorden y la suciedad influyen en la sensación de malas energías. Por otro lado, asegúrate de tomar una pausa para relajar. Evita aquello en lo que no puedes concentrarte y realiza una actividad que te resulte gratificante.

8. Problemas de salud

La literatura popular sugiere que las energías negativas que se originan en la psique tienen relación con la aparición de ciertas enfermedades. Sobre esto, explica WebMD, influye el estrés, que aumenta el cortisol en el cuerpo y compromete las funciones del sistema inmunitario. También tiene que ver la ira mal expresada, que se vincula a disfunciones cardíacas y del sistema digestivo.

¿Qué puedes hacer para limpiar las energías negativas?

Luego de reconocer las señales de energías negativas, es probable que te preguntes cómo limpiarlas o removerlas. Más allá de las recomendaciones que hemos detallado en cada apartado, puedes poner en práctica lo siguiente:

  • Tiempo de autorreflexión: explora tus emociones, pensamientos y experiencias para identificar cuáles son esos patrones o detonantes de la negatividad.
  • Ejercicios de visualización: al sentirte en un entorno negativo o tener la sensación de estar sumergido en energías negativas, haz un sencillo ejercicio: imagínate en un lugar tranquilo, rodeado de energías protectoras.
  • Métodos de limpieza energética: si crees que te puedes sentir mejor con este tipo de técnicas, opta por elegir alguna; puede ser un baño de sal, una curación con mantras, vapores con hierbas, baños con ruda, etcétera.
  • Afirmaciones positivas: recita en voz alta o escribe afirmaciones positivas que contrarresten la negatividad de tus pensamientos.
  • Entornos positivos: de ser posible, procura acudir a entornos en los que puedas disfrutar actividades positivas. Grupos de meditación y yoga, gimnasios, grupos de literatura, clases de baile, entre otros.

¡Para recordar!

Cuando hay energías negativas internas o en el entorno, es posible percibir un clima pesado, conflictivo y agotador. Si no hay una intervención oportuna, esto compromete el bienestar físico y mental, al igual que las relaciones familiares, personales o laborales.

Por eso, una vez se reconozcan las señales, es conveniente implementar estrategias que ayuden a contrarrestarlo. A veces puede ser una simple conversación, pero también puede involucrar la limpieza del hogar, la práctica de meditación, la autorreflexión, el agradecimiento, las técnicas de relajación y hasta psicoterapia.


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