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14 maneras eficientes de destapar tu nariz rápidamente

14 minutos
Realizar masajes en los senos paranasales, hacer irrigaciones salinas y aplicar compresas tibias pueden ayudar a descongestionar la nariz. Analizamos estos y otros métodos efectivos que puedes hacer desde casa.
14 maneras eficientes de destapar tu nariz rápidamente
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto

Escrito por Equipo Editorial
Última actualización: 22 agosto, 2024

Hacer inhalaciones de vapor en una taza, utilizar tiras nasales y preparar una infusión de jengibre pueden aliviar la obstrucción o congestión nasal, que se produce por la inflamación de los tejidos que recubren el interior de las fosas nasales. Este fenómeno lleva a la percepción de una disminución en el flujo de aire nasal o la sensación de plenitud facial, con síntomas como secreción, picazón en la nariz, sensación de moco en la garganta y estornudos.

A continuación, te compartimos varios métodos, trucos y terapias caseras para combatir la sensación de taponamiento, que puedes hacer en el hogar, y te enseñamos cómo sacarles el mayor provecho. Son fáciles de implementar, no requieren de una gran inversión y, siempre y cuando sigas las indicaciones, resultan seguros.

1. Hazte un masaje entre las cejas

De acuerdo con la medicina tradicional, un masaje suave en el entrecejo ayudaría a destapar la nariz en caso de tener congestión nasal. Al respecto, se ha sugerido que el masaje facial tendría efectos beneficiosos para el alivio de la congestión y la sensibilidad facial en episodios de sinusitis crónica.

  • Te recomendamos pasarte los dedos mientras realizas movimientos suaves y circulares en esta zona durante un minuto.
Con este sencillo gesto, podrías reducir el malestar en las fosas nasales y la tensión. Además, este método tendría un efecto preventivo para reducir la presión en la zona frontal.

2. Masajéate las aletas de la nariz

Una vez realizado el masaje anterior, puedes proceder con otro en las aletas de la nariz para obtener mayor alivio. En este sentido, debes seguir los siguientes pasos:

  • Ejerce un poco de presión con el dedo índice sobre la fosa nasal afectada.
  • Realiza movimientos circulares en las alas de la nariz durante 1 o 2 minutos.

Este procedimiento te ayudaría a abrir los canales nasales. Es posible combinar este método con otros que te mencionaremos más adelante para obtener mejores resultados.

Recuerda hacer el procedimiento con suavidad y con atención a la presión y la fuerza utilizada.

3. Realiza un masaje entre el labio y la nariz

Masajear el punto ubicado entre el labio y la nariz es otra de las maneras útiles de descongestionar las fosas nasales. Para ello, realiza lo siguiente:

  • Aplica una ligera presión con los dedos índice y medio en el punto mencionado.
  • Realiza movimientos circulares por un par de minutos.

En conjunto con las dos opciones anteriores, esta técnica es un tipo de masaje sinusal para aliviar la presión y promover el drenaje.

4. Prueba con los lavados nasales y las irrigaciones salinas

Los lavados o irrigaciones nasales forman parte de las herramientas médicas para el alivio de los síntomas de la rinitis y la sinusitis. La irrigación nasal con solución salina puede mejorar la función de la mucosa nasal a través de la eliminación mecánica de la mucosidad y mediadores inflamatorios, así como la mejora de la actividad ciliar (función de autolimpieza de la mucosa nasal que realizan los cilios).

En general, los lavados se utilizan para disminuir los síntomas de congestión en niños. No obstante, también son de gran utilidad en los adultos. Este procedimiento debe realizarlo un profesional o llevarse a cabo bajo supervisión del mismo. Por su parte, puedes hacer irrigaciones nasales en casa con ayuda de una olla neti o una copa nasal.

  • Si usarás un dispositivo que adquiriste con solución salina en polvo, sigue las instrucciones del fabricante.
  • Caso contrario, haz tu solución salina casera al mezclar una o taza agua hervida destilada con 1/2 cucharadita de sal no yodada.
  • Luego, inclínate sobre el fregadero, gira la cabeza, sitúa el extremo del dispositivo en la fosa nasal superior y aprieta con suavidad para que el agua fluya a través de esta hacia la fosa nasal inferior.
  • Durante el proceso, respira por boca y, luego de unos segundos, procede a repetir la acción por la otra fosa nasal (gira tu cabeza en sentido contrario).
  • Al finalizar, suénate la nariz con suavidad para retirar restos de agua.
En exceso, la irrigación nasal puede generar irritación de las fosas nasales. Si el agua no está hervida o destilada, también puede producir infecciones.

5. Aplica una compresa tibia

Una manera popular para destapar la nariz es mediante el calor. Para ello, puedes valerte de compresas que ayuden a aliviar la presión de los senos paranasales.

  • Este método consiste en tomar una servilleta de tela o una toalla, humedecerla con agua caliente y exprimirla con cuidado.
  • Luego, debes utilizarla a modo de compresa sobre la nariz y la frente y dejar actuar por unos 5 a 10 minutos.
  • Otra forma es humedecer la tela en agua y luego calentarla en el microondas.
Ten mucho cuidado con la temperatura del paño, la servilleta o la toalla. Si está muy caliente, podrías sufrir quemaduras en la piel.

6. Utiliza un humidificador de ambiente

Mientras más frío y seco esté el ambiente, mayor será la congestión nasal. En general, los síntomas de la rinitis alérgica tienen mayor prevalencia en ambientes fríos.

De igual forma, si la humedad que hay en el aire es muy baja, la mucosa de la nariz se resecará más. Esto puede promover la irritación de las vías respiratorias, piel seca, picor y enrojecimiento de los ojos y goteo nasal, entre otras molestias.

Por tal motivo, es recomendable utilizar un humidificador de ambiente en el hogar o el trabajo. Este es un aparato fácil de usar, que puede ubicarse en cualquier rincón. El vapor ayudará a mantener las mucosas húmedas y, así, facilitar su descongestión.

  • Emplea modelos de vapor frío.
  • Usa agua destilada en lugar de agua del grifo.
  • Sitúa el humidificador a 2 metros de distancia.
  • Ajusta la configuración entre un 30 y un 50 % de humedad.
  • No utilices el dispositivo durante mucho tiempo. En promedio, hazlo funcionar durante no más de seis horas continuas.
Los humidificadores deben drenarse y limpiarse todos los días, ya que las bacterias pueden crecer en el agua que se estanca y los filtros.

7. Aprovecha el vapor de la ducha

El vapor de la ducha también puede ser efectivo. Una vez más, la humedad te ayudará a humidificar las vías respiratorias y fluidificar el moco. Así facilitarás su expulsión:

  • Puedes tomar una ducha larga para aprovechar sus vapores.
  • Otra opción es ajustar la temperatura caliente, encerrarte en el baño e inhalar durante unos cinco minutos el vapor a una distancia prudencial.
Ten mucho cuidado con la temperatura del agua para evitar quemaduras. De igual modo, evita extender la inhalación del vapor durante más de 5 minutos.

8. Haz inhalaciones de vapor en una taza

Esta terapia opera bajo el mismo principio anterior, solo que esta vez la harás fuera del baño. El método podría aflojar la mucosidad de los senos paranasales, ayudar con la congestión, aliviar el dolor de garganta y mejorar la ronquera:

  • Hierve agua y añádela en un tazón grande.
  • Sitúalo en una superficie estable, como en una mesa.
  • Con ayuda de una toalla por sobre la cabeza para crear un espacio cerrado, y a unos 30 centímetros de distancia, procede a inhalar los vapores con los ojos cerrados.
Espera que el agua se aclimate un poco para evitar quemaduras en la piel durante la terapia.

9. Prueba con vaporizaciones de menta

Si bien el vapor por sí solo es capaz de destapar la nariz de forma rápida, la menta podría potenciar su efecto. De hecho, se ha sugerido que su aceite natural aliviaría los síntomas de la rinitis, incluida la inflamación y la congestión nasal:

  • Hierve agua y añade dos cucharadas de menta (30 gramos).
  • Procede a seguir los pasos convencionales de la terapia de vapor indicada anteriormente.
Si notas efectos adversos tras aspirar los vapores, suspende su uso y quédate solo con la solución de agua. No olvides situarte a una distancia prudencial para evitar quemaduras.

10. Usa productos mentolados

Como lo es, por ejemplo, Vicks VapoRub. Aunque el fabricante lo comercializa para el alivio temporal de la tos asociada con el resfriado común, también puede ofrecer beneficios en relación con los síntomas asociados.

En este sentido, sus vapores pueden contribuir a despejar las vías respiratorias y suministrar mejoras frente a la congestión nasal.

  • La forma correcta de utilizar este producto es esparcir una capa por el pecho o la garganta.
  • Si así lo deseas, puedes cubrir el área con un pañito tibio y seco.
El producto no se puede usar en niños menores de 2 años. Tampoco se debe calentar o diluir en agua antes de su aplicación. En principio, no lo debes usar más de tres veces al día.

11. Utiliza tiras nasales

Las tiras nasales son pequeñas bandas adhesivas que se emplean para aliviar los ronquidos y la congestión nasal. Su mecanismo se basa en mantener abiertas las fosas nasales para que exista una adecuada circulación del aire inspirado.

  • En general, se utilizan en adultos y niños mayores de 5 años durante periodos cortos o al dormir. Sin embargo, debe evitarse su uso por más de 12 horas.

En un ensayo aleatorizado realizado en 2018 se concluyó que las tiras dilatadoras nasales mejoran de forma considerable la congestión nasal, la calidad del sueño y los problemas para dormir. En este sentido, son una herramienta práctica para facilitar la respiración.

12. Toma un poco de miel

Se ha sugerido que la miel podría contribuir con el alivio de los síntomas del resfriado común, como la tos y la congestión nasal. De igual modo, existe cierta evidencia de que la ingestión de miel podría mejorar los síntomas de la rinitis alérgica.

  • Se recomienda tomar una cucharada de miel, sola o con limón, por las mañanas.
  • Otra buena opción es disolverla en un vaso de agua tibia (250 mililitros) y beber la mezcla antes de ir a dormir.
La miel no se debe usar en niños menores de un año y en personas con diabetes.

13. Haz una infusión de jengibre

El jengibre es una planta de amplio uso en la medicina tradicional asiática. Una de las maneras de aprovechar sus propiedades para combatir la congestión nasal es a través de las infusiones. Bajo esta línea, un estudio de 2020 evaluó la eficacia del extracto de jengibre, en comparación con la loratadina (fármaco contra las alergias) en el tratamiento de la rinitis alérgica.

Los resultados informaron que el extracto de jengibre es tan bueno como el antihistamínico para mejorar los síntomas nasales de las personas afectadas. Además, causó menos efectos secundarios, como somnolencia, estreñimiento o mareos.

  • Para aprovecharlo, disuelve una cucharadita de jengibre fresco rallado en agua tibia, añade zumo de limón o miel y bebe antes de acostarte.
Las embarazadas o en período de lactancia, las personas con afecciones cardíacas y las personas con diabetes no deben tomar jengibre sin previa supervisión médica.

14. Aprovecha el aceite de eucalipto

De manera tradicional, el aceite de eucalipto se ha utilizado como apoyo del tratamiento de enfermedades del tracto respiratorio, como el resfriado común, la congestión nasal, la sinusitis, la gripe y similares. Aunque se requieren más estudios al respecto, funcionaría bajo el mismo principio del mentol. Esto es, al actuar sobre los receptores en las membranas mucosas nasales.

  • Puedes usar el aceite de eucalipto en tus terapias de vapor. Bajo este método, añade un par de gotas y sigue los pasos ya reseñados.
No apliques el aceite alrededor de las fosas nasales, ya que el contacto directo con la piel puede generar irritación. Tampoco está diseñado para beber directamente. Hacer esto último puede ser peligroso.

Medicamentos para descongestionar tu nariz

En las farmacias existen diferentes productos útiles para la obstrucción de la nariz. Aunque la mayoría son de venta libre, consulta con el especialista para determinar la dosis y el tiempo de uso. Los más utilizados son los siguientes:

  • Antihistamínicos: útiles para tratar afecciones causadas por la liberación de histamina, una sustancia química segregada por el sistema inmunitario del cuerpo. Los hay de varios tipos, entre los cuales destacan la loratadina, la desloratadina, la cetirizina, la azelastina y la fexofenadina.
  • Analgésicos: pese a que no tratan de forma directa la congestión nasal, pueden ser útiles en ciertos contextos para la sintomatología que la acompaña. Por ejemplo, el dolor generado por la presión de los senos paranasales. El paracetamol, el ibuprofeno y el naproxeno son algunos de ellos.
  • Descongestionantes: bajo esta etiqueta se comercializan productos dirigidos a reducir la hinchazón de las fosas nasales y, al mismo tiempo, aliviar la congestión y la presión. Se distribuyen en forma de pastillas, líquidos, gotas nasales y aerosoles nasales. Los más conocidos son la nafazolina, la oximetazolina, la fenilefrina y la pseudoefedrina.
No utilices un descongestionante vía oral durante más de una semana sin consultar con tu médico de confianza. De igual modo, consulta con él si padeces de glaucoma, diabetes, problemas de tiroides, afecciones cardíacas y otras condiciones de salud.

Otros consejos

En paralelo con los remedios y trucos caseros mencionados, puedes implementar una serie de hábitos y acciones que ayudarán a la descongestión. Toma nota de ellas y úsalas a tu favor:

  • Haz sopa de pollo:se ha sugerido que la sopa de pollo se puede utilizar como tratamiento paliativo de infecciones respiratorias. Suministra líquidos y nutrientes, los vapores al consumirla caliente o tibia pueden ayudar con la mucosidad y, más importante aún, genera un espacio de confort para la mayoría de las personas.
  • Evita sonarte la nariz: en la mayoría de los casos, sonarte la nariz puede empeorar la congestión nasal. Si lo haces fuerte y muchas veces, las membranas nasales se inflamarán más, lo que formará un círculo vicioso. Lo recomendable es solo hacerlo en caso de estornudos o salida de secreción por los orificios nasales.
  • Bebe agua: tomar abundante agua a lo largo del día te ayudará a mantenerte hidratado y fluidificar el moco. De esta forma, será más sencillo expulsar las secreciones y aliviar la congestión nasal. Además, la hidratación adecuada es fundamental en las infecciones virales respiratorias para mejorar el bienestar general del paciente, en especial, en los niños.
  • Come alimentos picantes: pese a que no es la opción más práctica, sí pueden ofrecer un alivio temporal. Esto se debe a su componente estrella: la capsaicina. Tal y como señala el Ear and Sinus Institute, la capsaicina funciona al irritar las membranas mucosas, lo que desencadena secreción nasal. Como consecuencia, se suaviza cualquier obstrucción en la nariz.
  • Eleva tu cabeza durante el descanso: este sencillo acto puede ayudar a que circule más aire por las fosas y, al mismo tiempo, contribuir al drenado de la mucosidad por gravedad. Cuando descanses durante el día, hazlo en un sillón o en una cama con un buen respaldo. Esto último lo puedes hacer, por ejemplo, al añadir almohadas. Durante la noche, emplea almohadas ligeramente altas para dormir mejor.

¿Cuándo consultar con el médico?

Como ves, la sensación de nariz tapada es un síntoma común que se asocia a múltiples enfermedades. Por fortuna, la mayoría desaparecen pasados un par de días. Si luego de aplicar las recomendaciones mencionadas no logras destapar tu nariz, acude de inmediato con un profesional de salud. El personal médico está capacitado para ofrecerte un diagnóstico y tratamiento adecuado.

De igual modo, considera la visita al especialista en los siguientes contextos:

  • Personas con el sistema inmunitario comprometido.
  • Aparece fiebre igual o superior a 39.5 °C que dura varios días.
  • El episodio se presenta en niños menores de 2 años o en adultos mayores.
  • Incapacidad para respirar o signos evidentes de problemas respiratorios que podrían complicarse.
  • La congestión se prolonga durante más de dos semanas de forma continua o aparece y desaparece de manera irregular.
  • La nariz tapada se manifiesta en conjunto con síntomas de un ataque de asma, como lo son las sibilancias y la dificultad para respirar.

Usa las terapias caseras a tu favor

Cuando se prolonga por horas o días, la congestión nasal puede desequilibrar en gran medida el bienestar. Realizar actividades del día a día, como trabajar, estudiar o dormir, de repente se perfilan como un desafío. En estos casos, puedes apelar por remedios y terapias caseras que te proporcionarán un alivio al problema y a sus secuelas asociadas.

Por supuesto, debes tener en consideración las medidas de seguridad en algunos casos. Las terapias de frío y calor y las irrigaciones, por ejemplo, demandan una técnica adecuada para que resulten eficaces. Si optas por los medicamentos descongestionantes, sigue las indicaciones del prospecto y, si no obtienes mejoría, no dudes en consultar con tu médico.


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Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.