Beneficios y precauciones del té de rosa mosqueta

El té de rosa mosqueta es una bebida natural que ha ganado popularidad por sus beneficios para el cuidado de la piel, la salud digestiva y del sistema inmunitario. Obtenido de los escaramujos de la planta de rosa (Rosa canina L.), originaria de Europa, Asia y el norte de África, se aprecia por su riqueza en vitamina C y otros compuestos antioxidantes.

Su preparación es frecuente en épocas de frío, pues es reconfortante y ayuda al cuerpo a enfrentar el cambio de estación. Además, muchos lo consideran un complemento para sus rutinas saludables, porque aporta un máximo 5 calorías por taza, es antiinflamatorio y su perfil de nutrientes contribuye a incrementar el bienestar cuando se incluye como parte de una alimentación equilibrada y otros buenos hábitos.

¿Qué obtienes al consumirlo de forma regular? ¿Cuándo deberías evitarlo? Más allá de su delicado aroma floral y su regusto ácido, esta infusión tiene propiedades que puedes aprovechar en tu día a día. Descubre cómo ayuda a tu salud y cuáles precauciones debes considerar para una ingesta segura.

1. Favorece las funciones del sistema inmunitario

Cuando se incluye en el marco de un estilo de vida saludable y una adecuada nutrición, la ingesta de té de rosa mosqueta aporta beneficios para el sistema inmunitario. Esto se debe en gran medida a su contenido de vitamina C, un nutriente esencial para la producción y función de los glóbulos blancos, que forman parte de las defensas del organismo.

También, se asocia a otros antioxidantes, como los flavonoides y carotenoides, que al ser asimilados en el cuerpo disminuyen el impacto del estrés oxidativo, uno de los factores que causan enfermedades. Así, por ejemplo, una investigación publicada en BioImpacts refiere los posibles efectos inmunomoduladores de los antioxidantes presentes en la rosa mosqueta.

2. Ayuda al cuidado de la piel

Los beneficios del té de rosa mosqueta para el cuidado de la piel no pasan desapercibidos. Tanto su consumo como su aplicación tópica se asocia a la prevención del envejecimiento prematuro, la tonificación y la hidratación. Gracias a su contenido de vitamina C, favorece la síntesis de colágeno, la proteína que mantiene el cutis firme y elástico.

Además, antioxidantes como la astaxantina, los flavonoides y los carotenoides ayudan a prevenir el envejecimiento cutáneo. Debes considerar que su efecto no es inmediato ni milagroso; lo idóneo es que lo integres en tu rutina de skin care junto a otras prácticas sanas como uso de protector solar y productos hidratantes.

3. Contribuye a la salud digestiva

Ingerir té de rosa mosqueta no es suficiente para aliviar las enfermedades del sistema digestivo. Sin embargo, sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes parecen servir como calmante en caso de calambres abdominales, acidez, hinchazón e irritación.

En particular, los flavonoides y los ácidos fenólicos actúan como calmantes en la mucosa gastrointestinal y favorecen una digestión más ligera. Además, estos compuestos bioactivos influyen de forma positiva en la microbiota intestinal, lo que se traduce en una mejor digestión en general.

4. Tiene potencial contra la artritis reumatoide

Algunos estudios preliminares sugieren que el té de rosa mosqueta tiene potencial para mejorar la movilidad y reducir la necesidad de analgésicos en pacientes con artritis reumatoide. Esto debido a su contenido de polifenoles y un compuesto activo llamado galactolípido GOPO que le confieren propiedades antiinflamatorias.

Pero aunque los hallazgos son prometedores, el té por sí solo no es un tratamiento para las enfermedades articulares. Hay indicios de que puede ser útil, pero los efectos pueden variar entre personas, y se basan en gran medida en experiencia anecdótica.

5. Ayuda a cuidar la salud cardíaca

Los antioxidantes del té de rosa mosqueta, sobre todo los flavonoides y ácidos fenólicos, se asocian a la prevención de enfermedades cardíacas, ya que estos compuestos combaten el estrés oxidativo y la inflamación, dos factores de riesgo principales en la aparición de estas afecciones.

Cierta evidencia propone que su consumo también beneficia el control de la presión arterial y los niveles de colesterol, sobre todo en personas con sobrepeso. No obstante, estos efectos son modestos y dependen de la práctica de otros hábitos saludables.

6. Contribuye a mantener un peso saludable

Los hallazgos de una revisión publicada en Future Integrative Medicine, los extractos de escaramujo contienen tilirósido en las semillas y ese compuesto puede ofrecer efectos antiobesidad.

Además, el té puede complementar una alimentación equilibrada, sumando antioxidantes y agua, sin aportar demasiadas calorías. Ingerirlo puede ayudar a prolongar la sensación de saciedad.

Riesgos y precauciones al utilizar té de rosa mosqueta

En la actualidad, las evidencias no han encontrado efectos secundarios graves en la mayoría de adultos sanos que usan té de rosa mosqueta. Sin embargo, datos anecdóticos exponen que algunas personas pueden experimentar reacciones adversas, sobre todo por ingestas excesivas. Esto abarca lo siguiente:

• Náuseas y vómitos
• Calambres estomacales
• Insomnio
• Reacciones alérgicas (enrojecimiento, picazón o hinchazón en personas sensibles)
• Riesgo de cálculos renales (si se toma en grandes cantidades, su contenido de vitamina C puede favorecer la formación de oxalatos).

Por otro lado, debido a su composición, se cree que puede tener interacciones negativas con medicamentos antiácidos, estrógenos, litio, flufenazina y warfarina.

Hasta ahora, se considera posiblemente seguro en etapas de embarazo y lactancia, siempre y cuando se utilice en cantidades moderadas y ocasionales. Dada la falta de evidencia, no se recomienda su consumo habitual en estos casos. Además, en caso de tener alguna enfermedad en particular, es preferible consultar al médico antes de tomarlo.

Dosis y preparación del té de rosa mosqueta

No hay una dosis exacta establecida para el consumo seguro de té de rosa mosqueta. En general, se sugiere ingerir de 1 a 3 tazas al día para aprovechar sus beneficios sin caer en excesos.

Ingredientes

• 1 a 2 cucharaditas de escaramujos secos de rosa mosqueta (entre 5 y 10 g)
• 1 taza de agua (250 ml)

Preparación

• Primero, calienta el agua hasta que esté a punto de hervir.
• Luego, agrega los escaramujos secos y deja reposar 10-15 minutos, tapado.
• Pasado este tiempo, cuela y bebe caliente o frío, según tu preferencia.
• Si lo deseas, puedes endulzar con un poco de miel.

Uso tópico

• Si quieres emplear este té como tónico facial, compresas o en baños de inmersión, prepara una infusión más concentrada (con 10 o 20 gramos de la planta).
• Llévala al refrigerador hasta que esté bien fría.
• Con un disco de algodón, aplícala sobre la piel limpia para refrescar, tonificar o calmar irritaciones leves.
• También, la puedes usar para enjuagar el cabello.

Una bebida ligera para tu día a día

Si estás buscando una bebida agradable que sea libre de cafeína y estimulantes, pero que te relaje y aumente tu bienestar, el té de rosa mosqueta es una opción interesante. Su riqueza en antioxidantes y compuestos beneficiosos lo convierten en un complemento idóneo para cuidar tu salud mientras te refrescas con un sabor agradable.

Además, su versatilidad te permite tener un aliado para diferentes rutinas; desde el cuidado de la piel, hasta la estimulación de la digestión o la relajación antes de dormir. Solo asegúrate de consumirlo de forma moderada, dentro de un estilo de vida saludable.