10 beneficios del té negro según la evidencia científica

Debido a su abundante contenido de antioxidantes, el té negro se asocia con beneficios para la salud cardiovascular, intestinal y de la piel. ¿Qué dice la ciencia?
10 beneficios del té negro según la evidencia científica
Maria Patricia Pinero Corredor

Revisado y aprobado por la nutricionista Maria Patricia Pinero Corredor.

Última actualización: 24 mayo, 2023

A lo largo de los años, los beneficios del té negro se han documentado en una amplia variedad de estudios. Debido a su abundante concentración de antioxidantes —sobre todo de polifenoles—, su ingesta se ha vinculado a efectos positivos tanto para la salud cardíaca como para el metabolismo, el sistema digestivo y el cerebro.

En particular, esta variedad de té se obtiene a través de un proceso de marchitamiento, enrollado, oxidación y secado de las hojas de la planta Camellia sinensis. Su sabor es más fuerte que otros tés obtenidos de esta especie (como el té verde y el té oolong) y también se destaca por contener más cafeína (entre el 2 % y 4 %).

Si bien no se trata de un tratamiento de primera elección contra las enfermedades, sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, antidiabéticas y antitumorales ayudan a mantener el bienestar. Te contamos en detalle para qué se recomienda, cómo se consume y cuáles son sus posibles contraindicaciones y efectos secundarios.

10 beneficios del té negro según la ciencia

Desde hace varias décadas, los beneficios del té negro han sido un tema de interés para los científicos. Su concentración de compuestos activos ha exhibido una amplia variedad de efectos positivos en la salud.

Se ha determinado que contiene lo siguiente:

  • Ácidos fenólicos.
  • Minerales (calcio, cromo, magnesio, hierro, potasio o fósforo).
  • Flavonoides (tearubiginas, teaflavinas y catequinas).
  • Aminoácidos (L-teanina).
  • Vitaminas (A, C y K).
  • Cafeína.

Justamente, debido a esta composición, se le atribuyen varias propiedades medicinales. Para ser más exactos, se valora por su capacidad para combatir la inflamación, aumentar el estado de alerta, inhibir los efectos del estrés oxidativo y prevenir el daño celular.

¿Hay evidencias? Lo discutimos a continuación.



1. Salud del corazón

Los flavonoides, principales compuestos antioxidantes del té negro, tienen un impacto positivo en la salud cardíaca. Esto se debe en gran medida a que inciden en la regulación de los procesos inflamatorios y la prevención del daño oxidativo.

Respecto a esto, un metaanálisis compartido a través de Advances in Nutrition informó que por cada taza de té que se consume a diario, hay una disminución del 4 % de muerte por enfermedad cardíaca y del 2 % en el riesgo de ataque cardíaco.

Asimismo, se observó que reduce en un 4 % el riesgo de accidente cerebrovascular y un 1,5 % el riesgo de muerte por todas las causas. Al final, se determinó que incluirlo en un patrón dietético saludable puede reducir las probabilidades de enfermedad cardiovascular y mortalidad entre los adultos.

Otro estudio prospectivo divulgado en la revista Heart reveló que el consumo diario de té ayuda a reducir las probabilidades de cardiopatía isquémica y el riesgo de eventos cardiovasculares relevantes, como el ataque cardíaco.

La cardiopatía isquémica tiene lugar cuando las arterias se obstruyen e impiden —de manera parcial o completa— que se suministre sangre al músculo cardíaco.

A su vez, un ensayo controlado aleatorizado publicado en Preventive Medicine concluyó que el té negro —ingerido dentro de una dieta normal— coadyuva en la disminución de los factores de riesgo cardiovascular independientes, como la glucosa alta y las alteraciones en el perfil lipídico.

Té negro reduce el riesgo cardiovascular.
Los flavonoides del té negro podrían reducir el riesgo cardiovascular global al consumirlo con frecuencia.

2. Colesterol alto

Relacionado con el punto anterior, hay que destacar que el té negro se vincula con la disminución de los niveles de colesterol malo (LDL). La acumulación de este lípido en las arterias está relacionado con la insuficiencia cardíaca y el accidente cerebrovascular.

Una revisión de estudios compartida en Clinical Nutrition detalla que la ingesta de este té ayudó a disminuir la concentración sérica de este tipo de colesterol, sobre todo en personas con mayor riesgo cardiovascular.

Por su parte, un estudio en ratas revelado en Lipids in Health and Disease detalla que la teaflavina y las terubiginas  —dos flavonoides presentes en el té negro— tienen potencial para abordar enfermedades asociadas al estrés oxidativo, como la hipercolesterolemia y la hiperglucemia.

Aun así, los resultados de las investigaciones son mixtos. En un ensayo controlado aleatorizado, el consumo diario de 5 tazas de té negro al día no cambió de forma significativa el perfil de lípidos en personas con hipercolesterolemia límite.

3. Presión arterial alta

Continuando con los beneficios del té negro para la salud cardiovascular encontramos efectos interesantes en la disminución de la presión arterial alta. En un metaanálisis divulgado en Food & Function, los pacientes que tomaron un suplemento de té negro presentaron una reducción significativa de la presión arterial sistólica en comparación con el grupo de control.

Efectos similares se observaron en una investigación compartida en Complementary Therapies in Medicine , que reveló que la ingesta regular de té ayudó a disminuir la presión arterial sistólica en 4,81 mm Hg y la presión arterial diastólica en 1,98 mm Hg en personas con hipertensión.

Por su contenido de flavonoides, el té negro tiene beneficios para las personas con hipertensión. Sin embargo, su ingesta debe hacerse en el marco de una dieta saludable. 

4. Salud intestinal

Consumir té negro de manera regular también es una forma de cuidar la salud intestinal. Para ser más precisos —y según lo recopila una revisión en Critical Reviews in Food Science and Nutrition— los polifenoles ayudan a modular la función de la barrera intestinal, además de favorecer el equilibrio de la microbiota.

El té negro (abundante en polifenoles) parece promover el crecimiento de bacterias intestinales buenas, a la vez que inhibe la actividad de las bacterias perjudiciales.

Otra revisión de estudios compartida en la revista Nutrients destaca que el té negro, al igual que otras variedades de té derivadas de la especie Camellia sinensis, tienen actividad prebiótica debido a su aporte de polifenoles. De este modo, modula la proporción de los tipos de bacterias intestinales y, de paso, coadyuva en la pérdida de peso.

Al modular la función de la barrera intestinal y promover el crecimiento de bacterias saludables, el té negro contribuye al fortalecimiento de la función inmunitaria. Aun así, son necesarios estudios más amplios.

5. Concentración y rendimiento cognitivo

El té negro contiene hasta un 4 % de cafeína y un aminoácido llamado L-teanina. Ambas sustancias estimulantes se relacionan con un aumento de la concentración mental y un mejor estado de alerta. Esto explica por qué algunas personas manifiestan sentir más energía tras su ingesta.

Sobre esto, una investigación divulgada en la revista Nutrients encontró que la suplementación con L-teanina tiene potencial para estimular las funciones cerebrales. Con ello, mejora el enfoque y la memoria, entre otras habilidades cognitivas.

Entre tanto, un pequeño estudio compartido por Clinical Phytoscience determinó que incluso una pequeña cantidad de té negro coadyuva en la mejora del procesamiento cognitivo. La bebida se vinculó a un mejor desempeño de las tareas mentales y una mayor concentración.

Persona con cansancio y sin concentración.
Algunas personas utilizan la infusión de té negro para mejorar su rendimiento cerebral al estar cansados. Según la ciencia, podría funcionar.

6. Glucosa alta

El té negro no es un tratamiento de primera línea para combatir la diabetes. No obstante, incluirlo en el marco de una buena alimentación puede aportar beneficios a los pacientes con esta enfermedad.

Una investigación compartida en Asia Pacific Journal of Clinical Nutrition vinculó su consumo a la disminución de los niveles de glucosa en la sangre posprandial tras una ingesta de sacarosa. En concreto, 24 pacientes con y sin prediabetes tomaron una bebida alta en azúcar seguida de una dosis baja o alta de té negro o un placebo.

En los pacientes que ingirieron té negro —en ambas dosis— se encontró una disminución de los niveles de azúcar posprandial (después de comer) comparado con los que tomaron un placebo. Pese a esto, se requieren estudios más amplios y completos.

Otro estudio vincula al té negro con una mejor respuesta a la insulina en personas con obesidad y resistencia a la insulina. La publicación, difundida en Nutrition & Metabolism , sugirió que beber té negro mejora la sensibilidad a la insulina, sobre todo tras ingerir comidas abundantes en azúcar.

Es posible que el té negro beneficie a las personas con prediabetes y diabetes tipo 2. Sin embargo, debe ingerirse sin endulzantes añadidos.

7. Salud ósea

Una revisión divulgada en la revista Medicine llegó a la conclusión de que la ingesta de té contribuye a reducir el riesgo de osteoporosis. Estas cualidades se atribuyen a su alto contenido de flavonoides, vinculados a la disminución de la pérdida de la densidad ósea y al fortalecimiento de los huesos.

Otro estudio en ratas, compartido por Frontiers in Physiology, sugiere que las teoruginas y las teaflavinas del té negro desempeñan un papel beneficioso en el control de la pérdida de la densidad ósea mediante la promoción de la osteoclastogénesis.

Estos beneficios del té negro resultan particularmente útiles en las mujeres menopáusicas y posmenopáusicas, quienes tienen mayor riesgo de deterioro óseo y osteoporosis. 

8. Salud dental

Las catequinas que contienen las hojas de Camellia sinensis tienen propiedades bactericidas y bacteriostáticas que actúan contra las bacterias de la placa dental, como Streptococcus mutansUn estudio compartido en Open Access Macedonian Journal of Medical Sciences expone que un enjuague bucal a base de té (negro y verde para ser más exactos) puede emplearse como alternativa para prevenir la formación de caries dental.

Asimismo, información de American Society For Microbiology sugiere que el té negro y sus componentes benefician la salud bucal al interferir con la formación de la placa bacteriana que causa caries y enfermedad periodontal.

De todos modos, es conveniente usarlo con moderación, ya que los taninos que contiene se han relacionado con la aparición de manchas en los dientes, similares a las que causa el café.

9. Potencial antitumoral

Ni el té negro ni otras variedades de té pueden prevenir o curar el cáncer. Pese a esto, los estudios han determinado que sus componentes pueden retrasar el desarrollo de algunas formas de esta enfermedad y promover la muerte de células malignas.

En una revisión compartida por Advances in Nutrition, los investigadores observaron que la ingesta de té disminuye el riesgo de cáncer oral. En menor medida, también parece estar asociado a menor riesgo de cáncer gastrointestinal, de mama, de ovarios, de pulmón y de tiroides.

Dada la falta de estudios más amplios y bien diseñados, por ahora estos hallazgos son solo un punto de partida para la investigación de los efectos del té verde sobre el cáncer. No se debe considerar un tratamiento.

10. Pérdida de peso

Si de perder peso se trata, el té negro puede ser un buen complemento para añadir a la dieta. Un estudio revelado por Food & Function determinó que ingerir 3 tazas de té negro al día, durante 3 meses, ayudó a disminuir la circunferencia de la cintura y el peso corporal, comparado con la ingesta de una bebida de control con cafeína.

Una de las hipótesis sugiere que estos efectos ocurren por su alto contenido de flavonas, que actúan como antioxidantes en el organismo. Aun así, son necesarias más evidencias

En otra investigación de la revista Molecules , los expertos observaron que los polifenoles del té negro tienen un efecto antiobesidad sin reacciones secundarias aparentes. En sí, ayudan a estimular el metabolismo, además de reducir el estrés oxidativo y regular la ingesta de energía.

Té negro para bajar de peso.
El té negro solo será una ayuda en un plan de descenso de peso. A la par, se necesita asesoramiento nutricional.

Riesgos y posibles efectos secundarios del consumo de té negro

Para la mayoría de los adultos sanos, el consumo moderado de té negro es seguro.

En general, dos o tres tazas al día son bien toleradas. Los problemas empiezan a ocurrir con más de cuatro o cinco tazas diarias. Esto se debe, en gran medida, a su contenido de cafeína.

En exceso, este estimulante del té negro puede detonar los siguientes síntomas:

  • Anemia.
  • Hipertensión.
  • Dolores de cabeza.
  • Náuseas y vómitos.
  • Inquietud y ansiedad.
  • Zumbidos en los oídos.
  • Aumento de la micción.
  • Dificultades para dormir.
  • Nerviosismo y temblores.
  • Alteración de la respiración.

Por otro lado, su consumo está contraindicado en pacientes con trastorno de ansiedad, trastornos hemorrágicos, antecedentes de convulsiones, síndrome del intestino irritable y problemas hormonales. Se recomienda consultar al médico antes de probar esta bebida o los suplementos derivados.

Existe un riesgo elevado de interacciones entre el té negro y algunos medicamentos. Por seguridad, se desaconseja su uso simultáneo con los siguientes fármacos:

  • Efedrina.
  • Clozapina.
  • Estrógenos.
  • Carbamazepina.
  • Antibióticos (quinolonas).
  • Medicamentos para el asma.
  • Fenilpropanolamina.
  • Drogas diuréticas.
  • Anticoagulantes.
  • Anticonceptivos.
  • Antidepresivos.
Siempre que se estén tomando fármacos o suplementos (vitaminas, hierbas, complementos dietarios, etcétera), hay que averiguar con el médico si hay riesgos de consumirlos a la par del té negro.


¿Cómo se consume el té negro?

En general, el té negro se consume como bebida. Puede adquirirse en tisanas o como planta seca.

Se suele preparar solo, combinado con otras hierbas o con limón. Las proporciones suelen ser una cucharadita o una bolsita (5 gramos) por cada taza de agua (250 mililitros).

La bebida está lista para el consumo tras dejar infusionar el té durante 10 minutos. Se cuela y se endulza al gusto (aunque se recomienda evitar los endulzantes).

El té negro aporta beneficios cuando se consume con moderación

Ahora mismo, el té negro es una de las bebidas más consumidas junto al café y al té verde. Se utiliza como alternativa al primero y a las bebidas energéticas. Aunque sus beneficios potenciales aún son materia de investigación, su abundante contenido de antioxidantes está vinculado a un mejor estado de salud.

En cualquier caso, es conveniente tomarlo con moderación, sin superar las 3 tazas al día. En caso de estar bajo tratamiento con fármacos o si existe alguna enfermedad subyacente, es necesario consultar al médico antes de incluir esta bebida en la dieta regular. ¡Tenlo en cuenta!


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • American Society For Microbiology. "Tea Fights Cavities, Reduces Plaque." ScienceDaily. ScienceDaily, 24 May 2001. <www.sciencedaily.com/releases/2001/05/010523072047.htm
  • Armidin RP, Yanti GN. Effectiveness of Rinsing Black Tea Compared to Green Tea in Decreasing Streptococcus mutans. Open Access Maced J Med Sci. 2019 Nov 14;7(22):3799-3802. doi: 10.3889/oamjms.2019.507. PMID: 32127979; PMCID: PMC7048338.
  • Bond T, Derbyshire E. Tea Compounds and the Gut Microbiome: Findings from Trials and Mechanistic Studies. Nutrients. 2019 Oct 3;11(10):2364. doi: 10.3390/nu11102364. PMID: 31623411; PMCID: PMC6835862.
  • Bøhn SK, Croft KD, Burrows S, Puddey IB, Mulder TP, Fuchs D, Woodman RJ, Hodgson JM. Effects of black tea on body composition and metabolic outcomes related to cardiovascular disease risk: a randomized controlled trial. Food Funct. 2014 Jul 25;5(7):1613-20. doi: 10.1039/c4fo00209a. PMID: 24889137.
  • Butacnum A, Chongsuwat R, Bumrungpert A. Black tea consumption improves postprandial glycemic control in normal and pre-diabetic subjects: a randomized, double-blind, placebo-controlled crossover study. Asia Pac J Clin Nutr. 2017 Jan;26(1):59-64. doi: 10.6133/apjcn.112015.08. PMID: 28049262.
  • Chung M, Zhao N, Wang D, Shams-White M, Karlsen M, Cassidy A, Ferruzzi M, Jacques PF, Johnson EJ, Wallace TC. Dose-Response Relation between Tea Consumption and Risk of Cardiovascular Disease and All-Cause Mortality: A Systematic Review and Meta-Analysis of Population-Based Studies. Adv Nutr. 2020 Jul 1;11(4):790-814. doi: 10.1093/advances/nmaa010. PMID: 32073596; PMCID: PMC7360449.
  • Henning, Susanne & Wang, Piwen & Heber, David. (2011). Chemopreventive effects of tea in prostate cancer: Green tea versus black tea. Molecular nutrition & food research. 55. 905-20. 10.1002/mnfr.201000648.
  • Hidese S, Ogawa S, Ota M, Ishida I, Yasukawa Z, Ozeki M, Kunugi H. Effects of L-Theanine Administration on Stress-Related Symptoms and Cognitive Functions in Healthy Adults: A Randomized Controlled Trial. Nutrients. 2019 Oct 3;11(10):2362. doi: 10.3390/nu11102362. PMID: 31623400; PMCID: PMC6836118.
  • Khan N, Mukhtar H. Tea and health: studies in humans. Curr Pharm Des. 2013;19(34):6141-7. doi: 10.2174/1381612811319340008. PMID: 23448443; PMCID: PMC4055352.
  • Kim TL, Jeong GH, Yang JW, Lee KH, Kronbichler A, van der Vliet HJ, Grosso G, Galvano F, Aune D, Kim JY, Veronese N, Stubbs B, Solmi M, Koyanagi A, Hong SH, Dragioti E, Cho E, de Rezende LFM, Giovannucci EL, Shin JI, Gamerith G. Tea Consumption and Risk of Cancer: An Umbrella Review and Meta-Analysis of Observational Studies. Adv Nutr. 2020 Nov 16;11(6):1437-1452. doi: 10.1093/advances/nmaa077. PMID: 32667980; PMCID: PMC7666907.
  • Liang Q, Lv M, Zhang X, Hu J, Wu Y, Huang Y, Wang X, Sheng J. Effect of Black Tea Extract and Thearubigins on Osteoporosis in Rats and Osteoclast Formation in vitro. Front Physiol. 2018 Sep 3;9:1225. doi: 10.3389/fphys.2018.01225. Erratum in: Front Physiol. 2020 Feb 25;11:136. PMID: 30233402; PMCID: PMC6129951.
  • Li X, Yu C, Guo Y, Bian Z, Si J, Yang L, Chen Y, Ren X, Jiang G, Chen J, Chen Z, Lv J, Li L; China Kadoorie Biobank Collaborative Group. Tea consumption and risk of ischaemic heart disease. Heart. 2017 May;103(10):783-789. doi: 10.1136/heartjnl-2016-310462. Epub 2017 Jan 11. PMID: 28077466; PMCID: PMC5529974.
  • Li J-Y, Ge J-R, Chen J, Ye Y-J, Xie L-H, Li L, Chai H. Clinical study on the influence of tea drinking habits on bone mineral density and osteoporosis in postmenopausal women in Fuzhou city, China. Progr Nutr [Internet]. 2021 Mar. 31 [cited 2023 Feb. 24];23(1):e2021033. Available from: https://www.mattioli1885journals.com/index.php/progressinnutrition/article/view/9409
  • Ma C, Zheng X, Yang Y, Bu P. The effect of black tea supplementation on blood pressure: a systematic review and dose-response meta-analysis of randomized controlled trials. Food Funct. 2021 Jan 7;12(1):41-56. doi: 10.1039/d0fo02122a. Epub 2020 Nov 25. PMID: 33237083.
  • Mahdavi-Roshan M, Salari A, Ghorbani Z, Ashouri A. The effects of regular consumption of green or black tea beverage on blood pressure in those with elevated blood pressure or hypertension: A systematic review and meta-analysis. Complement Ther Med. 2020 Jun;51:102430. doi: 10.1016/j.ctim.2020.102430. Epub 2020 May 14. PMID: 32507441.
  • Pan H, Gao Y, Tu Y. Mechanisms of Body Weight Reduction by Black Tea Polyphenols. Molecules. 2016 Dec 7;21(12):1659. doi: 10.3390/molecules21121659. PMID: 27941615; PMCID: PMC6273558.
  • Rasheed Z. Molecular evidences of health benefits of drinking black tea. Int J Health Sci (Qassim). 2019 May-Jun;13(3):1-3. PMID: 31123432; PMCID: PMC6512146.
  • Rizwan, A., Zinchenko, A., Özdem, C., Rana, Md. S., & Al-Amin, Md. M. (2017). The effect of black tea on human cognitive performance in a cognitive test battery. In Clinical Phytoscience (Vol. 3, Issue 1). Springer Science and Business Media LLC. https://doi.org/10.1186/s40816-017-0049-4
  • Sun K, Wang L, Ma Q, Cui Q, Lv Q, Zhang W, Li X. Association between tea consumption and osteoporosis: A meta-analysis. Medicine (Baltimore). 2017 Dec;96(49):e9034. doi: 10.1097/MD.0000000000009034. PMID: 29245297; PMCID: PMC5728912.
  • Temple JL, Bernard C, Lipshultz SE, Czachor JD, Westphal JA, Mestre MA. The Safety of Ingested Caffeine: A Comprehensive Review. Front Psychiatry. 2017 May 26;8:80. doi: 10.3389/fpsyt.2017.00080. PMID: 28603504; PMCID: PMC5445139.
  • Troup R, Hayes JH, Raatz SK, Thyagarajan B, Khaliq W, Jacobs DR Jr, Key NS, Morawski BM, Kaiser D, Bank AJ, Gross M. Effect of black tea intake on blood cholesterol concentrations in individuals with mild hypercholesterolemia: a diet-controlled randomized trial. J Acad Nutr Diet. 2015 Feb;115(2):264-271.e2. doi: 10.1016/j.jand.2014.07.021. Epub 2014 Sep 27. PMID: 25266246; PMCID: PMC4312726.
  • Wan MLY, Co VA, El-Nezami H. Dietary polyphenol impact on gut health and microbiota. Crit Rev Food Sci Nutr. 2021;61(4):690-711. doi: 10.1080/10408398.2020.1744512. Epub 2020 Mar 25. PMID: 32208932.
  • Zhao Y, Asimi S, Wu K, Zheng J, Li D. Black tea consumption and serum cholesterol concentration: Systematic review and meta-analysis of randomized controlled trials. Clin Nutr. 2015 Aug;34(4):612-9. doi: 10.1016/j.clnu.2014.06.003. Epub 2014 Jun 13. PMID: 24972454.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.