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Aprende cómo usar un cepillo interdental y los beneficios para tu boca

4 minutos
El cepillado habitual no alcanza a remover bacterias que prosperan en espacios de difícil acceso en la boca. Los cepillos interdentales se presentan como la solución para limpiar esos puntos críticos con más precisión.
Aprende cómo usar un cepillo interdental y los beneficios para tu boca
Última actualización: 02 octubre, 2025

No siempre nos damos cuenta, pero el espacio entre los dientes tiende a acumular restos de comida y placa bacteriana que no podemos eliminar al 100 % con el cepillo convencional. Estas áreas son más difíciles de acceder, ya que son más estrechas y sensibles. Por eso, es común que los odontólogos recomienden complementar la higiene con herramientas específicas, como el cepillo interdental.

Se trata de un cepillo de dientes miniatura, con forma cónica o cilíndrica, compuesto por cerdas suaves dispuestas alrededor de un alambre fino y flexible diseñado especialmente para deslizarse y “barrer” los residuos de los espacios interdentarios. Vienen en distintos tamaños y colores, ajustándose a distintas necesidades. ¿Cuál elegir y cómo usarlos de forma correcta? Aquí te lo aclaramos.

Cómo elegir el cepillo interdental para tu rutina diaria

Al momento de adquirir un cepillo interdental nos vamos a encontrar con una variedad de tamaños y grosores. Por lo general, las marcas utilizan un sistema de colores para representar el calibre del cepillo, lo que facilita la elección del más apropiado según el espacio que tengamos entre los dientes, es decir, si es más estrecho o más amplio.

Ahora bien, aunque a veces los tamaños se clasifican del o al 7, debemos tener en cuenta que los colores asignados pueden variar entre los fabricantes. Por eso, más que guiarnos por el color, lo mejor es revisar las especificaciones de cada uno. El más apropiado es aquel que entre en el espacio con una ligera resistencia, pero sin forzar el alambre central.

Si el cepillo entra demasiado suelto, la limpieza será ineficiente. Por el contrario, tener que forzarlo para que entre, puede causar lesiones en los dientes y las encías. Por eso, el ajuste debe ser cómodo, que nos deje sentir el contacto de los filamentos con los dientes, pero no de forma brusca.

Ciertas veces, es mejor consultar con el odontólogo para encontrar el tamaño ideal. Hay modelos adaptados para quienes tienen ortodoncia, implantes dentales o encías sensibles. 

¿Necesito varios tamaños?

Es lo ideal. Tener 2 o 3 tamaños diferentes permite una limpieza más profunda y completa. Y es que los espacios entre molares suelen ser más anchos que los que tienen los dientes frontales.

4 pasos sencillos para usar un cepillo interdental

El uso de cepillos interdentales no es tan común como los convencionales o la seda dental. Por eso, aunque es un proceso sencillo y no requiere técnicas complejas, al principio puede requerir algo de práctica. Los pasos sugeridos son los siguientes:

  1. Elige el tamaño adecuado para el espacio. Comienza con el cepillo del tamaño correcto para el espacio que vas a limpiar.
  2. Inserta el cepillo suavemente. Introdúcelo en el espacio interdental de forma recta y sin aplicar fuerza. Nunca intentes meterlo en un espacio donde no cabe.
  3. Realiza el movimiento de limpieza. Una vez dentro, mueve el cepillo con suavidad hacia adentro y hacia afuera 2 o 3 veces. No es necesario girarlo. Sentirás cómo los filamentos limpian las superficies laterales de ambos dientes.
  4. Enjuaga el cepillo y pasa al siguiente espacio. Después de limpiar cada espacio, enjuaga el cepillo bajo el grifo para eliminar la placa. Continúa con el siguiente espacio hasta completar toda la boca.

¿Por qué usar estos cepillos mejora la salud oral?

El principal beneficio de usar un cepillo interdental es que remueve la placa bacteriana de los espacios entre los dientes antes de que se solidifique. Esto es importante porque impide la formación de sarro, un factor asociado al riesgo de gingivitis (inflamación de las encías), caries, halitosis (mal aliento) y enfermedades periodontales que afectan la integridad de las encías y de las piezas dentales.

De hecho, los beneficios se extienden más allá de la prevención de afecciones en la cavidad oral. Una boca sana es clave para la salud general, dado que las bacterias orales pueden influir negativamente en el curso de enfermedades como la diabetes, afecciones cardiovasculares y trastornos respiratorios.

Dudas frecuentes sobre el uso del cepillo interdental

  1. ¿Debo usar pasta de dientes en el cepillo interdental? No, no es necesario. La limpieza que realiza es mecánica, gracias a la fricción de los filamentos. Existen productos específicos para este tipo de cepillos, pero su uso solo es recomendable bajo estricta recomendación del dentista.
  2. ¿Es normal que sangre un poco al principio? Un ligero sangrado durante los primeros días puede ser normal si las encías están inflamadas. Es una señal de que estamos eliminando la placa acumulada. Sin embargo, este debería desaparecer en máximo una semana de uso constante. Si persiste, es preferible consultar al dentista.
  3. ¿Cada cuánto debo cambiar el cepillo interdental? Hace falta sustituirlos si los filamentos están desgastados o el alambre deforme. Con un uso diario, esto suele ocurrir después de una o dos semanas.

Un aliado para tu salud dental

Los cepillos interdentales no son imprescindibles para todos, pero sí bastante recomendables como complemento del cepillado convencional. Se estima que este último solo limpia un 60 % de la superficie total, por lo que este tipo de herramientas contribuyen a una higiene oral más completa.

De hecho, benefician especialmente a quienes tienen ortodoncia, implantes, prótesis dentales, encías retraídas o espacios amplios entre los dientes, en los que el hilo dental tiende a ser insuficiente. La clave es elegir el tamaño adecuado y ser constantes con su uso para garantizar su eficacia.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.