Descubre el método FIFO para reducir el desperdicio de alimentos en tu cocina

Seguro que te ha pasado, abres la nevera y encuentras yogures caducados o esas verduras que pensabas usar hace días, pero ahora debes tirar a la basura. Para evitar estos desperdicios de alimentos, aplicar el método FIFO (First-In, First-Out) es una estrategia sencilla para evitar que la comida se pudra antes de ser consumida.
Cada año, millones de toneladas de alimentos se desperdician, y gran parte de esos desechos se generan en casa por simples descuidos o falta de organización. Al implementar la técnica FIFO, puedes aprovechar la comida que compras al máximo y, de paso, ahorrar dinero mientras mantienes tu cocina más ordenada.
¿Qué es el método FIFO?
FIFO es un acrónimo inglés que se traduce como “lo primero en entrar, lo primero en salir”. Se trata de una forma sencilla de organizar tus alimentos para que los más antiguos se consuman antes que los recién comprados.
La idea es muy simple, cada vez que guardas algo en la nevera o la despensa, debes colocarlo detrás de los productos que ya llevaban tiempo allí, de manera que siempre uses primero lo que está más próximo a expirar. Para aplicarla, es útil entender la diferencia entre las fechas de los envases:
- “Fecha de caducidad”: indica que no debes consumir un producto después de esta fecha por seguridad. Se encuentra en productos muy perecederos como carnes o yogures.
- “Consumir antes de”: se refiere a que un producto sigue siendo seguro para el consumo después de la fecha, pero puede haber perdido parte de su sabor o textura.
Cómo aplicar el método FIFO en 4 pasos
Si estás cansado de que tus alimentos se terminen venciendo en el fondo de la nevera, aplicar el método FIFO puede ayudarte a mantener todo más organizado y aprovechar cada compra. Al cambiar la forma en que guardas y rotas tus productos, podrás reducir el desperdicio y ahorrar unos cuantos euros.
1. Organiza tus compras por fecha de caducidad
Este es el gesto que lo cambia todo. Cuando llegues a casa con tus compras, mueve los productos antiguos hacia el frente del estante o de la nevera. Después, coloca los productos recién comprados detrás de ellos. De esta forma, lo primero que veas y cojas será siempre lo más antiguo.
2. Etiqueta todo lo que abres y guardas
Para las sobras, las verduras, los productos que congelas o los paquetes que abres, tu memoria no siempre es confiable.
Usa etiquetas adhesivas para anotar la fecha en que los guardaste, y almacena los alimentos como las harinas, granos, legumbres y azúcar en recipientes transparentes para ver de un vistazo lo que hay dentro.
3. Crea una zona de “consumo prioritario”
Designa un espacio visible en tu nevera o alacena para los productos que necesitan ser consumidos con urgencia. Ahí colocarás los yogures que están a punto de caducar o las frutas que empiezan a madurar demasiado para comerlas cuanto antes.
4. Mantén el sistema
Revisa tu nevera y despensa al menos una vez a la semana. Así puedes planificar tus comidas en función de los alimentos que estén próximos a caducar, y ajustar tus compras para no adquirir cosas que no necesitas ni duplicar productos.
Trucos para convertir la técnica FIFO en un hábito
Si estabas acostumbrado a guardar tus compras sin ningún orden específico, este método de organización puede parecer un esfuerzo extra. Pero con algunos trucos simples, puedes convertirlo en un hábito natural que te ayudará a aprovechar mejor tus alimentos y reducir el desperdicio sin complicaciones.
- Crea rutinas semanales: dedica unos minutos a revisar la nevera y la despensa, asegurándote de que los alimentos más antiguos estén al frente.
- Usa cajas o bandejas: separa los productos por fechas para identificarlos rápido y mantener todo más ordenado.
- Añade señales visuales: utiliza cintas de colores o etiquetas para marcar los alimentos que están próximos a vencer para incorporarlos en tus comidas antes de que se echen a perder.
- Inclúyelo en tu planificación: al organizar tus compras y menús, piensa primero en los alimentos que están por caducar y prepáralos en una deliciosa comida.
El método FIFO es una tarea de organización simple que puedes integrar con facilidad en tu rutina de guardar las compras. Al aplicarlo, ahorrarás dinero y reducirás el desperdicio de alimentos. Además, es la mejor manera de tener una cocina más segura y ordenada. ¡Anímate a ponerlo a prueba!
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.







