Logo image

5 hábitos diarios para mantener tu ánimo arriba empezando el otoño

3 minutos
Incorporar hábitos sencillos puede transformar la melancolía otoñal en una oportunidad para recargar energía y volver a la calma.
5 hábitos diarios para mantener tu ánimo arriba empezando el otoño
Última actualización: 28 septiembre, 2025

Empezando el otoño, es normal que empieces a sentirte con cierta melancolía. Por un lado, te despides del verano, una época llena de luz en la que tal vez saliste de tu rutina más de lo habitual y que te permitió disfrutar más planes al aire libre. Por el otro, los días comienzan a acortarse y la reducción de horas de sol afecta tu reloj biológico, generándote un sentimiento de tristeza difícil de explicar y más sensación de sueño durante el día.

Lo cierto es que no se trata de algo aislado o que te suceda solo a ti. Se conoce como trastorno afectivo estacional (TAE) o depresión estacional, y sucede porque en realidad experimentas cambios psicológicos y hormonales que influyen en tu nivel de energía, concentración y motivación. ¿La buena noticia? Hay varias cosas que puedes hacer para elevar tu estado de ánimo. Aquí te compartimos 5 hábitos claves.

1. Aumenta la exposición a la luz natural

Dar un paseo en la mañana, trabajar cerca de una ventana o hacer alguna actividad al aire libre durante el día puede contribuir de forma significativa a tu ánimo en los primeros días del otoño. La exposición a la luz natural, incluso si los días están nublados, es esencial para regular tu reloj interno y estimular la producción de serotonina, hormona asociada a la calma y al bienestar.

2. Haz actividad física

Uno de tus mejores aliados iniciando el otoño es el ejercicio físico. Ya sea que camines, saltes cuerda, des un paseo en bicicleta, hagas yoga u otra disciplina deportiva, su práctica te ayuda a incrementar la producción de “hormonas de la felicidad” , como la serotonina y las endorfinas. Además, mejora tu respuesta al estrés, favorece la calidad de sueño y combate la sensación de letargo que te hace lento en tus actividades.

3. Planifica encuentros sociales

El fin del verano no tiene que dar por finalizados los encuentros sociales. Aunque tal vez tengas menos tiempo, es importante que dejes espacio para los encuentros sociales. Un simple café con tus amigos, una noche de cine, una visita a un museo o una escapada de fin de semana te permitirán recargar en esos momentos de aislamiento y bajo estado de ánimo.

4. Adapta tu nutrición

Una buena alimentación es esencial en todas las épocas del año. En la temporada otoñal, es particularmente conveniente que asegures un óptimo consumo de carbohidratos complejos (avena, arroz integral, quinua, etcétera), pues aumentan tu nivel de energía y favorecen la producción de serotonina.

También puedes dar prioridad a las fuentes de omega-3 (pescado azul o nueces) y los de vitamina D (pescados, setas y productos fortificados) que se relacionan con un mejor estado de ánimo.

5. Crea un entorno acogedor en casa

Si ahora debes pasar más tiempo en casa, lo mejor es que hagas que cada espacio sea reconfortante. Utiliza mantas suaves, velas, infusiones y buena iluminación ambiental. Este enfoque es similar al concepto danés de Hygge (bienestar acogedor), que busca crear un ambiente cálido, cómodo y agradable con el fin de promover un estado de calma, conexión y disfrute de las cosas simples de la vida.

Una oportunidad para bajar el ritmo

Sentir un bajón emocional con la llegada del otoño es natural, pero no significa que tengas que resignarte a sentirte así por mucho tiempo. Cambiar la perspectiva y aprender a disfrutar los cambios te ayudará a verlo como una oportunidad para bajar el ritmo, reflexionar y dedicar tiempo a actividades más pausadas.

De todos modos, tampoco te culpes por sentirte mal ni subestimes la emoción. Ciertas veces, es incontrolable y el malestar persiste por semanas. De hecho, puede interferir con tus actividades diarias o relaciones. De ser así, consulta con tu médico o psicólogo para conocer otras opciones de tratamiento.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  1. Alizadeh Pahlavani H. (2024). Possible role of exercise therapy on depression: Effector neurotransmitters as key players. Behavioural brain research459, 114791. https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0166432823005090?via%3Dihub
  2. Blumenthal, J. A., & Rozanski, A. (2023). Exercise as a therapeutic modality for the prevention and treatment of depression. Progress in cardiovascular diseases77, 50–58. linkinghub.elsevier.com/retrieve/pii/S0033062023000142
  3. Leppämäki, S. J., Partonen, T. T., Hurme, J., Haukka, J. K., & Lönnqvist, J. K. (2002). Randomized trial of the efficacy of bright-light exposure and aerobic exercise on depressive symptoms and serum lipids. The Journal of clinical psychiatry63(4), 316–321. https://psycnet.apa.org/record/2002-02802-008
  4. Leppämäki, S., Partonen, T., & Lönnqvist, J. (2002). Bright-light exposure combined with physical exercise elevates mood. Journal of affective disorders72(2), 139–144. https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0165032701004177?via%3Dihub
  5. van Loo, H. M., Booij, S. H., & Jeronimus, B. F. (2023). Testing the mood brightening hypothesis: Hedonic benefits of physical, outdoor, and social activities in people with anxiety, depression or both. Journal of affective disorders325, 215–223. https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0165032723000253?via%3Dihub
  6. Asai, Y., Obayashi, K., Oume, M., Ogura, M., Takeuchi, K., Yamagami, Y., Tai, Y., Kurumatani, N., & Saeki, K. (2018). Farming habit, light exposure, physical activity, and depressive symptoms. A cross-sectional study of the HEIJO-KYO cohort. Journal of affective disorders241, 235–240. https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0165032718304634?via%3Dihub

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.