Cómo hacer sirope de dátiles

¿Ya has probado el sirope de dátiles para endulzar tus platos y postres favoritos? Te animamos a hacerlo, ya que es una de las formas más saludables de aportar un sabor dulce a todos tus platos.
Cómo hacer sirope de dátiles
Anna Vilarrasa

Revisado y aprobado por la nutricionista Anna Vilarrasa.

Escrito por Anna Vilarrasa

Última actualización: 25 mayo, 2023

El sirope de dátiles es una pasta cremosa que resulta de triturar esta fruta junto con un poco de agua. Es muy sencillo de preparar y se trata de una de las mejores alternativas al azúcar blanco, la panela, los siropes o las melazas.

Se trata de un alimento con un marcado sabor dulce debido a la presencia de carbohidratos, con un procesado mínimo y que, además, aporta pequeñas cantidades de nutrientes muy interesantes para la salud.

El dátil, un alimento dulce por naturaleza

Dátiles
Los dátiles son unos frutos de gran dulzor que pueden utilizarse para reemplazar el azúcar en diferentes preparaciones.

El dátil es el fruto obtenido de la palmera datilera (Phoenix dactylifera). Se cultiva en regiones subtropicales con climas secos y cálidos, y se encuentra en el mercado durante casi todo el año.

Por su composición nutricional es un alimento energético que también aporta fibra, potasio, magnesio, vitamina B6 y componentes antioxidantes. Por esto, es una opción ideal para recuperar energías después del ejercicio físico, en caso de convalecencia o para los niños y adolescentes en edad de crecimiento.

Debido a su contenido en azúcares naturales (glucosa y fructosa) es una auténtica golosina natural y un tentempié ideal pues tiene una alta capacidad saciante. Además, junto con los plátanos o el puré de manzana se ha convertido en los últimos años en una alternativa muy usada para reducir la presencia de azúcar añadido en el día a día. 

El único problema es que usarlo en su forma natural para cocinar puede ser un poco difícil. Nada que no tenga solución con un pequeño proceso de elaboración para conseguir una textura más líquida. Una receta sencilla en la que solo necesitarás 3 ingredientes y una máquina para triturar.

El resultado es un sirope de dátil casero, 100 % natural y con la máxima calidad de los ingredientes que elijas. Además, no solo endulza de forma natural sino que aporta un sabor delicioso a las tartas, galletas, postres o batidos que prepares.

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Ingredientes necesarios para la receta de sirope de dátiles

Para elaborar el sirope se necesitan dos ingredientes y un tercero que es opcional. Esto sí, ten en cuenta que cuanta más calidad tengan, mejor será el resultado final.

Con las cantidades indicadas se obtienen unos 500 mililitros de sirope.

  • 1 taza de dátiles (200 gramos sin el hueso).
  • 1 taza y media de agua (375 mililitros).
  • 1 cucharadita de zumo de limón. Su uso es opcional. Permite alargar un poco el tiempo de conservación aunque también puede alterar el sabor del sirope.

Cómo se elabora

Para preparar sirope de dátiles se necesitan solo dos ingredientes y una batidora.

Verter los dátiles y el agua en un vaso de batidora o un procesador de alimentos y batir todo hasta obtener una textura homogénea. Introducir el sirope en un tarro de cristal.

El único utensilio que se requiere es la máquina para triturar. Puedes usar un procesador de alimentos, un robot de cocina o una batidora de brazo. Cuanto más potente sea, más triturado queda el sirope. Si la textura final es algo grumosa, se corrige con la adición de un poco más de agua.

¿Se puede sustituir el azúcar por sirope de dátiles?

Sin duda alguna el sirope de dátiles es una de las alternativas más saludables para endulzar en el día a día. Preparado como se indica en esta receta, el sirope conserva todos los nutrientes del dátil y, por lo tanto, se convierte en un producto apto para una dieta sana.

Su uso en la cocina es muy versátil. Por un lado, sirve para dar un toque dulce a los alimentos o platos más comunes como un yogur, un porridge de avena o un budín de chía.

Al mismo tiempo, también es válido para preparar postres y dulces como galletas, brownies o cremas de cacao para untar. Al estar triturados, los dátiles se integran bien con el resto de los ingredientes de cualquier receta aunque puede ser necesario ajustar el punto de dulzor al gusto de cada uno.

Ahora bien es importante tener en cuenta que lo recomendable es consumir pasteles, galletas y otro tipo de preparaciones de vez en cuando, aunque estén endulzadas con ingredientes naturales. El uso de dátiles puede llevar a consumir más cantidad al pensar que se trata de alternativas sanas.

Existen otros alimentos muy recomendados para tomar en los desayunos, las meriendas o como tentempiés y que corren el riesgo de ser desplazados sin darnos cuenta. Estos son la fruta fresca, el pan, los copos de avena, los yogures o los frutos secos

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Últimos consejos para elaborar el mejor sirope de dátiles en casa

Existen muchos tipos de dátil con características diferentes. A la hora de preparar esta receta, puedes usar la variedad que prefieras aunque las más adecuadas son el Deglet Nour o el MedjoolEs necesario fijarse en los componentes, ya que algunas veces tienen ingredientes añadidos o están caramelizados.

Si tu procesador de alimentos o batidora no es muy potente, existe un truco para facilitar el triturado de los dátiles. El mismo es dejarlos en remojo unos 30 minutos. El agua los ablanda de manera considerable y es mucho más fácil el procesado.

Una vez preparado, el sirope se conserva bien en el frigorífico dentro de un tarro de cristal durante unas 3 semanas. Con el paso de los días adquiere una textura más densa, pero es normal. Antes de usar, lo ideal es diluirlo con un poco de agua.

En algunas tiendas especializadas se encuentra sirope de dátil preparado y de buena calidad. No obstante, te animamos a confeccionar el tuyo, ya que de este modo puedes obtener la textura que más te gusta así como experimentar con algunos sabores al añadir canela, vainilla o cardamomo, por ejemplo.

Seguro que desde el momento en que lo pruebes se convierte en un ingrediente habitual en tu cocina y uno de los favoritos de toda la familia. ¿A qué esperas para poner manos a la obra?


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