6 cosas de tu armario que deberías tirar ahora mismo

El cambio de temporada y las rebajas son uno de los detonantes para que muchas personas se llenen de productos poco útiles. En el caso de la moda, las diversas marcas low cost juegan un papel fundamental en querer convertir a los consumidores en unos compradores compulsivos. Por eso hay cosas de tu armario que deberías tirar y no esperar. 
Tener mucha ropa no es sinónimo de verse siempre bien. El estilo es una de esas cuestiones que más tiende a perderse en un armario poco consolidado.
Aquí se deben priorizar las prendas claves, las que vayan acordes a la silueta del cuerpo y, por supuesto, las que llevan sello propio.
Limpiar y ordenar deben ser dos normas esenciales para darle un nuevo y renovado aire al armario. Sin embargo, todo comienza con el deseo de cambiar, no solo para darle un nuevo espacio a lo que realmente se necesita, sino para que todo lo inservible o poco práctico se vaya.

Cosas de tu armario que deberías tirar sin demora

Vamos a analizar algunas cosas de tu armario que deberías tirar. Si no lo haces ahora, tampoco lo dejes para mucho tiempo adelante. Cuanto antes pongas manos a la obra, mejor será la limpieza necesaria.

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1. Tendencias obsoletas

La moda cada vez va más rápido y de una temporada a otra los diseños se transforman. Puede que ese vestido con brillo o el estampado de cuadros que tanto generó en pasarelas hace algún tiempo atrás, esté ocupando el lugar de una prenda más atemporal.

Y aunque no es mala idea llevar tendencias, es necesario replantearse cuáles son menos estacionales, es decir, aquellas que casi nunca se repiten.

2. Lo viejo

Algunas prendas de antaño generan apegos innecesarios. Los recuerdos con un suéter o aquellos pantalones que te sentaban tan bien pueden ser fenomenales, pero si ya están desgastados y no son útiles, lo mejor es deshacerse de ellos.

Una prenda que sale y otra que entra es uno de los trucos para darle espacio a lo nuevo.

3. El dilema de las tallas

El cuerpo va cambiando y esto implica que las prendas también. Guardar cierto tipo de vestuario que no se ajusta a las medidas puede ser una acción que esté contribuyendo a aglomerar piezas sin sentido. Si las sacas, quizá haya otras personas que le puedan dar un mejor uso.

4. Objetos averiados

Aplica para joyas, gafas, bolsos e incluso prendas. Lo que está roto es inservible. Si lo has dejado en el clóset pensado en arreglarlo y ha pasado el tiempo y no lo logras, es momento de decir adiós.

En este sentido, un pantalón que se manchó al lavarse o con un alimento debe llegar a su fin y darle paso a algo mejor.

5. Zapatos que hacen daño

Este es uno de los problemas más comunes. Un par de zapatos nuevos pueden ser la justificación por la que no los tiras del armario, pero si te causan dolor y aún no te acomodas a ellos, lo mejor es darles paso afuera.

6. Prendas sin propósito

Las compras por impulso o regalos no deseados suelen ser causantes de que el vestidor se llene de piezas innecesarias o que no vayan con el estilo propio. Lo cierto es que si no te gusta, no hay posibilidad de que te la pongas, y eso es una razón más que suficiente para no seguir guardándola.

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Consejos para deshacerte de las cosas de tu armario que deberías tirar

Marie Kondo, autora del libro “La magia del orden, herramientas para ordenar tu vida”, ha planteado muchas lecciones en torno al mantenimiento de una existencia en equilibrio. Su método se resume en que hay que cuestionar el uso de las prendas; si emocionan y si son funcionales. Además, propone agradecer por cada pieza que se va.

En este sentido, también existen otras ideas básicas. Una de ellas es que el espacio del armario nos determine qué cantidad de piezas podemos guardar. La otra es el armario cápsula, el que está creado a partir de diseños básicos y clásicos o en colores neutros, por regla general más atemporales.

Tomar el papel de estilista es otra forma de deshacerse de las cosas que ya no funcionan. Sacar toda la ropa y armar looks es una idea creativa para definir qué es necesario y qué no. Esto también es válido para encontrar atuendos que se ajusten a cada temporada, hacer una lista de los infaltables y organizar con mayor orden el armario.

Si bien todas estas acciones pueden funcionar, hay que hacerse la pregunta sobre si realmente lo necesitamos. Es el primer paso para un consumo más responsable, el que debe ir encaminado a suplir las verdaderas necesidades.