Las mejores cosas que puedes hacer para salir de la rutina

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña

Escrito por Elena Martínez Blasco

Última actualización: 06 julio, 2023

¿Sientes el hastío de una existencia sin emociones? ¿Te gustaría tener una vida intensa y no sabes por dónde empezar? ¿Crees que has tocado fondo, que no puedes salir de la rutina y todo se ha vuelto aburrido? No desesperes. Con voluntad, todo puede mejorar.

Debes tener en cuenta que no todos los días van a ser como si vivieras en un parque de atracciones. Sin embargo, existen muchas cosas que solo dependen de ti para poder cambiar. No te resignes a una trayectoria que no te satisfaga. Toma las riendas de tu vida y aprovecha cada momento.

Profundicemos.

¿Qué cosas puedes hacer para salir de la rutina?

Cada noche, la última y cada mañana, la primera

Salir de la rutina empieza con la intención de maximizar el tiempo, de valorar el instante. Muévete, dale acción a tus días. Existe una famosa locución latina que dice: Carpe diem. Es decir, aprovecha el momento.

Vive como si no hubiera un mañana. Usa la cubertería buena, ponte tu mejor traje. No esperes a un futuro que nunca llega para hacer las cosas que anhelas.

Piensa menos y actúa más. Deja de valorar los pros y contras de cada decisión. Trata de arriesgarte, rompe tus propios esquemas mentales. Lánzate a la piscina, ríete de ti mismo y, sobre todo, disfruta. Sé feliz.

Tienes 365 oportunidades al año para empezar algo genuino, algo auténtico, que te emocione. Siente cada noche como si fuera la última y cada mañana como si fuera la primera.

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El enemigo se llama pereza

Muchas veces la pereza nos roba la vida. Siempre hay una excusa para no movernos, para seguir tumbados en el sofá esperando a que todo se resuelva por sí mismo. Pues no. Haz una autocrítica y toma conciencia del tiempo de inactividad que consumes.

Para salir de la rutina hay que afrontar la situación y ser honestos con nosotros mismos. Debemos dejar de poner peros a todo.

Televisión y sofá en dosis moderadas puede ser reparador e, incluso, constructivo. No obstante, el mal hábito de la inactividad, la pereza y la desidia atraen estados psicológicos depresivos. La rutina convierte nuestra vida en un riel de tren, en el cual todo es mecánico e idéntico día tras día.

Debemos esforzarnos y ponernos pequeños retos que nos obliguen a dominar la pereza.

Deja de echarle la culpa al mundo

Deja de lamentarte por todo. Es más útil encender una vela que maldecir la oscuridad. Cada uno posee unas circunstancias diferentes y se trata de aprovechar al máximo lo que se tiene.

Sin dinero también se pueden hacer muchas cosas. Poner excusas o echarle la culpa al mundo de nuestra aburrida rutina no nos aporta nada positivo. Una actitud inconformista, desafiante, enérgica y positiva te llevará a donde seas capaz de imaginar.

Es muy común escuchar a personas en una actitud de queja constante. Como si el mundo les debiera parte de la felicidad que no encuentran. Y, sin duda, eso es un error.

Cambia lo que no te guste de tu vida. Empieza por salir de la rutina y construye la realidad a tu manera. Son pequeños cambios los que te ayudarán a ponerte a prueba.

Salir de la zona de confort

Otro factor que debes tener en cuenta para salir de la rutina es abandonar tu zona de confort. Ese lugar donde estimas todo estable y te sientes protegido debe ampliarse, por tu propio bien.

Cualquier opción que te fuerce a salir de casa te ayudará a abrir tu mente. Compra alguna prenda de ropa que no sea tu estilo, ¡arriésgate! Llévate al límite.

El deporte también es una buena opción. Y, si te falta fuerza de voluntad, trata de hacer cosas en grupo.

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Empezar a salir de la rutina

A continuación te damos unas sencillas ideas para empezar a salir de la rutina:

• Sé positivo.
• Haz amigos.
• Visita lugares nuevos.
• Inscríbete en actividades.
• Intenta relacionarte con nuevas personas.
• Vuelve a casa andando, por calles diferentes.
• Haz actividades constructivas durante el día.
• Demuéstrate a ti mismo que puedes hacerlo y hazlo.
• Si tienes pereza para todo, imponte un horario y cúmplelo.
• Lleva a tu mascota a pasear a un sitio nuevo y juega con ella.
• Trata de llevar una buena alimentación que te aporte energía.

El poder del cambio está en tu interior

No lo dudes, el poder reside en ti mismo. No te abandones a la pereza o tu vida irá pasando sin pena ni gloria hasta que un día descubras que ya no tienes nada por lo que luchar. Aprovecha cada soplo de aire para buscar aquello con lo que sueñas y no dejes jamás que los demás vivan tu vida por ti.

Si consideras que necesitas ayuda profesional para ponerte en marcha y poner rumbo hacia la dirección correcta, pídela. No hay nada absolutamente malo en solicitarla. Para ello, puedes optar por la modalidad presencial u online.