Los rábanos… ¡Muy buenos para tu hígado y vesícula!

Escrito y verificado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli

Escrito por Valeria Sabater

Última actualización: 24 mayo, 2023

Los rábanos tienen un sabor fuerte y dan un atractivo toque a las ensaladas. Su color y, sobre todo, ese gusto amargo que deja en la boca ya nos ofrecen una pista de que se trata de un alimento adecuado para el hígado.

Es interesante saber que todos los vegetales que dejen esa amargura en nuestras papilas gustativas consiguen que nuestro organismo funcione mucho mejor. Estos, por lo general, estimulan la bilis, desintoxican el organismo y favorecen la absorción de nutrientes.

Por lo tanto, no es recomendable evitar el consumo de esos alimentos amargos, como pueden ser las endivias, el perejil y sobre todo los rábanos. ¡Te sorprenderás de todo lo que pueden hacer por ti!

La importancia de consumir rábanos de forma regular

¿Eres de las que siempre incluye unas laminitas de rábanos en sus ensaladas? Si es así, debes saber que estás cuidando no solo de tu salud general, sino que también estás optimizando tu función hepática, como lo muestra el estudio.

Hay a quienes les incomoda su presencia en cualquier receta. El sabor amargo o ligeramente ácido de los rábanos no es siempre muy agradable; de ahí que se acaben apartando.

No obstante, para otros, ese contraste es, en realidad, un aliciente en la mayoría de sus platos. Por eso es que se incluye siempre de forma natural; puesto que es el mejor modo en que podemos beneficiarnos de ellos. Veamos algunos beneficios que se encierran en este vegetal tan singular e interesante.

1. Nutrientes de calidad

¿Sabías que el rábano se usa desde la antigüedad como un alimento medicinal? Así es; ha servido siempre como digestivo y como medio para tratar y curar el hígado.

En Oriente, por ejemplo, cuentan con la variedad de rábanos de color verde, con la que elaboran el siempre estimulante ‘wasabi’. Este condimento tiene la particularidad de dejarnos su sabor picante en la boca solo durante unos segundos para, después, desaparecer.

Hay muchos tipo de rábanos, y resulta curioso, por ejemplo, saber que el que mayores propiedades curativas suele tener es el rábano negro. ¿Lo has probado alguna vez?

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Estos son algunos de los beneficios nutricionales que aporta este pequeño vegetal:

• Su composición es rica en fibra.
• Dispone de casi 20 aminoácidos.
• Es rico en vitaminas del grupo B, y vitamina C.
• Contiene yodo, magnesio y azufre.

2. Un aliado natural para la salud del hígado y la vesícula

Las propiedades medicinales de los rábanos se deben, ante todo, a su virtud para cuidar del hígado y la vesícula. Todo ello se debe a sus componentes azufrados: los glucosinolatos, que elevan la producción de bilis.

Además, el consumo regular de rábanos nos permite desintoxicar la vesícula biliar y facilitar su trabajo durante las digestiones. Además, son muy diuréticos y cuidan de que no se almacenen materiales en los riñones; así, evitan la formación de cálculos renales.

¿Sufres de digestiones pesadas? ¿De hinchazones intestinales o gases? Incluye siempre rábanos frescos en tus ensaladas y evitarás, además, el clásico estreñimiento.

3. El rábano es un buen antiséptico

El rábano es muy parecido a las cebollas. Ese sabor azufrado encierra en realidad un sinfín de beneficios de los que deberíamos aprovecharnos un poco más, como por ejemplo:

• El rábano tiene propiedades antisépticas muy adecuadas para tratar casos de bronquitis, asma o tos irritativa.

• Sus componentes azufrados volátiles son muy adecuados para limpiar nuestros intestinos y el colon; de ahí que los rábanos se incluyan entre los alimentos recomendados para prevenir distintos tipos de cánceres, como el de colon, estómago o pulmón.

• Los glucosinolatos, presentes también en las verduras crucíferas, nos ayudan a luchar contra la aparición del cáncer.

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Receta del jugo de rábano para mejorar tus digestiones

¿Qué necesito?

• 2 rábanos.
• 1 vaso de agua (200 ml).
• El jugo de una naranja.

¿Cómo prepararlo?

• Limpiar bien los rábanos. Como mencionamos, los que contienen más propiedades medicinales son los rábanos negros; no obstante, puedes utilizar los rojos o los blancos.

• Cortarlos en trocitos y proceder a licuarlos junto con el vaso de agua.

• Hacer el jugo de naranja con el exprimidor.

• Mezclar los dos licuados, el de naranja y el de rábanos.

¿Cómo debo tomarlo?

Tómalo 20 minutos antes de tu comida principal del día. Si bien es cierto que el sabor será algo fuerte y picante, sienta muy bien y te va ayudar a hacer mejor la digestión y a absorber los nutrientes de forma óptima.

Puedes tomar este licuado 3 veces por semana. Más allá de ingerirlo, claro, no dudes en incluir algunos rabanitos frescos en tus ensaladas. ¡Tu salud lo merece!