¿Por qué es malo reventar la hidradenitis supurativa?
Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina
La hidradenitis supurativa o hidrosadenitis es una afección crónica. Su principal manifestación son unos bultos dolorosos que se forman debajo de la piel, al obstruirse los folículos pilosos. Las causas son desconocidas, aunque hay factores de riesgo asociados, como la obesidad.
Y si bien no existe una cura, hay diversos tratamientos que se aplican para reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente. Asimismo, pueden tomarse algunas precauciones para prevenir brotes, evitando los desencadenantes.
Por otra parte, debe tenerse en cuenta que no es conveniente reventar la hidradenitis supurativa, es decir, los bultos. Esto podría acarrear infecciones, entre otros problemas.
¿Cuáles son los síntomas de la hidradenitis?
La incidencia estimada de hidradenitis o hidrosadenitis supurativa varía según las regiones. De acuerdo con algunas investigaciones, entre el 1 y el 4 % de la población presenta esta afección. En otras fuentes se señala que hay 1 caso cada 300 personas.
Es más común en hombres. También se observa con más frecuencia en personas obesas o con sobrepeso y fumadores. Se puede iniciar desde la pubertad hasta los 40 años. Con la edad, decrece la incidencia.
También conocida como acné inverso, es una enfermedad crónica que afecta los folículos pilosos. Su principal manifestación son unos bultos que se forman debajo de la piel, los cuales suelen ser dolorosos y llenos de pus. Estos abscesos pueden presentar orificios redondeados, pero sin un punto central, como sí sucede con los forúnculos.
Los bultos aparecen en áreas con gran cantidad de glándulas sebáceas y sudoríparas, sobre todo donde la piel roza con la piel. Las localizaciones más frecuentes son las siguientes:
- Axila.
- Glúteos o zona perianal.
- Ingle.
- Región submamaria.
Otros síntomas incluyen picazón, enrojecimiento, sensibilidad e inflamación. Las protuberancias, al abrirse, pueden drenar pus con mal olor.
Esta enfermedad no es contagiosa ni se transmite sexualmente; tampoco se debe a una mala higiene.
No se tiene clara cuál puede ser la causa. Hay factores de riesgo asociados, como la nicotina y la obesidad. Respecto a esto último, se tiene la hipótesis de que en las personas con más peso se produce mayor fricción de piel con piel.
Asimismo, en los pacientes con hidradenitis supurativa pueden presentarse otras condiciones médicas:
- Acné.
- Diabetes.
- Celulitis disecante.
- Enfermedad de Crohn.
- Síndrome de ovario poliquístico.
¿Cómo se puede tratar?
No hay cura para la hidradenitis supurativa. Sin embargo, el diagnóstico temprano ayuda a evitar que empeore.
Entre las opciones de abordaje médico se tienen las siguientes:
- Terapias con luz.
- Retinoides para combatir el acné asociado.
- Drenaje de los abscesos de modo quirúrgico.
- Corticosteroides para reducir dolor e inflamación.
- Antiinflamatorios, como ibuprofeno o naproxeno.
- Antibióticos (orales o tópicos): amoxicilina, tetraciclina, eritromicina.
- Píldoras anticonceptivas (cuando hay problemas hormonales o síndrome de ovario poliquístico).
Otros cuidados para la piel
Además de los tratamientos mencionados, el paciente con hidradenitis supurativa puede mantener otros cuidados y tomar diversas medidas, siempre consultando con el médico:
- Usar ropa holgada para evitar roces.
- Mantenerse en el peso adecuado.
- Colocar compresas tibias en el área afectada.
- Aplicar productos de limpieza tópicos (antibacterianos y antisépticos).
- Evitar toallitas húmedas con alcohol.
- Ser cuidadoso al rasurarse.
- Usar técnicas de depilación láser.
¿Por qué es malo reventar la hidradenitis supurativa?
Es posible que la incomodidad que se genera por la enfermedad resulte intolerable. Debido a ello, algunos pacientes toman la iniciativa de reventar la hidradenitis supurativa.
Y aunque en ocasiones, por la presión al sentarse o al aplicar una compresa, dichos bultos pueden romperse por sí solos, no es recomendable que la persona lo haga.
Cierto es que se logra aliviar el dolor y la tensión. Sin embargo, se corre un grave riesgo de infección, ya que puede haber bacterias en la piel o en las manos al reventar la hidradenitis supurativa.
Por otra parte, la curación y la cicatrización continuas hacen que el área afectada se engrose, se torne rígida y dura al tacto. Se altera el aspecto estético.
Además, se pueden formar fístulas, que son espacios o pasajes huecos en el tejido. Estas causan dolor y requieren de un procedimiento quirúrgico para ser reparadas.
Como se mencionó antes, todas estas situaciones pueden ocurrir de manera natural cuando se sufre de hidradenitis supurativa. No obstante, al reventar los bultos se tiende a agravar el problema.
Otras complicaciones
Cuando optamos por reventar la hidradenitis supurativa, son diversas las complicaciones generales que se pueden presentar. Entre ellas tenemos a las siguientes:
- Coalescencia de fístulas, con destrucción del tejido subcutáneo.
- Úlceras crónicas.
- Linfedema crónico.
También se ha registrado que el trauma ocasionado puede alterar las células de la piel. A largo plazo, aunque no siempre, podría desarrollarse carcinoma de células escamosas o un adenocarcinoma mucosecretante en las regiones que quedaron con cicatrices profundas.
Mejor prevenir y no reventar la hidradenitis supurativa
El pronóstico varía con la gravedad, así como con el tratamiento y el estilo de vida. En algunas personas es posible que haya brotes recurrentes por toda su vida. En otras, la enfermedad mejora con fármacos o con cirugía. También puede remitir por sí sola.
Dado que no se conocen con claridad las causas de la hidradenitis supurativa, tampoco es posible saber si se puede prevenir. A lo sumo, es posible evitar que se agraven los brotes o que haya ciertas complicaciones.
En tal sentido, se debe ser cauteloso tanto con los productos que se usan como con la ropa, evitando las prendas que generan roce o fricción. Esto último no necesariamente se refiere a ropa ajustada, sino más bien a la que no le queda bien a la persona.
Asimismo, se recomienda mantener siempre un peso adecuado, una buena higiene de las áreas afectadas y evitar fumar. Por último, pero no menos importante, no se deben manipular los bultos ni hacer presión para reventarlos.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Achenbach R, Greco C. Hidradenitis supurativa. Rev. argent. dermatol. 2013; 94(4): 6-10.
- Arena G, Maradeo R, Michelena M, et al. Hidradenitis supurativa con transformación carcinomatosa. Med. cután. ibero-lat.-am. 2012; 40(6): 184-190.
- García-Martínez F, Pascual J, López-Martín I, et al. Actualización en hidrosadenitis supurativa en Atención Primaria. SEMERGEN - Medicina de Familia. 2017; 43(1): 34-42.
- Gracia Cazaña L, Berdel Díaz J, Martín Sánchez I, et al. Systematic Review of Light-Based Treatments for Hidradenitis Suppurativa. Actas Dermo-Sifiliográficas. 2020; 111(2): 89-106.
- Martorell F, García D, Jiménez-Gallo J, et al. Update on Hidradenitis Suppurative (Part II): Treatment Actas Dermo-Sifiliográficas. 2015; 106(9): 716-724.
- Martorell A, Caballero Y, González Lama D, et al. Manejo del paciente con hidradenitis supurativa, Actas Dermo-Sifiliográficas. 2016; 107(2): 32-42.
- Shahi V, Alikhan A, Vazquez B, Weaver A, Davis M. Prevalence of hidradenitis suppurativa: A population-based study in Olmsted County, Minnesota. Dermatology. 2014; 229: 154-158.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.