¿Cómo funciona el método de planificación por temperatura basal?

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 julio, 2023

El método de planificación por temperatura basal es una forma de planificación familiar que estima el momento de mayor fertilidad en la mujer. Se considera útil para hacer un seguimiento de los ciclos menstruales, ya que durante la ovulación se observa un incremento de la temperatura. ¿Cómo funciona exactamente?

En primer lugar, cabe recordar que la temperatura basal es aquella que se mide cuando el cuerpo está en reposo. Por eso, para emplearla como planificación se debe medir antes de levantarse cada mañana de la cama. Es justo con este seguimiento que es posible predecir los mejores días para concebir. Veamos más al respecto.

¿Qué es la temperatura basal?

La temperatura basal hace referencia a la temperatura corporal natural más baja que presenta el cuerpo cuando está en un estado de reposo; por ejemplo, durante el periodo de sueño o justo al despertar, antes de salir de la cama. En el caso de las mujeres, es un parámetro que sufre variaciones durante el ciclo menstrual.

Cuando se produce la ovulación, aumenta la secreción de progesterona. Es una de las hormonas reproductivas que interviene en el embarazo. Además, es la que causa un aumento de la temperatura corporal cuando el óvulo sale del ovario. Se estima que dicho incremento varía entre 0,3 y 0,5 grados centígrados.

La ovulación es ese momento que se asocia a una mayor fertilidad y a mayores probabilidades de un embarazo. Por tal razón, llevar un registro de la temperatura basal a lo largo del ciclo puede ser beneficioso, sobre todo entre aquellas que desean concebir.

Esta medida estima cuáles son los días más fértiles de la mujer. Así, la pareja puede planificar relaciones sexuales para esos días cuando tienen la intención de lograr un embarazo. 

¿Cómo se mide la temperatura basal?

La temperatura basal se debe medir justo al despertar. Esto se puede llevar a cabo de diferentes formas; por vía oral, vaginal o rectal. Lo ideal es que se utilice siempre la misma forma y que la temperatura se mida cada día. De hecho, debe ser a la misma hora.

En el caso de que se realice por vía oral, el termómetro debe colocarse bajo la lengua. Por vía rectal se recomienda introducirlo despacio, empleando un lubricante para que sea menos molesto. Si se elige la vía vaginal, también se puede hacer de esta manera.

Es necesario haber dormido por lo menos tres horas. Todos los datos recopilados deben apuntarse día a día; desde la hora de la medición hasta la temperatura en sí misma.

¿Cómo se planifica con esta técnica?

El método de planificación por temperatura basal es bastante utilizado en la actualidad. De acuerdo con una publicación de la Clínica Mayo, sirve para determinar cuáles son los mejores días para concebir, o bien, para saber en qué momento no se deben tener relaciones sexuales sin protección.

Para realizarlo de manera correcta, es necesario que la mujer lleve un control durante varios ciclos de su temperatura. El punto de mayor fertilidad ocurre los dos o tres días antes de que la temperatura se eleve.

Esto se debe a que los espermatozoides pueden vivir durante casi 72 horas dentro del aparato reproductor femenino. Por eso, una vez se conoce más o menos cuándo es el día del ciclo que se eleva la temperatura, se pueden planificar las relaciones sexuales.

De hecho, algunas parejas emplean este método como anticonceptivo natural, para determinar qué días pueden tener sexo sin protección. No obstante, no es una estrategia recomendable, ya que el riesgo de embarazo sigue siendo alto.

Para evitar la concepción siguen siendo preferibles otros métodos más eficaces, como el preservativo, que además protege frente a posibles enfermedades de transmisión sexual.

Consejos para planificar con el método de temperatura basal

Para planificar el embarazo con el método de la temperatura basal es importante tener en cuenta ciertos aspectos. Como hemos mencionado antes, es fundamental tomar la temperatura todas las mañanas, antes de salir de la cama. Además, el cuerpo debe haber permanecido en reposo por mínimo tres horas seguidas.

De lo contrario, es posible que aparezcan variaciones en la temperatura que no se corresponden realmente con la ovulación. Se recomienda tomarla utilizando siempre el mismo método. Es decir, si se comienza por vía vaginal, hacerlo siempre por esta vía.

Según explica una publicación de Planned Parenthood, el registro se debe hacer todos los días. Para que sea más sencillo, se puede ir marcando la temperatura en una hoja cuadriculada. Los días de la ovulación, la temperatura está un poco más alta y se mantiene durante unos tres días.

Algunas mujeres utilizan el método de la temperatura basal para saber si están o no embarazadas. Y es que si la temperatura se mantiene elevada durante más de 18 días, puede ser indicativo de embarazo.

¿Cómo elegir un buen termómetro basal?

La medición de la temperatura basal se ha perfeccionado en los últimos años. Hay mujeres que utilizan termómetros normales, de los que se suelen tener en casa. No obstante, hay otros más precisos que se pueden adquirir por un precio razonable.

Los termómetros que se comercializan solo para este método tienen unas características concretas. Por ejemplo, los digitales suelen constar con una memoria. Es decir, permite recuperar la temperatura anterior. Así no hay necesidad de apuntarla en la hoja del registro justo en ese momento.

Además, suelen ser muy precisos. De esta manera, pueden detectar variaciones de una décima de grado. En general, son más fáciles de utilizar que los de vidrio. Su principal problema es que la batería tiende a agotarse relativamente rápido.

Ahora bien, dentro de los termómetros basales digitales también se distinguen diferentes modalidades. Una de las opciones es el termómetro basal inteligente Femometer. Tiene una precisión muy alta y se puede sincronizar con el teléfono mediante Bluetooth.

Además, la memoria alcanza los 300 días y la lectura se realiza en unos 90 segundos. Otra opción es el termómetro basal digital multifunción i-Snow Med. Su memoria es menor, pero consta de otros elementos útiles.

Por ejemplo, tiene una alarma incorporada que ayuda a establecer un recordatorio de cuándo se debe tomar la temperatura. También presenta una pantalla retroiluminada que facilita las lecturas.

Riesgos del método de temperatura basal

El método de planificación por temperatura basal, cuando se utiliza para buscar un embarazo, no conlleva ningún riesgo. No obstante, es un método que requiere paciencia y constancia. Además, requiere disponibilidad para poder mantener relaciones sexuales en los días de máxima fertilidad.

Lógicamente, no se debe utilizar ningún anticonceptivo en esta etapa. Por otro lado, cuando se utiliza para prevenir un embarazo, sí supone riesgos. En primer lugar, es fundamental entender que no es un método exacto. Por eso, pueden aparecer embarazos no deseados.

Del mismo modo, tampoco protege de las infecciones de transmisión sexual ni se considera un anticonceptivo efectivo. Por tales motivos, no se recomienda su uso con este tipo de fines.

Las mujeres que sí busquen lograr un embarazo deben saber que hay otros factores que pueden influir en la temperatura basal. El estrés, un descanso inadecuado o los ciclos de sueño interrumpidos pueden aumentar la temperatura.

Lo mismo ocurre cuando hay algún tipo de enfermedad que provoque fiebre. Incluso, beber alcohol, viajar o tomar ciertos fármacos puede hacer que la temperatura basal se incremente.

¿Qué hay que recordar?

El método de planificación de embarazo por temperatura basal es sencillo y natural. Puede ayudar a predecir los días de mayor fertilidad de la mujer. De esta manera, se puede intentar sincronizar las relaciones sexuales con esos días para tener una mayor probabilidad de embarazo.

Sin embargo, debe hacerse de forma precisa y siguiendo ciertos consejos. No hay que olvidar que esta técnica no se recomienda como método anticonceptivo, ya que no es exacto ni efectivo. Antes de practicarlo, se recomienda consultar al ginecólogo o al especialista. Este ayudará a resolver todas las dudas.