Mi pareja es alcohólica: ¿Cómo le puedo ayudar?

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña

Escrito por Virginia Martínez

Última actualización: 06 julio, 2023

El alcoholismo es un trastorno grave que afecta a muchas personas. Además de serios problemas de salud, normalmente también conlleva problemas en otros ámbitos de la vida de la persona alcohólica, como el laboral, el personal, el familiar, etc.

Por eso, una vez un alcohólico ha reconocido su problema y ha decidido comenzar una terapia, necesita la ayuda de las personas que se encuentran a su alrededor, de todo su apoyo, empatía, comprensión y paciencia. Si tu pareja es alcohólica, ¿cómo puedes ayudarla?

Alcoholismo

El alcoholismo es un trastorno que genera dependencia al alcohol. En este sentido, no es lo mismo que el abuso del alcohol, que puede ser puntual.

En efecto, el alcoholismo es considerado una enfermedad, ya que presenta una fuerte dependencia física, es decir, no puede dejar de beber porque el síndrome de abstinencia se lo impide. Además, el alcohólico necesita cada vez beber más para ser capaz de sentir el mismo efecto, pues su organismo se va adaptando a la ingesta de alcohol.

Por otra parte, el alcoholismo también genera una dependencia psicológica, de modo que dejar esta adicción se convierte en algo realmente difícil de conseguir sin ayuda de profesionales cualificados.

Como toda adicción, el alcohol puede provocar serios problemas en la salud y también en la vida de la persona alcohólica. En efecto, el alcoholismo tiene repercusiones físicas, pero también psicológicas y no solo en la persona adicta, sino también en quienes se encuentran a su alrededor.

Por esta razón, es imprescindible reconocer el problema, buscar ayuda y comenzar una terapia. Sin embargo, ¿qué puedes hacer tú si tu pareja es alcohólica? ¿Cómo le puedes ayudar? A continuación, te damos algunos consejos

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Ayuda a la persona alcohólica a darse cuenta

Solo la persona adicta puede tomar la decisión de iniciar una terapia y desintoxicarse. En este sentido, las personas de su alrededor solo pueden advertirle, pero en ningún caso, obligarle.

Por eso, siempre de una manera adecuada, puedes ayudarle a darse cuenta de que el alcohol es un problema. Este acercamiento debe ser siempre desde la ayuda y el apoyo, y jamás desde una posición de ataque o con el objetivo de culpabilizar al adicto.

Debes evitar decir frases como “cuando bebes eres insoportable o haces el ridículo”. Por el contrario, debemos aproximarnos desde la empatía, la inteligencia emocional y la delicadeza, sin ataques directos. Así, es mejor hablar en términos de “sé que es duro…”, “te entiendo, pero…”.

Además, debes tener en cuenta que este acercamiento para hablarle de la adicción debe realizarse siempre en un momento de sobriedad. De nada servirá hacerlo cuando se encuentre bajo los efectos del alcohol.

No obstante, debes tener en cuenta que muchos adictos niegan rotundamente su adicción. En este sentido, el hecho de ayudarles a darse cuenta puede producir que se pongan en tu contra, considerando que les estás acusando ο atacando.

Por todo ello, ten siempre en cuenta que no puedes obligar a nadie a curarse si no lo quiere. Tu papel es de ayudar a concienciarse de un problema, pero nada más. Si la otra persona insiste en no querer curarse o no comprender que existe un problema, no debes culparte por ello.

Nunca ayudes a beber a una persona alcohólica

Es posible que tu pareja te pida favores de forma que seas tú quien vaya a buscar la bebida. Tal vez porque se siente avergonzado si le ven salir con más de una botella, tal vez porque está mareado o por otras razones, prefieren pedirte que seas tú quien vaya.

Sin embargo, debes negarte en rotundo. En efecto, debes dejar claro que no estás de acuerdo con su adicción y que la consideras un problema. Por tanto, si quiere beber, tendrá que ser él mismo quien adquiera el alcohol. No debes colaborar en que se mantenga su adicción.

Del mismo modo, puede que tu pareja busque excusas para salir y tomar una copa. Si intuyes que su intención es beber, debes ser claro y asertivo y negarte. Insistimos: no debes colaborar en mantener su adicción. 

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Busca ayuda profesional

El índice de alcohólicos crónicos que ha conseguido dejar su adicción sin ayuda profesional es muy bajo. Por eso, si tu pareja se ha concienciado de que tiene un problema y trata de buscar ayuda, apóyale.
Existen terapeutas especializados en adicciones que podrán guiarle en este gran paso y difícil camino. También existen asociaciones, como Alcohólicos Anónimos, que brindan apoyo a quienes padecen este tipo de adicciones.

Por tu parte, puedes involucrarte, buscando un especialista, acompañándole, informándote y hablando con el terapeuta sobre cómo debes actuar para que la desintoxicación llegue a ser exitosa. 

Además, puedes buscar actividades para realizar juntos en las que el alcohol sea incompatible. Por ejemplo, ir juntos a clases, al gimnasio, a pasear. Recuerda que el adicto debe volver a educarse, es decir, tiene que aprender a divertirse sin el alcohol.

Evitar situaciones de estrés o que despiertan la necesidad de beber

Esto es siempre aconsejable, pero mucho más cuando el adicto se encuentra en terapia, a fin de evitar recaídas. Debemos ser capaces de reconocer las situaciones que estresan al adicto y, por tanto, tratar de evitarlas. En efecto, el estrés le llevará a querer beber, complicando su recuperación.

Por tanto, debemos estar atentos y ser previsores a fin de evitar tales situaciones o momentos a la persona alcohólica. No es fácil. Sin embargo, tu pareja necesita de todo tu apoyo y paciencia. No le culpes, está enfermo. No le ataques, tiene problemas. Lo que debes hacer es comprenderle y brindarle tu apoyo, estar ahí y colaborar en su recuperación.

Además, recuerda siempre que no puedes ayudar a quien no quiere ayudarse. No te sientas culpable si no lo consigues, has hecho lo que podías hacer.