Logo image
Logo image

Mioclonías del sueño en los niños

4 minutos
Las mioclonías son contracciones musculares bruscas, de breve duración y de aparición esporádica, que pueden presentarse en algunos niños durante las horas de sueño. Suelen ser benignas y no afectan la salud de los pequeños.
Mioclonías del sueño en los niños
Nelton Abdon Ramos Rojas

Escrito y verificado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas

Última actualización: 13 agosto, 2024

Las mioclonías del sueño en los niños son un trastorno benigno caracterizado por movimientos involuntarios de las extremidades que, por lo general, se presentan mientras el niño duerme. Este tipo de convulsiones suelen ser bruscas, irregulares, ocasionales y de corta duración.

Generalmente, suelen presentarse en las primeras semanas de vida del bebé y no duran más allá de los siete meses. No obstante, se han reportado casos de niños mayores que las padecen. Conforme va pasando el tiempo se hacen más esporádicas hasta que desaparecen por completo.

A pesar de los estudios que se han realizado para determinar por qué se producen las mioclonías del sueño en los niños, aún se desconocen sus causas. También existe la teoría de que hay una relación de carácter genético. Asimismo, se ha determinado que se produce en el sistema nervioso central, pero no tienen un fundamento patológico.

Tipos de mioclonías del sueño

Estos movimientos involuntarios son habituales en el recién nacido.

Dependiendo de su localización, duración y otros factores, las mioclonías se clasifican en focales, multifocales, segmentarias o generalizadas. También se clasifican en fisiológicas (producidas durante el sueño) o patológicas (causadas por una enfermedad).

Mioclonías benignas del sueño

Como señalábamos anteriormente, las mioclonías del sueño en los niños suelen ser benignas y no representan ningún perjuicio para su salud. Se caracterizan por espasmos no epilépticos en niños sin problemas psicomotores. Son muy habituales durante el primer año de vida.

Mioclonía fisiológica

Este tipo es muy frecuente al inicio del sueño y se describe como una sacudida fuerte producto de una sensación de caer en el vacío para luego despertarse bruscamente. Existen adultos sanos que refieren haber tenido esta sensación.

Adicionalmente, el hipo también está clasificado dentro de este tipo de mioclonías, como señala el Manual de Diagnóstico y Terapéutica Médica.

Mioclonía esencial

Es producto de una patología crónica genética caracterizada por sacudidas focales, generalizadas o segmentarias que se incrementan cuando el paciente está bajo estrés. Son esporádicas y pueden surgir antes de los 20 años de edad. Con frecuencia se manifiestan en el rostro, el tronco y los músculos proximales.

Mioclonías secundarias

Derivan de otras enfermedades como la encefalitis viral, encefalopatías e hipoxia entre otras. Se debe determinar la fuente que las provocan para poder aplicar el tratamiento adecuado.

Quizá te interese: Niños que quieren dormir en la cama de los padres

Diagnóstico y tratamiento de las mioclonías del sueño en los niños

En caso de duda, consultar con un pediatra será la primera solución que debemos aplicar en caso de mioclonías.

Es normal sentirse preocupada si notas este tipo de espasmos en tu bebé. Por ello, cuando acudas al pediatra para la evaluación de control de tu hijo, coméntale lo sucedido. El especialista efectuará una revisión del estado general del pequeño y podrá determinar si la mioclonía cursa con encefalopatía o no.

De ser necesario, te referirá con un neurólogo. No obstante, en caso de que le diagnostique mioclonía de la infancia, no te alarmes, pues esto no significa que tu hijo sufrirá epilepsia.

El tratamiento, por su parte, se orienta a calmar los síntomas con fármacos antiepilépticos principalmente, como señala este artículo publicado en los Archivos Argentinos de Pediatría. Las benzodiacepinas, el ácido valproico y el levetiracetam han resultado efectivos para pacientes con epilepsias mioclónicas progresivas y severas.

Para el caso de las mioclonías benignas del sueño, existen algunas recomendaciones para mitigar los efectos de las mismas.

Quizá te interese: El uso de chupete y biberón: ¿Es perjudicial para los niños?

Consejos para superar las mioclonías

Los siguientes consejos pueden ayudar a mejorar el ambiente para el sueño. No obstante, no sustituyen en absoluto la consulta con el médico. Por otra parte, es recomendable poner en práctica todas las recomendaciones que indique el especialista.

Crear un ambiente armonioso

Los bebés pequeños necesitan dormir, por lo menos, 16 horas. Para que tu hijo pueda descansar, debes evitar en la medida de lo posible las alteraciones del entorno que puedan perturbar su sueño.

Esto incluye una habitación ambientada con una luz tenue que invite al descanso. Si no dispones de una cuna, es prudente que coloques al niño entre dos almohadas en el centro de la cama.

Evitar molestias innecesarias

El sueño es esencial para el correcto desarrollo del bebé, por lo tanto, tienes que evitar despertarle sin necesidad. Es importante colocarle un pañal limpio y seco justo antes de llevarlo a dormir.

Mantener un tono bajo de voz y del volumen de la televisión también le ayudará a conseguir un sueño profundo.

Establecer horarios para las siestas diurnas

Aunque ya determinamos que el sueño resulta muy beneficioso para los bebés, es importante instaurar rutinas para las siestas diarias.

Esto se hace con el objetivo de que el pequeño pueda dormir de forma profunda durante la noche. En los niños, las mioclonías del sueño suelen presentarse en la fase REM.

Ahora que ya conoces más acerca de este trastorno benigno del sueño, no dudes en consultar cualquier duda que te surja al respecto con un especialista. Él sabrá mejor cómo actuar en el caso de que tu pequeño lo padezca.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.