2 de cada 10 muertes por tabaco en España son en mujeres: 5 efectos de fumar en la salud femenina

Los últimos datos de las estadísticas ponen en alerta a la población femenina. La infertilidad, varios tipos de cáncer y hasta la depresión se asocian con el consumo de cigarrillo.
2 de cada 10 muertes por tabaco en España son en mujeres: 5 efectos de fumar en la salud femenina
Leonardo Biolatto

Escrito y verificado por el médico Leonardo Biolatto.

Última actualización: 25 mayo, 2023

La Sociedad Española de Epidemiología dio a conocer sus últimos datos sobre el consumo de tabaco y sus efectos en España. Aunque es alentador notar que cada vez menos personas fuman, se registró que casi 2 de cada 10 muertes atribuibles al tabaco suceden en mujeres.

Si bien las campañas de concientización tienen incidencia positiva en el hábito, todavía queda camino por recorrer. Recordemos que el hábito de fumar es responsable de 63 000 decesos anuales en España y sigue siendo la causa de muerte más prevenible que existe en el mundo, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

Efectos del tabaco en las mujeres

El tabaco genera en las mujeres algunos efectos particulares, además de los que ya conocemos y que son comunes también en los varones. Veamos en detalle.

1. Más ansiedad y más depresión

Un estudio científico de hace más de 10 años ya recalcaba que hay una asociación fuerte y significativa entre el hábito de fumar y los trastornos de salud mental entre las mujeres. Mucho más de lo que sucede entre los varones.

Esto genera un impacto a largo plazo. Resulta que las mujeres que fuman y cursan un episodio depresivo, tienen menos posibilidades de abordar un tratamiento para cesar el hábito con éxito. Así lo demuestra una investigación de 2017.

En realidad, lo más probable es que haya un círculo vicioso. Las mujeres que fuman tienen más tendencia a la ansiedad y la depresión; luego, la ansiedad y la depresión conducen a un incremento en el consumo de cigarrillos. Salir de este círculo es difícil sin ayuda profesional.

Aquí se crea una intersección entre la salud mental y el abuso de sustancias que resulta peligrosa. No solo hay que enfrentar los daños propios del tabaco, sino que se debe lidiar con lo deletéreo de levantarse cada día ansiosa o depresiva, con dificultades para concretar las actividades cotidianas.

2. Más efectos adversos de los anticonceptivos

Una revisión sistemática publicada en Nicotine & Tobacco Research encontró que las mujeres que toman pastillas anticonceptivas y fuman, sufren efectos no deseados en su cuerpo, como los siguientes:

  • El metabolismo de la nicotina se retrasa, por lo que la sustancia permanece más tiempo en circulación.
  • La reactividad cardiovascular aumenta. Hay más riesgo de hipertensión arterial y de trastornos de la coagulación.
  • Se afecta el estado de ánimo.
  • Aumenta el deseo incontrolable por consumir más tabaco, en comparación con las mujeres que fuman y no consumen pastillas anticonceptivas.
  • Se logra menos éxito al momento de encarar un tratamiento de deshabituación al tabaco.

Las mujeres que consumen cigarrillos y optan por este método de anticoncepción, deberían recibir evaluaciones más seguidas por parte del médico. Sería recomendable que se mida la presión arterial una vez por cuatrimestre y que se analice la analítica sanguínea de coagulación para descartar un riesgo elevado de formación de coágulos.

3. Infertilidad

Los efectos del tabaco en la fertilidad de hombres y mujeres ya han sido probados por la ciencia en múltiples oportunidades. Si nos focalizamos en ellas, encontramos lo siguiente:

  • Las mujeres tabaquistas reducen su posibilidad de éxito en un tratamiento de fertilidad asistida, según una revisión del año 2017.
  • La exposición continuada al humo del tabaco sería capaz de influir en la edad de la menopausia. Las mujeres que fuman tienen, en promedio, una cesación de sus ciclos menstruales antes que el resto. Así lo explica un estudio observacional del 2016.
  • El tabaco y las sustancias que contiene pueden afectar y detener el crecimiento del feto desde sus primeros días, comprobaron algunos estudios experimentales. Esto se asociaría con abortos tempranos.

Queda claro que, para mejorar la fertilidad, una recomendación esencial es abandonar el cigarrillo. Esto es responsabilidad de las mujeres que buscan un embarazo, pero también depende de las campañas de salud pública al respecto. En especial, considerando que cada vez se recurre más a técnicas de fertilización asistida, que reducen su eficacia cuando hay exposición al tabaco.

4. Menor densidad ósea

La osteoporosis es un problema frecuente entre las mujeres menopáusicas. Aquellas que fuman o lo han hecho en algún punto de su vida, tienen un riesgo elevado de padecer la condición.

Además, el consumo de tabaco en mujeres reduce la respuesta de cicatrización natural de los huesos. Por lo tanto, las fracturas que se pudiesen suceder serán más difíciles de resolver. Incluso, si media un tratamiento médico adecuado, como se explica en una publicación de Bone and Joint Research.

A los buenos hábitos de nutrición para prevenir la osteoporosis, debemos sumar la cesación tabáquica. Junto con un estilo de vida saludable que priorice el ejercicio, será viable disminuir la posibilidad de fracturas luego de los 50 años.



5. Más riesgo de cáncer

Que el tabaco es un factor de riesgo para cáncer de pulmón en varones y mujeres resulta un dato conocido. No obstante, en las mujeres, los cigarrillos pueden incrementar la posibilidad de desarrollar otros tipos de tumores:

  • Según la American Cancer Society, el tabaco se relaciona con el cáncer de cuello uterino. En teoría, las sustancias del cigarrillo promueven cambios malignos en las células del cérvix.
  • Aunque las fumadoras pasivas no parecen tener un riesgo elevado de cáncer de mama, sí se ha demostrado que las fumadoras activas tienen mayor incidencia de esta enfermedad.
  • Hay dos situaciones que podrían favorecer el desarrollo de un cáncer de vulva. Una de ellas es la infección por el virus del papiloma humano (VPH) y la otra es el tabaquismo.

Estos tres cánceres constituyen un gran problema para la salud femenina. Quiere decir que la reducción del hábito de fumar es prioritaria para disminuir la incidencia de estas enfermedades.

El tabaco entre las mujeres preocupa

El informe difundido por la Sociedad Española de Epidemiología celebra la reducción del consumo de tabaco en la población general, pero hace hincapié en la estadística femenina. Entre 1990 y 2018, la proporción de muertes en mujeres por culpa del cigarrillo creció.

Menos mujeres fuman en los últimos 30 años. Sin embargo, estamos viendo ahora el efecto sobre la mortalidad que tienen los años acumulados de tabaquismo.

Nunca es tarde para dejar el cigarrillo. Por supuesto que es difícil. Para eso necesitamos del apoyo médico, gubernamental, social y familiar. Consulta con un profesional de la salud o aprovecha las líneas telefónicas gratuitas de tu país para iniciar el camino que te alejará del tabaco.


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