Padrastro se hace cargo de su hija desde los 3 años, ahora la ayuda con su negocio y pintó a mano su pastelería

Es una realidad que muchas personas tienen la mala fortuna de que alguno de sus padres no les brinde un apoyo incondicional después de que lleven a cabo el proceso de divorcio. Por lo tanto, sienten un gran vacío en sus corazones.

Sin embargo, existen personas que se interesan en volver a enamorar a quien queda desamparada y acoger a sus hijos. Debido a esto, permiten que los más pequeños de la casa entiendan que por fin cuentan con alguien más que se va a encargar de apoyarlos para siempre.

A causa de ello, aprenden a quererlos como si fueran sus padres biológicos. Pues son conscientes de que esa persona les abrió su corazón, hace todo lo posible para entregarles lo mejor y segundo a segundo está presente para llenarlos de la motivación que necesitan para cumplir sus sueños.

Tal como lo hizo un padrastro que se hizo cargo de una niña desde que tenía 3 años y la llenó del más puro amor. Por eso, ella lo homenajeó cuando creció.

En este artículo te compartimos todos los detalles de esta historia. ¡No te la pierdas!

La difícil situación que tuvo que vivir la joven

Anthuane Cardoza es una mujer que tuvo que afrontar un doloroso episodio en sus primeros años de edad. Pues el matrimonio de sus padres se terminó y su papá se desentendió de ella.

Por lo tanto, se quedó viviendo únicamente con su madre y su figura paterna nunca le pasó una pensión que le ayudara a cubrir sus necesidades de la mejor manera. Además, tampoco tuvo el interés de transmitirle algunas de las enseñanzas más importantes de la vida.

Adicional a ello, cuando la joven creció y manifestó que quería estudiar repostería, le quitó mérito a ese sueño. Pues le dijo que no valía la pena y que mejor debería inclinarse por otra carrera. Sin importar que ese era el máximo anhelo de ella, pues desde que era pequeña se enamoró de la cocina y se dedicó a preparar un pastel a diario.

No obstante, un ángel guardián apareció en la vida de Anthuane cuando tenía 3 años de edad y se encargó de debilitar todas esas dificultades. De igual manera, desde el primer instante la impulsó a lograr todo lo que ella tenía en mente.

El vínculo entre el padrastro y Anthuane

Tras quedar sola, la madre de Anthuane volvió a sentir amor por una persona y formalizó las cosas con él. Aparte de demostrar que la quería de verdad, le hizo saber que iba a querer a su hija con todo el corazón.

Y desde el minuto 1 se encargó de revalidarlo de la mejor manera. Puesle inculcó valores, invirtió sus recursos para que a ella no le faltara nada y la llenó de cariños de calidad.

Además, la apoyó en todos sus gustos. Tanto así, que siempre la impulsó a entrar a la cocina para que pudiera experimentar todo lo que quería y aumentara sus conocimientos en repostería.

Adicional a ello, cuando Anthuane ya estaba próxima a decidirse por su carrera profesional, su madre y su padrastro acordaron construir un taller de repostería en el segundo piso de la casa. De esa manera, la joven sintió un apoyo inmejorable y se convenció de que quería trabajar en eso para toda la vida.

Posterior a ello, el padrastro se encargó de pintar el taller para que quedara con un aspecto agradable. A raíz de ese hecho, la joven se llenó de alegría y supo que tenía a un gran padre, aunque no tuvieran la misma sangre.

El homenaje

Previo a inaugurar la repostería, Anthuane publicó un video a través de TikTok para dar a conocer su negocio. En esa misma producción aprovechó para resaltar todo lo que su padrastro había hecho por ella.

De esa manera, le contó a todo el mundo que aquel hombre se había encargado de ella desde que tenía 3 años y le había ayudado a embellecer el taller en el que iba a materializar el sueño más importante de su vida.

Así mismo, ante los medios de comunicación peruanos manifestó que se sentía muy agradecida con él. Pues a lo largo de su vida ha sido la figura paterna que estuvo presente en las etapas más trascendentales para ella.

Debido a ello, una gran cantidad de internautas se conmovieron y felicitaron al hombre. De igual modo, muchas más personas compartieron las exitosas historias que también han tenido con sus padrastros.

Es así como se demuestra que el amor verdadero permite que las personas quieran a alguien como si fuese un miembro biológico de su familia, aunque tenga una información genética totalmente distinta.

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