¿Por qué es importante cuidar la piel de los niños en verano?

Seguramente más de una vez te has preguntado si durante el verano la piel de los niños requiere de cuidados especiales. En relación a la importancia de cuidar la piel de los niños, Anna Codina señala, en este estudio publicado en Offarm: farmacia y sociedad, lo siguiente:

“El grosor de la epidermis y la composición lipídica en los niños y en los bebés no varían significativamente respecto a la de los adultos. En cambio, la epidermis del bebé prematuro es marcadamente más fina, con un estrato córneo aún poco desarrollado”.

Por esta razón, los cuidados de la piel de los bebés prematuros son, según la autora, sumamente importantes y es evidente que, ante estas características, hay que tener muy en cuenta el mayor riesgo de penetración de los medicamentos y productos aplicados tópicamente a los bebés prematuros.

Cuidar la piel de los niños en verano

En lo que concierne a los bebés y a los niños, Codina, en su estudio, también señala que estos ya poseen una epidermis que cumple con una de sus funciones primordiales, la de barrera cutánea.

De todas formas, sí que existen diferencias en cuanto al desarrollo tanto de la epidermis como de la dermis, ya que esta no es completa al nacer. Se puede decir que la piel empieza un proceso de maduración y adaptación posnatal y, de forma gradual, se va pareciendo cada vez más a la piel del adulto.

En función de lo anterior, “es esencial tener especial cuidado al aplicar agentes tópicos sobre la piel de los niños, ya que la relación entre la superficie corporal y el peso es mayor que en los adultos, con el consiguiente incremento del riesgo de absorción percutánea”, reafirma Anna Codina.

Así pues, otra característica fisiológica en la infancia es que las fibras elásticas de los niños a partir de los 3 años ya son similares a las de los adultos.

Preocupaciones relacionadas con el sol

No es un dato menor tomar recaudos a la hora de tomar sol y destacar la cuestión de la fotoprotección en la infancia. Nunca está de más insistir en la importancia de proteger a los niños de los rayos solares, primero con la ropa adecuada (gorras, camisetas, sombreros), como evidencia este estudio publicado en The British Journal of Dermatology, y después con cremas y leches fotoprotectoras.

Es a la vez esencial considerar que es durante la infancia y la adolescencia cuando recibimos más de la mitad de la radiación ultravioleta que, al ser acumulativa, puede terminar desarrollando con el tiempo un cáncer cutáneo.

La idea no es ofrecer una mirada apocalíptica sobre el tema, sino adoptar las medidas necesarias para que el acto de zambullirse en una piscina y caminar por la playa sea objeto de alegría y placer. Por ende, al tomar sol, hay que extremar las protecciones solares en los niños, que se suman al resto de medidas para el cuidado de la piel en la infancia.

Todos los niños deberán usar protector solar a partir de los 6 meses de edad. Lo ideal es que el protector tenga al menos 50 SPF para lograr una mayor protección. Además, es importante retocar el protector cada 2 horas y evitar la exposición al sol entre las 12 del mediodía y las 4 de la tarde.

Otras formas de cuidar la piel de los niños en verano

Si bien el uso de protector solar constituye una de las medidas más importantes para cuidar la piel de los pequeños en esta época, existen otras recomendaciones que se pueden seguir. La aplicación de todos los consejos permitirá mantener la piel del niño en buen estado, evitando futuros problemas.

Dentro de las otras formas de cuidar la piel de los niños en verano destacan las siguientes:

• Usar cremas hidratantes: el uso de este tipo de cremas posterior a la exposición solar es importante para favorecer la regeneración, así como evitar el daño y la deshidratación. Lo ideal es usar una crema hipoalergénica.
• Moderar la exposición al sol: la idea es realizar actividadesal aire libre en las primeras horas de la mañana o al final de la tarde. De esta manera, se minimiza la exposición a la radiación UV. Además, se deben tomar descansos en la sombra de forma frecuente.
• Usar prendas ligeras: las telas gruesas y la ropa ajustada pueden generar reacciones cutáneas en los niños durante el verano por la transpiración. Lo ideal es usar ropa holgada, de algodón o de otras fibras naturales.
• Cambiar el pañal frecuentemente: los pañales usados en el verano deben ser cómodos y transpirables para minimizar el riesgo de dermatitis. Además, se deben cambiar con relativa frecuencia para evitar la humedad y la proliferación de bacterias.
• Usar ropa con protección UV: estas prendas son ideales para los más pequeños, ya que se la pasan todo el día jugando y resulta difícil retocar el protector solar con regularidad.
• Mantener una higiene adecuada: los niños deberán tomar dichas cortas y rápidas usando jabón neutro. Esto permitirá mantener la protección natural de la piel, disminuyendo la probabilidad de sufrir injurias solares.

Avances en el tema: la microbiota cutánea

Según información proveniente del Biocodex Microbiota Institute, “la piel está compuesta y recubierta por cientos de especies de microorganismos vivos, organizados de forma muy concreta: la microbiota cutánea. Una alteración de ese equilibro puede provocar una enfermedad de la piel”. 

Tiene, según esta misma fuente, varias funciones: defensiva, de barrera cutánea y reguladora del sistema inmunitario. La microbiota cutánea, así, va evolucionando de forma progresiva y varía de un individuo a otro según diferentes factores.

“Su desequilibrio está relacionado con enfermedades dermatológicas, como el acné, la psoriasis o la dermatitis atópica. Comprender la implicancia de la microbiota cutánea en los mecanismos que originan algunas enfermedades de la piel permitiría mejorar su tratamiento”.

Respecto a cuidar la piel de los niños en verano…

• La piel de los niños requiere de cuidados especiales y más aún durante el verano.
• Si bien los bebés prematuros son más sensibles, los niños también requieren de cuidados adicionales hasta que, progresivamente, su piel se aproxime a las condiciones del adulto.
• La fotoprotección siempre es esencial, aunque en la infancia y adolescencia adquiere ribetes especiales.
• Es importante estar atentos a las investigaciones sobre la microbiota cutánea que pueden iluminar el tema.
• Finalmente, lo más importante es el axioma respecto al cuidado de la piel de los niños: mejor prevenir que curar.

En definitiva, ¿sabías lo importante que es cuidar la piel de los niños en verano? Ahora que las dudas han quedado resueltas, ten presente siempre reforzar los cuidados en esta época del año. Así, mantendrás a tus pequeños protegidos y podrás disfrutar sin preocupaciones.