¿Por qué se produce la inflamación de las papilas gustativas?
Escrito y verificado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas
Las papilas gustativas son receptores sensoriales que se encuentran en la lengua. Al estar expuestas a la acción de los alimentos, podrían llegar a inflamarse. En este artículo, te explicaremos por qué se inflaman las papilas gustativas.
Cada papila está formada por células receptoras que envían señales nerviosas al cerebro. Gracias a ellas, somos capaces de discriminar entre sabores dulces, salados, ácidos, amargos y umami, vocablo japones que significa “sabroso”.
Cuando las papilas están inflamadas, se vuelven más pequeñas, blanquecinas y suelen doler ante el más mínimo contacto. Si aún no conoces qué puede hacer que las papilas gustativas se irriten, lee este artículo.
Factores inflamatorios de las papilas gustativas
Esta condición también es conocida como papilitis lingual y produce protuberancias pequeñas en la superficie de la lengua de color rojizo o blanquecino. Dependiendo de la ubicación las papilas afectadas serán diferentes, ya que los diferentes tipos (caliciformes, fungiformes, filiformes y foliadas) se distribuyen de una forma muy específica.
1. Hiperestimulación
Ocurre con más frecuencia después de comer alimentos picantes o salados. La hiperestimulación se debe a que las sustancias encontradas en este tipo de alimentos actúan como irritantes de las papilas gustativas.
La ingesta de algún líquido frío o crema helada podría ayudar a contrarrestar la inflamación.
2. Toxinas en la lengua
La frecuente exposición de la lengua a toxinas como el alcohol o el humo del tabaco es causa de irritación e inflamación de las papilas. Las toxinas provocan que las células que conforman estas estructuras retengan tanto grasa como líquidos.
Asimismo, el residuo de dichas toxinas van quedando sobre la lengua. Esa capa blanquecina se ve por lo general durante las mañanas. No es más que la manera en que el cuerpo las rechaza. Para evitarla, bastará con abstenerse de consumir alcohol y cigarrillo.
3. Estrés
Como se sabe, el estrés puede afectar negativamente muchas de las funciones del cuerpo. Las papilas gustativas no escapan de ello.
El estrés emocional conlleva muchas veces trastornos hormonales. A su vez, estos problemas terminan por incidir en el cuerpo de diversas formas. Una de ellas son las pequeñas úlceras que aparecen en la boca (aftas). Otra consecuencia posible es la inflamación de las papilas gustativas a causa de una disfunción en el sistema inmunitario.
Esto podría hacer que tanto la lengua como otras partes del cuerpo absorban gran cantidad de bacterias. Todo ello podría influir en que la inflamación de las papilas tarde mucho más tiempo en desaparecer.
Además de poner en práctica técnicas de relajación, sería conveniente acudir a consulta psicológica.
4. Traumatismos
Los traumatismos que afectan a la lengua generalmente se deben a mordeduras accidentales o lesiones durante procedimientos odontológicos. Como resultado, las papilas tienden a inflamarse de forma inmediata. En estas condiciones, suelen doler durante un largo período de tiempo.
Este tipo de traumatismos alteran el tejido de la lengua. Como se sabe, este órgano es un conjunto de músculos. Por tanto, podría lastimarse como el resto.
En caso de inflamación de las papilas gustativas, sería recomendable aplicar glicerina en la zona afectada. Si la herida fuera de consideración o el dolor persistiera, se deberá acudir al médico de inmediato. El especialista determinará la conducta que deberás seguir.
5. Candidiasis oral
La candidiasis oral, así como otros procesos infecciosos por hongos en la lengua, son otras de las causas habituales de la inflamación de las papilas gustativas. En estos casos, se debe acudir al médico cuanto antes. Él decidirá la conveniencia o no de tratar esta infección.
6. Quemaduras
Las quemaduras en la lengua son un tipo de accidente frecuente. Por ejemplo, ocurren cuando bebemos una taza de café muy caliente o al tomar una comida que acabamos de apartar del fuego.
Las quemaduras más graves pueden dañar las papilas gustativas y, por extensión, alterar su funcionamiento. Suelen tardar más tiempo en sanar de lo que somos conscientes, por lo que será crucial seguir las indicaciones del médico y tener cuidado en casa.
Cuando te suceda, bebe líquidos fríos. Este simple gesto atenuará la sensación de dolor e impedirá que la quemadura se extienda. La baja temperatura del líquido ingerido ayudará a que las fibras nerviosas de las papilas se restablezcan antes. Así, podrás seguir disfrutando del sabor de todos los alimentos que te apetezca comer.
7. Inmunodepresión
Toda condición de inmunodepresión hace más frecuentes los procesos infecciosos e inflamatorios, incluyendo la papilitis lingual. Por ejemplo, es el caso de los pacientes con VIH/SIDA, diabetes mellitus no controlada, ancianos o niños muy pequeños, trasplantados o personas que consumen esteroides de forma crónica por cualquier causa.
En definitiva, la inflamación de las papilas gustativas es una situación frecuente e incómoda, pero que tiene solución. Si ponemos el suficiente cuidado, no solo podremos volver a disfrutar de todos los sabores, sino de una boca saludable.
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