Recetas caseras para el dolor de juanetes

Los juanetes son una afección bastante común y todos podemos padecerlo en algún momento. Es importante saber cómo podemos aliviar el dolor, la inflamación y prevenir su crecimiento. Toma nota.
Recetas caseras para el dolor de juanetes

Escrito por Yamila Papa Pintor

Última actualización: 06 julio, 2023

Más de la mitad de la población sufre de dolor de pies; es bastante común y todos podemos padecerlo en algún momento. Así mismo, puede ser muy doloroso y molesto, dependiendo del caso. Seguro que aquellos que sufren de juanetes pueden asegurarlo.

Conoce cómo tratar este dolor tan horrible con recetas caseras para los juanetes, así como también recomendaciones y consejos eficaces.

Juanetes: causas y consecuencias

Los juanetes son una deformación del dedo grande (o gordo) del pie. También puede presentarse en el pequeño (conocido como juanete de sastre). Dicha articulación, en vez de estar recta se va angulando y adquiriendo una prominencia lateral por el hueso.

Las causas de los juanetes pueden deberse a factores mecánicos tales como uso de tacones muy altos o calzado estrecho, obesidad y sobrepeso, pisar mal, en ángulo o sin usar toda la planta del pie.

También hay factores hereditarios en relación a los juanetes. Si la madre los sufrió, hay una gran probabilidad (de alrededor del 65%) de padecerlos. Suelen aparecer a los treinta años y en ambos pies.

Los síntomas característicos son inflamación, enrojecimiento y tumoración de la zona, formación de durezas en la piel y dolor al caminar o al colocarse el calzado.

Juanetes

En muchos casos los juanetes conllevan una intervención quirúrgica, sin embargo, se pueden aprovechar las ventajas de los remedios caseros y consejos “de la abuela” para aliviar las molestias, retrasar su aparición o volverse una patología crónica.

Consejos eficaces en caso de sufrir de juanetes

Algunos de los consejos eficaces en estos casos son:

  • Visitar a un podólogo o un médico especialista cuando la malformación del pie es demasiado evidente o bien durante los primeros síntomas. Si se siente dolor en el lateral del pie o aparece una especie de “callo”, no dudes en recurrir a un experto.
  • Utilizar zapatos apropiados, es decir que no sean demasiado apretados para constreñir la deformidad. También se debe prestar atención al material del calzado, ya que el cuero, por ejemplo, puede hacer doler más, así como el plástico. Lo mejor es la tela.
  • Usar almohadillas para proteger el dedo afectado y evitar el roce con los zapatos. Siempre se aconseja llevar calcetines aunque sea verano.
  • Usar férulas o correctores que se colocan por las noches. Estos sirven para disminuir el dolor y evitar la evolución de los juanetes. Así se presionan las articulaciones y alinean progresivamente las zonas blandas sin perjudicarlas.
  • Aplicar hielo. En caso de que el juanete se hinche o esté enrojecido, un cubito de hielo cubierto con un paño puede reducir la inflamación.
  • Utilizar plantillas especiales. En el calzado se colocan unas plantillas que tienen la “forma” del juanete, controlando la deformación y corrigiendo el problema paulatinamente. Se evitará así el dolor y el crecimiento.
  • Siempre usar el calzado adecuado en relación a la actividad que se esté realizando. Cómodo y flexible deben ser las dos características obligadas en los zapatos que se usen a diario, sea para ir al trabajo, caminar o estar en casa. Para entrecasa o tareas domésticas, nada mejor que las sandalias o descalzo.
  • Masajear el pie a diario. Todas las noches, mientras miras televisión o lees un libro, puedes realizar un suave masaje en tus pies, usando aceites esenciales o cremas.

Masajear el pie a diario es un consejo eficaz para prevenir o aliviar los juanetes

  • Vigilar el peso. Como se dijo anteriormente, la obesidad es un factor determinante no sólo en la aparición sino también en el desarrollo de los juanetes. Sigue una dieta equilibrada. Consume vitaminas A, C y D y calcio para fortalecer tus huesos.
  • Hacer ejercicios para pies, que pueden ayudar a retrasar la aparición del juanete o una deformación más grave. Quítate los zapatos y estira primero el dedo gordo, luego el resto. Flexiona los dedos y sujétalos. Repite varias veces.

Remedios caseros para el dolor de juanetes

  • Realiza masajes con infusión de lavanda.

Primero, calienta a baño maría por dos horas 100 gramos de flores de lavanda en ¾ litro de aceite de girasol. Luego, filtra en una cazuela y añade otros 100 gramos de flores. Calienta de nuevo por dos horas más.

Después, filtra y guarda en un frasco de vidrio con tapa hermética, en un lugar fresco. Aplica con un suave masaje unas gotas para aliviar el dolor.

  • Aplica una manta eléctrica en la zona afectada durante quince minutos para reducir la inflamación.

Luego, aplica un poco de hielo (puede ser cubitos o paquete), dejando unos 15 minutos más. Esta diferencia de temperatura de ambas técnicas permite mejorar la circulación sanguínea y reducir las molestias y dolores.

  • Remoja tus pies durante diez minutos en un recipiente con tres litros de agua y dos cucharadas de sal gruesa.

Esto hará que se alivie el dolor por inflamación. También puedes utilizar la Sal de Epsom, que a su vez suavizan la piel y descansan las piernas.

  • Realiza pediluvios.

Luego de hervir 50 gramos de semillas de lino, 50 gramos de consuelda mayor y 30 gramos de malvavisco en un litro de agua.

  • Practica técnicas de “Shiatsu”.

Este es un popular masaje que sirve para aliviar los dolores y lograr que las articulaciones no se sigan deformando. También la acupuntura puede serte de gran ayuda.

  • Aplica la pulpa de un tomate madura sobre el juanete.

Reducirá la inflamación y el enrojecimiento de la zona, además de traer alivio por su frescura.

¡Inténtalo!

Entonces, en caso de sufrir esta afección, recuerda que puedes contactar a tu médico para una evaluación y tratamiento especifico según tu caso. No obstante, aplicar estos remedios y consejos, sin duda, pueden ayudarte a aliviar el dolor.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.