Remedios eficaces para el dolor en las articulaciones
Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López
Los motivos por los cuales se siente este dolor pueden ser varios. Pueden ocurrir por hacer un trabajo que exija un sobre esfuerzo o por hacer un movimiento brusco donde ciertos grupos musculares y articulaciones se vean involucrados.
De la misma forma, los hábitos alimentarios suelen ser una de las causas de padecerlo. También enfermedades como la artritis reumatoide, incluso la práctica de deportes específicos y en otros casos, la edad avanzada.
A continuación, se mencionan algunos remedios eficaces que pueden ayudar a tratar esta molestia en las articulaciones. Se destaca que estas alternativas no son consideradas como únicos tratamientos para emplearlos contra esta dolencia.
Al padecer esta incomodidad o sospechar de tenerla se sugiere consultar con un médico como primera opción. Luego de los análisis y estudios correspondientes, este podrá indicar un tratamiento que se adapte a las necesidades de cada persona.
Recetas naturales para el dolor en las articulaciones
Estos tratamientos provienen de los conocimientos de la sabiduría popular y se cree que podrían aplicarse en casos donde el dolor es leve o esporádico. En otras palabras, no se sugieren cuando hay patologías crónicas o severas como la artritis o la artrosis.
Por ejemplo, en el caso de haber levantado peso en el gimnasio y presentar una molestia o quizás haber escrito por largas hora en el ordenador, lo que en muchas ocasiones causa incomodidad en las articulaciones de los dedos y las muñecas. Es aquí cuando se recomiendan estas alternativas.
Algunas de estas recetas son:
Aplicar frío y calor
Este estudio publicado en la Revista de la Sociedad Española del Dolor explica que la aplicación de frío y calor en las articulaciones es una modalidad de termoterapia superficial. De forma simple, describe que esta se basa en la colocación controlada y alternada de ambas temperaturas para el alivio del dolor en algunas articulaciones y músculos. Los expertos indican que esta terapia se emplea en el tratamiento de afecciones leves.
En ese mismo orden de ideas, esta investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad de Extremadura aclara que tanto el frío como el calor superficial tienen efectos terapéuticos. Ambos logran romper el ciclo muscular conocido como dolor-espasmo-dolor. Del mismo modo, podrían llegar a reducir la inflamación en las articulaciones.
El calor aumenta la relajación de los tejidos de colágeno, contribuye a la disminución de la rigidez articular, reduce el dolor y la inflamación, alivia el espasmo muscular y aumenta el flujo sanguíneo.
Para su aplicación, se sugiere tener a la mano un recipiente con cubos de hielo, otro con agua caliente (mejor que no esté recién hervida), dos toallas y seguir los siguientes pasos:
- Envolver unos cubos de hielo en una de las toallas y colocar la otra dentro del recipiente con agua caliente.
- En la articulación afectada, colocar la toalla con el hielo durante unos 15-20 segundos y retirarla.
- Apenas se retire la toalla con hielo, colocar la caliente por el mismo lapso de tiempo.
- Se puede repetir este proceso durante 25 o 30 minutos.
- Se sugiere colocarlo durante lapsos de tiempo que no generen ardor en la zona. Incluso con el uso de una toalla podría quemarse la piel.
- Es recomendable estar en una posición cómoda donde la articulación no se encuentre comprometida o tensa, o sea, necesita estar relajada.
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Otros remedios naturales
Al padecimiento articular se le atribuyen varios tipos de lesiones o enfermedades. Según esta información de Medline Plus otras causas son las enfermedades autoinmunitarias, como la artritis reumatoidea y el lupus. No obstante, también puede deberse a algún esfuerzo o sobrecarga poco usual. Esto suele producir una distensión muscular y esguinces en la eventualidad.
Para ayudar a prevenir esta clase de padecimiento se aconsejan algunas alternativas naturales que, al consumirlas con moderación, pueden ser de ayuda en el cuidado de los dolores en las articulaciones. Entre estas pueden mencionarse:
- Infusión de ortiga: en la actualidad la ortiga es utilizada de varias formas, una de ellas es como infusión. Se consume de este modo porque puede adquirirse en extractos de plantas frescas, secos y fluidos. En esta información de la Fundación Española de Nutrición (FEN) se muestra que contiene minerales como el calcio, el hierro y el potasio. Se le atribuyen propiedades antiinflamatorias, lo que la posiciona como una opción en el tratamiento contra los dolores en las articulaciones.
- Infusión de cúrcuma: según esta investigación realizada en la Universidad Complutense de Madrid, los compuestos fitoquímicos presentes en el rizoma anaranjado de la cúrcuma son su característica principal, estos curcuminoides le otorgan propiedades medicinales a esta planta. Se cree que sus propiedades antiiflamatorias pueden ser de provecho en el tratamiento contra los dolores en las articulaciones.
- Infusión de romero: el romero es una hierba aromática y medicinal conocida por su uso en la dieta mediterránea. Se cree que puede ayudar a reducir dolores articulares debido a su composición de ácido ursólico. Este estudio realizado en la Universidad de Puebla explica que este componente es utilizado en el tratamiento de infecciones que se producen alrededor de los cartílagos o en el tratamiento del dolor de las articulaciones de manos y rodillas.
- Tópico de vinagre de manzana: el uso del vinagre de manzana como tópico obedece a los conocimientos de la cultura popular, es decir, hasta la fecha, no hay un estudio científico que respalde su uso tópico para el tratamiento de los dolores en las articulaciones. Se cree que al calentar una taza de vinagre y frotarlo en las áreas donde duela puede ayudara a aliviar el dolor.
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¿Frutas para aliviar el dolor articular?
Hasta ahora no se han publicado estudios científicos que sustenten el consumo de frutas para tratar las dolencias en las articulaciones. Sin embargo, esto se relaciona con la ingesta de algunos nutrientes que pueden obtenerse al ingerir ciertas frutas de manera moderada como complemento de una dieta.
Para esto último, es recomendable consultar con un nutricionista quién podrá aconsejar que tipo de frutas puede comer cada persona, basado en las características y necesidades de forma individual. De igual manera, uno de los objetivos es conseguir vitaminas importantes como la A, B, E, K, C, etc, así como ciertos minerales, por ejemplo, el calcio, el hierro, el potasio y el magnesio.
Algunas de las frutas que se sugieren son:
- Kiwi.
- Pera.
- Piña.
- Mango.
- Manzana.
- Arándanos.
Otros alimentos…
Mantener una alimentación balanceada a veces puede ser complejo para algunas personas debido al tiempo que amerita cocinar y preparar los alimentos. Sin embargo, se recomienda darle importancia a este hábito y posicionarlo entre los principales, ya que de la importancia de una buena alimentación dependen algunos factores importantes de la salud, entre ellos, prevenir el dolor en las articulaciones.
Algunos de los nutrientes que el organismo necesita a diario pueden obtenerse con estas infusiones y frutas que se han recomendado hasta aquí. No obstante, se recomienda incorporar verduras y hortalizas como la acelga, la berenjena, la calabaza, la espinaca, el rábano, entre otras.
Imágenes cortesía de Peter Stevens, Dave Kleinschmidt, Steven Depolo, James Buck, SuperFantastic, Rhona Mae Arca y Kaolin Fire.
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