Tensión baja: ¿se puede tratar de forma natural?
Revisado y aprobado por el médico José Gerardo Rosciano Paganelli
Muchas personas sufren de manera puntual problemas de tensión baja. La hipotensión se da cuando la presión sanguínea es mucho más baja de lo habitual.
Pero hay personas que las padecen de manera continuada, en especial en épocas de calor o situaciones de estrés. Repasamos los síntomas que la acompañan, las posibles causas y los remedios naturales que nos ayudarán a prevenirla.
Síntomas de la tensión baja
Para empezar, detallamos los síntomas más frecuentes de la tensión baja:
- Fatiga.
- Apatía.
- Debilidad.
- Mareos.
- Náuseas.
- Somnolencia.
- Sudoración.
- Palidez.
Causas más frecuentes
Entre las posibles causas de la tensión baja destacan:
- Alimentación deficitaria en hierro y vitaminas del grupo B.
- Hemorragias internas del tracto gastrointestinal, riñón o colon.
- Niveles bajos de azúcar en sangre.
- Mal funcionamiento de la tiroides.
- Problemas endocrinos.
- Embarazo.
- Deshidratación.
- Efectos secundarios de algunos medicamentos, como antidepresivos y diuréticos.
- Alteraciones cardíacas.
Tratamiento natural
En los casos de hipotensión, es muy importante que sea el médico la persona que determine los medicamentos que debemos tomar y como se debe realizar el seguimiento de la enfermedad.
Además de recurrir a alguno de los remedios naturales que comentaremos para acelerar la recuperación, te recomendamos sencillos consejos:
- Aumentar el consumo de sal marina.
- Alimentarnos de manera equilibrada y sin abusar de nada.
- Comer cantidades pequeñas y con frecuencia.
- Tomar zumos naturales de frutas y hortalizas.
- Consumir cereales integrales.
- Beber suficiente agua durante el día, entre comidas.
- Hacer ejercicio suave a diario.
- Dormir con la cabeza un poco elevada.
- No hacer movimientos bruscos.
- Evitar el calor excesivo.
- Usar medias de compresión.
Repasamos algunos alimentos y plantas medicinales con propiedades específicas para elevar la tensión arterial.
Polen
El polen de abeja puede ser un remedio excelente para subir un poco la presión, sin alterarla. Además, es muy completo, ya que contiene proteínas, vitaminas, minerales e hidratos de carbono.
Se recomienda en especial a personas que también sufran anemia o debilidad o falta de apetito. También en situaciones de desgaste, durante el embarazo y la lactancia y en general, para aumentar nuestras defensas. Si lo tomamos a diario notaremos con rapidez la energía que nos aporta.
Podemos consumir una cucharadita diaria de polen bien molido, para que nuestro organismo lo asimile bien. Lo podemos mezclar con agua, si no nos molesta su sabor, o bien con zumo, yogur, etc. Las personas que sospechen que pueden tener alergia al polen pueden empezar tomando un granito e ir aumentando un granito cada día.
Regaliz
Esta raíz tiene muchísimas propiedades para la salud y se recomienda para subir la tensión. De hecho no deberían tomarla aquellas personas que sufran hipertensión arterial. También ayuda en el proceso digestivo y a proteger el hígado, así como en casos de resfriados, tos y dolor de garganta.
Encontramos esta raíz en forma de pastillas o extracto, aunque también podemos prepararla en infusión. Para ello la herviremos al menos 10 minutos debido a su grosor.
Por último, también podemos conseguirla natural, en forma de palito, para ir masticándola durante el día. Muchas personas la consumen así para ayudar a dejar el hábito del tabaco.
Romero
El romero es un tónico excelente que sube un poco la tensión, además de tener potentes propiedades circulatorias. Es muy rico en hierro y tiene un alto poder antioxidante.
Tomaremos infusiones de romero con miel a media mañana y a media tarde durante 10 días. También podemos aplicarnos tópicamente alcohol de romero, tonificante y refrescante.
Aceite esencial de menta
La menta tiene un aroma delicioso y muy refrescante. Además de revitalizarnos también nos ayuda en casos de mareos, vértigos y migrañas.
Podemos aplicar una gota del aceite esencial en cada sien y masajear con suavidad. También podemos mezclarlo con un aceite vegetal, aloe vera o con nuestra crema corporal.
Hidroterapia
Esta técnica se basa en el uso del agua a diferentes temperaturas para activar y relajar nuestro organismo.
En este caso recomendamos los baños alternos de pies y piernas. Lo podemos hacer usando cubos con agua fría y agua caliente o bien en la misma ducha.
Lo importante es empezar un poco por agua caliente, unos 10 segundos, y después con agua fría unos 30 segundos, e iremos alternando caliente y frío. Finalizaremos con agua fría y secaremos las piernas frotándolas bien con una toalla.
Estos remedios seguro que podrán ayudarte a controlar la hipotensión, pero recuerda que es importante que tu médico realice un seguimiento si aparecen los síntomas de forma continuada.
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