Todo lo que debes saber sobre fetus in fetu
Revisado y aprobado por el biotecnólogo Alejandro Duarte
El primer caso de fetus in fetu fue reportado en el año 1800. Desde entonces se ha tenido noticia de unos 200 casos en todo el mundo. La rareza de esta anomalía y su dispersión geográfica han impedido que se lleven a cabo estudios a fondo sobre este fenómeno.
El descubridor de esta extraña condición fue Meckel. Le dio el nombre de fetus in fetu para referirse a aquellos casos en los que un gemelo parásito es hallado en el interior de su hermano sano, el cual le sirve como huésped.
Es muy usual que esta enfermedad se diagnostique inicialmente como una tumoración no dolorosa. El 89 % de los casos han sido detectados en los primeros 18 meses de vida. Sin embargo, hay muchos casos en los que se diagnostica tardíamente.
El fetus in fetu es una enfermedad rara o huérfana
El fetus in fetu es una de esas enfermedades que han sido llamadas huérfanas, raras o minoritarias. Hasta el momento han sido identificadas unas 7000 enfermedades dentro de esta categoría. Dentro de las 10 más raras está el fetus in fetu.
Solamente están documentados unos 200 casos en todo el mundo. Se estima que esta anomalía ocurre en 1 de cada 500 000 nacimientos. En la mayoría de los casos se diagnostica durante la infancia. Sin embargo, también se ha encontrado en adultos de hasta 47 años de edad.
Quizá te interese: 11 hábitos que debes evitar durante el embarazo
Constituye una variante de los gemelos parasitarios
El fetus in fetu es una variante del fenómeno conocido como gemelos parasitarios. Esta es una condición en la que hay dos gemelos unidos y uno de ellos tiene el cuerpo mucho más pequeño que el otro.
En estos casos, el gemelo huésped, o autósito, permite la supervivencia del parásito, ya que este no tiene órganos propios. El fetus in fetu también ha sido considerado un caso extremo de gemelos siameses.
El fetus in fetu es un accidente
No se conoce exactamente cuál es la causa para que se produzca este fenómeno. Simplemente se sabe que se trata de un accidente que ocurre en algún punto de la formación del cigoto. Por alguna razón, los gemelos no se separan completamente y permanecen unidos en alguna zona de su cuerpo.
Todo esto ocurre antes de la formación del embrión. Lo que sigue es que uno de los gemelos se desarrolla normalmente, mientras que el otro se atrofia. De este modo, permanece en el interior del gemelo sano y depende completamente de él para su supervivencia.
El fetus in fetu tiene una apariencia extraña
Es frecuente que el feto hospedador muera antes de nacer. Cuando esto no ocurre, el bebé muestra un abultamiento en la zona en donde esté alojado el gemelo parásito. En un 80 % de los casos esto tiene lugar en la región abdominal. Sin embargo, también es posible que el gemelo parasitario se aloje en el escroto, el cráneo, etc.
El fetus in fetu es un humanoide. Al ser extraído aparece envuelto en una membrana que lo hace similar a un huevo de gallina. Sin embargo, es sumamente duro y bastante grande. Cuando se saca de esa especie de cascarón, el gemelo parasitario se ve de color blanco. Al realizar ese procedimiento muere, pues depende por completo del gemelo sano.
Descubre: ¿Es seguro consumir cafeína durante el embarazo?
El fetus in fetu y el teratoma
El teratoma es un tumor que se encuentra encapsulado y que contiene restos de tejidos, e incluso órganos. Hay referencias a teratomas que contienen pelos, dientes, huesos y hasta corazones, aunque esto es bastante infrecuente.
Por sus características, el teratoma se confunde a veces con el fetus in fetu. Los investigadores han establecido criterios diferenciales entre uno y otro. Los teratomas pueden volverse malignos, mientras que el fetus in fetu no. Así mismo, para que se pueda hablar de fetus in fetu, debe haber columna vertebral.
Representa un riesgo para el hospedador
El gemelo parásito constituye un riesgo potencial para el gemelo sano. Este se convierte en una carga que lleva dentro de su organismo y que no cumple con ninguna función. Llega a pesar hasta 1 kilogramo. No tiene cerebro, sino una cavidad craneal vacía. Tampoco tiene cavidad torácica, sino que en su lugar posee carne maciza.
El riesgo también viene dado por la ubicación del gemelo parásito. Como ya lo anotamos, casi siempre se ubica en el abdomen. Sin embargo, hay casos en los que está en la cavidad oral (6), en el cráneo (7-9), en el hígado (10) y otras localizaciones peligrosas. Se han reportado 13 casos en los que coexisten más de dos gemelos parasitarios.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Lugones Botell, M., & Ramírez Bermúdez, M. (2013). Fetus in fetu. Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología, 39(1), 63-68.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.