¿Puedo tomar las mismas pastillas anticonceptivas que usa mi amiga?

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto

Escrito por Daniela Echeverri Castro

Última actualización: 13 agosto, 2024

Si estás considerando tomar pastillas anticonceptivas, puede que te estés preguntado si puedes usar la misma fórmula de tu amiga. Ya sea porque ella te las ha recomendado, o bien, porque quiere regalarte las que ya no toma. ¿Es seguro? ¿Va a funcionar igual?

Si bien es importante implementar un método de planificación cuando vas a tener relaciones sexuales y quieres evitar un embarazo, no es buena idea seguir la receta de otra persona. Al ser un enfoque de tipo hormonal, es necesario hacer algunas consideraciones previas antes de su consumo. Te lo explicamos.

¿Por qué no es recomendable usar las mismas pastillas anticonceptivas de mi amiga?

No es infrecuente encontrar amigas que toman las mismas pastillas anticonceptivas. Este método de planificación es uno de los más demandados por todas las mujeres debido a su efectividad. Y aunque es uno de los más seguros y prácticos, no está exento de riesgos. Hay casos en los que es mejor descartarlo.

Dicho esto, el problema radica cuando una amiga recomienda a otra su fórmula solo porque a ella le resulta efectiva. La desinformación hace pensar que todas son lo mismo, pero no es así. Se ignora que están disponibles en varias presentaciones y composiciones, que se eligen de acuerdo a las necesidades individuales.

Como lo detalla una publicación del Sistema de Salud de la Clínica Mayo, estas píldoras pueden tener una o dos hormonas. Hay combinadas de estrógenos y progesterona, o también de progesterona sola. Además, su concentración varía, al igual que su forma de consumo y sus posibles riesgos y beneficios.

La función principal de estas hormonas es evitar que el ovario libere al óvulo y, por ende, impedir el embarazo. No obstante, tienen otros efectos en distintas partes del cuerpo, como a nivel de los vasos sanguíneos, en las mamas, en el cerebro, en la piel, en la grasa corporal y en los factores de coagulación.

No quiere decir que sean perjudiciales —pues en realidad, son seguras para la mayoría de las mujeres—, pero sí hay que ingerirlas con precaución. Al momento de elegir una opción u otra, es necesario tener en cuenta factores como:

• la edad,
• el historial médico
• y el estado de salud actual.

Por eso, es estrictamente el médico o el ginecólogo quien debe recetarlas de manera individual. Ahora mismo, tanto tú como tu amiga pueden acudir a un centro de salud para saber con seguridad qué tipo de pastillas anticonceptivas tomar. Incluso, puedes informarte sobre otros métodos de planificación.

Durante la consulta, el profesional realizará varias preguntas de rutina y revisará los antecedentes. Asimismo, hará chequeos generales como la medida de la presión arterial y la toma del peso corporal. En función de sus observaciones, determinará cuáles son las píldoras adecuadas y su concentración de hormonas.

Por último, alentará a seguir un control de planificación. De este modo, se programan nuevas consultas para determinar cómo asimila el cuerpo las pastillas o si es necesario realizar algún ajuste.

Principales contraindicaciones para tener en cuenta

En este punto queda claro el motivo por el que no debes tomar las mismas pastillas anticonceptivas que tu amiga; ambos cuerpos son diferentes y probablemente su tolerancia a las hormonas no es igual. La decisión de implementar este método debe estar supervisada por un profesional.

Y es que como lo detalla una publicación de Planned Parenthood —quienes se especializan en salud reproductiva, educación sexual e información sobre sexualidad—, este método de planificación no es para todo el mundo. En particular, se han identificado las siguientes contraindicaciones para el consumo de píldoras combinadas:

• Pacientes que fuman. El cigarrillo y los anticonceptivos con estrógeno no son compatibles. Usarlos en simultáneo aumenta el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular o un ataque cardíaco.
• Trastornos de la coagulación. Se trate de un trastorno hereditario o de antecedentes de problemas de coagulación, hay que evitar la ingesta de pastillas anticonceptivas combinadas. Lo mismo si hay complicaciones evidentes en las venas, como várices pronunciadas.
• Trastornos cardiovasculares. Las pacientes con antecedentes de presión arterial alta, ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y angina de pecho deben evitarlas, debido a que ejercen efectos sobre los vasos sanguíneos.
• Dolores de cabeza recurrentes. En especial, la migraña con aura.

En cuanto a las pastillas de solo progestina, se desaconsejan en pacientes con antecedentes de lupus o riesgo de cáncer de mama. También en caso de insuficiencia renal, enfermedad hepática, factores de riesgo de cáncer de cuello uterino, de ovario o de endometrio.

¿Qué debes recordar sobre este método de planificación?

Si estabas considerando usar las mismas pastillas anticonceptivas de tu amiga, debes recordar por qué no es buena idea. Ten presente que es un método de anticoncepción hormonal que, si bien suele ser eficaz y seguro, no está exento de riesgos. Además, debe adaptarse a tus necesidades tras una evaluación médica.

Como todo fármaco, no todas las personas lo toleran bien. Hay ciertas condiciones que no son compatibles con el método, debido al riesgo de complicaciones. Además, y no menos importante, no sirven como barrera frente a las enfermedades de transmisión sexual. Lo ideal es complementar su uso con el preservativo.