Cómo tratar aftas y úlceras bucales de manera natural
Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas
Las aftas bucales son pequeñas lesiones que aparecen en la parte interior de los labios, las mejillas o el paladar. Normalmente suelen ser molestas, dolorosas y tardan mucho tiempo en curarse. Sin embargo, ¿sabías que pueden tratarse con algunas alternativas naturales caseras?
Conoce en este artículo cómo tratar las aftas bucales de manera natural.
¿Qué son las aftas bucales?
Se denomina afta o llaga a una ulceración que puede aparecer en los carrillos, los labios, la lengua, también en el velo del paladar, incluso en la base de las encías.
Por lo general, las aftas causan dolor y se presentan inicialmente como manchas inflamadas rojas, que posteriormente se abren y adquieren un color de tonalidad blancuzca o en ocasiones amarillenta con un halo enrojecido a su alrededor.
También se le conoce como úlcera bucal o estomatitis aftosa y suelen durar entre 7 y 20 días. Es necesario saber que es bastante común que reaparezcan en el mismo sitio.
Entre las principales causas de su aparición están:
- Deficiencias inmunitarias por enfermedades o problemas alimentarios.
- Lesiones en la boca como, por ejemplo, al usar dentaduras postizas, cepillarse bruscamente los dientes, morderse, roce entre dientes, etc.
- Cambios hormonales como, por ejemplo, durante el período menstrual femenino.
- Reacciones alérgicas a los alimentos como por ejemplo los ácidos o los frutos secos
- Estrés
Las aftas y llagas suelen mejorar de manera espontánea, aunque podemos ayudar la cicatrización y desaparición utilizando ciertos remedios. Si al cabo de unos días no ves mejoría, te aconsejamos sería conveniente que consultes con el médico para llevar a cabo un tratamiento más adecuado.
A continuación te presentamos:
Alternativas naturales para aftas bucales
Es muy importante considerar que ninguna de estas alternativas naturales puede ser un sustituto de algún medicamento previamente recetado por un profesional, y que de comenzar su uso o aplicación, y luego consultar a un médico, pues quizás se deban utilizar para reforzar lo que se nos sugiera en una consulta profesional.No se recomienda atribuirle características “milagrosas” a estas alternativas, ya que el cuerpo humano, especialmente a nivel de nuestro organismo, es más complejo de lo que solemos imaginar y debemos atenderle de manera responsable y con conciencia.
Dicho esto, entonces se pueden aprovechar los beneficios de algunos productos naturales para aliviar los síntomas y ayudar a curar las llagas y aftas, entre estos podemos mencionar:
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Miel
La miel de abejas tiene propiedades antimicrobianas y cicatrizantes. Para aplicarla como tratamiento es importante secar la zona afectada con un lienzo o papel absorbente y colocar unas gotas de miel en el centro de la llaga.
Luego se debe dar un pequeño masaje, sea con los dedos bien lavados y limpios, o con la ayuda de un algodón o gasa que estés previamente desinfectados.
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Bicarbonato de sodio
De acuerdo a algunos especialistas, el bicarbonato quema la membrana de fibrina que recubre la herida, favoreciendo su cicatrización.
Se recomienda entonces, diluir 1 cucharadita de bicarbonato en 1 taza de agua y realiza enjuagues con esta solución manteniéndola en la boca la mayor cantidad de tiempo posible. Lo recomendable es hacerlo entre 3 y 4 veces al día.
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Sal en grano
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Remedio de salvia
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Aloe vera
Entre las propiedades del Aloe vera está la cicatrización de úlceras y la protección contra el ataque de bacterias. Utiliza un tallo de sábila cortado longitudinalmente, separa la piel de la planta y coloca la pulpa sobre la úlcera. Por lo general, sentirás alivio en pocos minutos.
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Vinagre de sidra
Con propiedades similares a las del bicarbonato puede ayudarte a curar las aftas más rápido, aunque tendrás que soportar un poco el ardor. Mezcla ½ taza de vinagre de sidra y ½ taza de agua tibia y haz gárgaras 2 a 3 veces al día hasta que las úlceras desaparezcan.
Por último, es demandante recordar la importancia de hacer los esfuerzos mínimos por tratar de llevar un estilo de vida sana, donde se incluya una dieta balanceada y responsable que incluya todos los macronutrientes requeridos al día.
Además, si agregamos algún tipo de actividad física entre 3 y 4 veces a la semana, pues obtendremos un estilo de vida con menos estrés y menores posibilidades de adquirir una afta o ulcera.
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